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Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

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  • Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

    Pedro J. Ramírez ya no es director de El Mundo. Veinticinco años después de fundar el rotativo, el segundo más importante del país en número de ventas, el polémico periodista ha sido relegado este miércoles de la dirección por los propietarios del diario, según han informado a este medio fuentes de Unidad Editorial.

    Su lugar lo ocupará el hasta ahora vicedirector Casimiro García-Abadillo, quien se unió a la aventura periodística que emprendió Pedro J. el mismo año de la fundación del diario, 1989.

    Los detalles económicos de la salida serán negociados este jueves en la reunión que mantendrá el consejo de administración de Unidad Editorial. Según ha podido saber este periódico, Pedro J. habría pedido alrededor de 20 millones de euros por su salida.

    Pedro J. habría pedido unos 20 millones por dejar la dirección, pero su salida podría cerrarse por 12
    Sin embargo, las fuentes consultadas por este periódico apuntan a que la salida del veterano periodista, de 61 años, podría cerrarse en 12 millones y la permanencia de Pedro J. en el organigrama de la empresa.

    A cambio, el hasta hoy mismo director del diario no podría trabajar durante dos años en ningún otro medio de comunicación. No obstante, todos estos detalles serán negociados y cerrados en la reunión de este jueves.

    El nuevo director, Casimiro García-Abadillo, llega a la dirección del periódico con el objetivo marcado por la empresa de restablecer las buenas relaciones con el Partido Popular. La publicación en El Mundo de las cuentas suizas del extesorero Luis Bárcenas, así como las críticas constantes del ya exdirector a la gestión de Mariano Rajoy habían derivado en una guerra abierta entre los responsables del partido del Gobierno y la publicación que dirigía Pedro J. Ramírez.

    Así, otro de los objetivos marcados por la empresa a García-Abadillo será mejorar la dramática situación económica que vive el diario y Unidad Editorial, que había registrado unas pérdidas de 331 millones en 2011 y de 470 millones en 2012. De hecho, el diario había ejecutado desde el año 2009 hasta tres tres Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) y un plan de bajas incentivadas.

    Secreto a voces

    La salida de Pedro J. de El Mundo era un secreto a voces desde hacía varios meses. Los rumores sobre su posible salida de la dirección del medio no eran ni tan siquiera desmentidos por el periodista, quien más allá de ampliar la repercusión de las noticias que apuntaban a su salida a través de retweets en la red social Twitter, no eludía su posible salida en sus apariciones en los medios de comunicación.

    De hecho, en una entrevista concedida al diario digital Voz Populi el pasado mes de diciembre, Pedro J se refería en estos términos a una hipotética salida del diario que él fundó: "Ahora tengo 61 años y llevo 33 de director. Por lo tanto, temer... es imposible que yo tema porque toda mi vanidad y mi ansia están colmadas (...) Si yo dejara de ser director de El Mundo, no sería un disgusto. Ahora, también es verdad que si hay una operación destinada a destruir el proyecto intelectual que encarna nuestro periódico, yo lucharé contra ella e intentaré por todos los medios que nuestra manera de entender el periodismo subsista y siga desarrollándose, preferentemente en El Mundo. Si no, en otro soporte".

    Su último servicio a la empresa ha sido liderar el "cambio de piel" de la publicación

    De hecho, que el propio periodista señalara que podría continuar su proyecto en otro soporte diferente al diario El Mundo desató nuevos rumores sobre su futuro. Unos rumores que se vieron incrementados por el hecho de que el veterano periodista tiene reservado un dominio en internet bajo el nombre de El Universal. Así, en los burladeros periodísticos también se especulaba con la posibilidad de que Pedro J. utilizara la multimillonaria indemnización de su despido para comprar El Confidencial. No obstante, este extremo parece muy lejano en el día de hoy.

    25 años como director

    La salida de Pedro J se produce el mismo año que el periodista iba a cumplir 25 años al frente de El Mundo. Su último servicio a la empresa ha sido liderar el "cambio de piel" de la publicación, tal y como él mismo bautizó a la operación que ha tratado de integrar el periódico en papel y el digital junto al lanzamiento y potenciación del sistema de pago por noticias de Orbyt, que incluye la creación de El Mundo de la Tarde, una edición vespertina que fue lanzada hace dos meses.

    El periodista comenzó su trayectoria periodística en el diario conservador ABC en 1975. Apenas cinco años después fue nombrado director de Diario 16. Tras su destitución al frente de esta publicación, Pedro J emprendió la aventura de El Mundo. Como principal exponente de su labor periodística deja haber destapado la actividad de los GAL. No obstante, su nombre quedará asociado también de por vida a la llamada 'teoría de la conspiración' sobre los atentados del 11-M en Madrid. Una teoría que fue descartada por los tribunales pero que siempre ha encontrado un hueco en las páginas del rotativo que hasta hoy ha liderado Pedro J. Ramírez.


    Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo' - Público.es

  • #2
    Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

    No muerdas la mano que te da de comer.

    Comentario


    • #3
      Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

      Eso de "deja" suena como un eufemismo.

      Comentario


      • #4
        Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

        hola que pasa? se jubila o se va dedicar al porno gore fetichista?

        Comentario


        • #5
          Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

          Pedro J. Ramírez deja El Mundo para dedicarse al periodismo

          Comentario


          • #6
            Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

            Pues García-Abadillo...

            Comentario


            • #7
              Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

              Dicen que entre otras cosas por presiones del gobierno. El Mundo no es el que destapó el caso Bárcenas?? Y el del ático del presidente de la comunidad de Madrid?

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              • #8
                Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

                Originalmente publicado por Astros_neo Ver Mensaje
                Dicen que entre otras cosas por presiones del gobierno. El Mundo no es el que destapó el caso Bárcenas?? Y el del ático del presidente de la comunidad de Madrid?
                Seguro!,y lo de la Infantita *********** y su marido caradura.

                Comentario


                • #9
                  Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

                  El Gobierno se desvincula de la destitución de Pedro J..


                  Sáenz de Santamaría dice "respetar" la labor de los periodistas y asegura que el Ejecutivo "no interfiere en las decisiones empresariales".




                  "El Gobierno no interfiere en decisiones empresariales que toman los gestores y directivos por la situación de sus empresas". Así de contundente se ha mostrado Soraya Sáenz de Santamaría al responder sobre si podía negar rotundamente haber influido en la destitución del director de El Mundo, Pedro J. Ramírez.

                  El periodista, que fundó la cabecera hace 25 años, ha contribuido, con su despedida, a avivar los rumores sobre los motivos de su "mísera caída": resultar molesto para el Ejecutivo de Mariano Rajoy. Ante la expectación, la vicepresidenta del Gobierno se ha visto obligada a opinar sobre la marcha del director y a negar cualquier relación de su equipo con el despido de Pedro J.


                  "El Gobierno no interviene en la esfera privada de ninguna empresa", insistió Sáenz de Santamaría en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. "Respetamos la libertad de información y por ello respetamos la labor de todos los directivos y todos los periodistas que llevan a cabo su tarea", añadió. Preguntada sobre si había sido uno de los cargos del Ejecutivo que, según el propio Pedro J., le habían hecho llegar cariñosos mensajes de despedida, la número dos del Gobierno se limitó a responder que no acostumbra a informar sobre sus comunicaciones privadas.

                  41 millones de euros para publicidad institucional
                  Una de las medidas aprobadas en el Consejo de Ministros de este viernes, horas antes de que dé comienzo en Valladolid la Convención del PP, ha sido la de incrementar el presupuesto destinado a publicidad institucional hasta un 24% con respecto al año pasado. Ello se debe, según la vicepresidenta, a que el Gobierno tiene puesto el punto de mira ya en las próximas elecciones europeas.

                  Con el citado aumento, la cifra alcanza los 41 millones de euros, que se invertirán en las 72 campañas (28 más que en 2013) recogidas en el Plan de Publicidad y Comunicación Institucional de la Administración General para 2014. Los medios de Internet, radio, prensa escrita y televisión serán, por este orden, los principales beneficiarios de la medida.

                  Niega la fractura en el PP
                  Otra de las cuestiones que la vicepresidenta eludió contestar fue la relativa a la fractura que en los últimos tiempos se vive dentro del partido del Ejecutivo. "Desde la mesa del Gobierno no reflexionamos ni informamos sobre los actos de los partidos; mantenemos nuestra neutralidad", repitió hasta en tres ocasiones, tras ser preguntada por la ausencia de Aznar en Valladolid y por su apoyo al PP vasco tras las críticas de María San Gil al Ejecutivo. "Este Gobierno es un Gobierno estable y unido que en dos años ha llevado a cabo importantes reformas para contribuir al crecimiento y que seguirá trabajando para modernizar la economía y para que las mejoras no se queden sólo en datos macroeconómicos, sino para recuperar el bienestar de las familias", zanjó.

                  Respecto a la relación entre Rajoy y su antecesor ha dicho que el equipo de Gobierno respeta "a todos los expresidentes, por la labor que desempeñaron, la trayectoria y la experiencia de todos ellos, motivos —dijo— por los que "hay que preservar las relaciones institucionales porque siempre son un activo de experiencia y de labor al servicio de un país".

                  La vicepresidenta tampoco entendió como una salida de tono de Aznar el documento de FAES en el que la fundación del PP indica a Rajoy cómo actual en el conflicto catalán. Para ella, este es sólo un "foro" más de los muchos que en los últimos tiempos están "dando su opinión, su análisis económico, jurídico y desde el punto de vista del sistema europeo" y, por ello, agradece que haya contribuido a la "importante" labor de mantener a la ciudadanía "informada sobre los efectos y consecuencias" de la posible independencia de Catalunya.

                  "Hay que respetar la presunción de inocencia hasta que una sentencia diga lo contrario", opinó la vicepresidenta sobre la infanta Cristina
                  De "respeto" volvió a hablarla vicepresidenta, una vez más, haciendo referencia a las decisiones judiciales tanto del caso Bárcenas como del caso Nóos. "Hay que respetar la presunción de inocencia hasta que una sentencia diga lo contrario", opinó sobre la infanta Cristina. Y, sobre el proceso al extesorero del PP, cuyo escándalo se destapó hace justo un año, Sáenz de Santamaría restó importancia al golpe que esto supuso para los conservadores. "El momento de mayor dificultad ha sido evitar la intervención de la economía española, el rescate", argumentó para evitar hablar de Bárcenas.

                  Por último, reforzando la "unión" del Gobierno, la número dos del Ejecutivo confirmó las manifestaciones de Alberto Ruiz-Gallardón y el "apoyo" recibido a su contrarreforma de la ley del aborto. "Todos los miembros del Gobierno tenemos el apoyo del presidente y nuestro apoyo solidario en todo lo que aprobamos en el Consejo de Ministros", sentenció. No obstante, recordó que, "igual que con cualquier otra ley", el proyecto de Ley Orgánica para la defensa de los derechos del concebido y de la mujer embarazada está a la espera de los informes de numerosas instituciones.


                  El Gobierno se desvincula de la destitución de Pedro J. - Público.es

                  Comentario


                  • #10
                    Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

                    Cambia el director, sigue la orquesta,


                    Esta es mi última Carta como director de EL MUNDO. Y este número 8.808, el último en el que mi nombre aparecerá encabezando la mancheta. Así ha sido desde que hace 25 años fundé este periódico junto a mis compañeros. Y si a estos 8.808 días les sumamos los 3.151 de 'Diario 16', son 11.959 días dirigiendo periódicos. Multiplíquese la cifra por una conservadora tirada media de 250.000 ejemplares y el resultante son nada menos que 2.989.750.000 copias a lo largo de 34 años. Casi 3.000 millones de periódicos distribuidos con mi firma durante más de la mitad de mi vida. Si contamos, también por lo bajo, 4,5 lectores por ejemplar, estamos hablando de al menos 13.500 millones de lectores. Unas cifras como para marear y baldar a cualquiera. No a mí.

                    Voy serenamente camino del vientre de la ballena pero, a diferencia de Jonás, yo no me he ofrecido como víctima propiciatoria. Han sido los propietarios del periódico quienes, en uso de sus legítimas atribuciones, han decidido poner fin a esta etapa. No estaba, no estoy cansado. Si de mí dependiera habría seguido siendo director de EL MUNDO no ya este año, no ya los tres años más que me quedaban de contrato, sino toda la vida. Así se lo dije, mirándoles a los ojos, a quienes tomaron la decisión. Y si hoy me volvieran a ofrecer el puesto, lo aceptaría de nuevo sin parpadear.

                    No niego que en muchas ocasiones -y especialmente durante estos durísimos años de crisis económica y putrefacción política- he tenido la sensación de estar atrapado por el deber de actuar en contra de mi propia conveniencia. Pero si eso era una cárcel de agobios y tensiones, yo quería cadena perpetua. No por ambición ni afán de poder -de sobra ha quedado demostrado que son los domadores de tigres de papel quienes prevalecen en España- sino porque, como explicaba Arthur Miller, «un periódico es una nación hablándose a sí misma» y ni uno solo de esos casi 12.000 días he dejado de sentir la preocupación por mi país, la adrenalina de los titulares y el cierre, el hormigueo de la información exclusiva, la pasión cívica por transmitir a los lectores cuanto se les oculta y les concierne. Lo he dicho siempre: el periodismo es una forma de vida que adquiere valor en sí misma. La forma de vida más digna y emocionante a la que cabe dedicar el tiempo de cada uno sobre esta tierra.

                    En tiempos y circunstancias distintas me han destituido dos veces como director. Hace 25 años bajo un Gobierno del PSOE, ahora bajo un Gobierno del PP. Al final, la ballena es la ballena. Ya lo dijo John Adams: «Las fauces del poder están siempre abiertas para devorar y su brazo siempre extendido para destruir, si puede, la libertad de pensamiento y de palabra hablada y escrita...». Ahora ya saben a qué me refería el domingo pasado cuando hablaba del espejo arrojado contra el suelo mientras se derrite el «rey de nieve» y suena la canción de Alaska y Dinarama: «¡Vete de aquí, no me supiste entender! (...) Ni tú, ni nadie, nadie puede cambiarme».

                    Prefiero que sean otros los que interpreten la secuencia de los acontecimientos desde que volví a ser reportero por un día y reflejé las revelaciones de Bárcenas sobre la financiación ilegal del PP y los sobresueldos de sus jefes; desde que publicamos los SMS de Rajoy instando a «resistir» al ex tesorero aun después de que se descubriera su fortuna en Suiza; desde que el presidente acusó en el Parlamento a EL MUNDO de «manipular y tergiversar las denuncias de un *********** para generar una calumnia»; desde que pocos días después demostramos que quien había «manipulado y tergiversado» había sido él, reproduciendo la suculenta nómina de Bárcenas cuando «ya no estaba en el partido»; desde que descubrimos que la Fiscalía investigaba las percepciones del marido de María Dolores de Cospedal en el banco resultante de la fusión con Caja Castilla-La Mancha; desde que ella declarara poco después en sede judicial, sin venir a cuento, que «no leía» EL MUNDO y desde que el Gobierno y la cúpula del PP en pleno boicotearan con ostentación e infamia un acto del significado de la entrega de los Premios Internacionales de Periodismo -con Vargas Llosa entre los receptores-, instituidos en memoria de tres compañeros que dieron la vida por la libertad de prensa. El poder había convertido a EL MUNDO en un apestado y las grandes empresas del Ibex -salvo honrosas excepciones- actuaron en consecuencia.

                    Nunca sabremos si yo continuaría siendo el director de EL MUNDO de no haber sucedido todo esto y de no haberse entreverado tales episodios con los de Botsuana, Corinna, Urdangarin y la Infanta. Debo admitir que lo anómalo no es que el propietario de un periódico decida cambiar al director, sino que haya mantenido durante 25 años al mismo. De ahí que mi gratitud hacia los sucesivos dirigentes del grupo RCS -desde el legendario Cesare Romiti hasta el actual consejero delegado Pietro Scott Jovane pasando por el gran Vittorio Colao- por la confianza depositada tan larga y reiteradamente supere con creces el disgusto actual.

                    Todo administrador debe velar por los intereses de sus accionistas y es innegable que las relaciones con el Gobierno y las demás instituciones del Estado forman parte del marco en el que desarrolla su actividad una empresa periodística e inciden en la marcha del negocio. En un momento tan difícil para el sector como éste, el Ejecutivo de Rajoy podía haber tomado medidas que paliaran el impacto del desmoronamiento de una inversión publicitaria que -se dice pronto- ha caído en los periódicos desde los más de 2.000 millones de 2007 a los apenas 700 de 2013.

                    No estoy hablando de ayudas directas sino de planes de reconversión tecnológica, formación de periodistas, digitalización o fomento de la lectura, análogos a los de otras democracias. En lugar de ello se nos ha obligado a pagar el error administrativo del anterior Gobierno en la adjudicación de las licencias de la televisión y se mantiene el IVA del 21% para los diarios digitales frente al 2,5% de Francia. Está claro que Rajoy apuesta por el mito de «un Gobierno sin periódicos» -en realidad sueña con un Gobierno sin país- y ha optado por convertir la crítica y la denuncia en una mercancía cada vez más onerosa para los editores. No es extraño que en Unidad Editorial la cuerda se haya roto por mi cintura.

                    Hay tres cosas que, como les dije el jueves a mis compañeros, siento como punzadas en el hígado: dejar de ser director mientras Javier Espinosa -símbolo de todo lo mejor de este periódico- continúa secuestrado, no poder encabezar el desfile del próximo 23 de octubre cuando EL MUNDO cumpla su primer cuarto de siglo y no haber tenido tiempo para recoger los frutos del salto adelante que ha supuesto el cambio de piel de nuestro diario. Orbyt cuenta hoy con más de 127.000 suscriptores, 91.000 de los cuales corresponden a EL MUNDO. Tenemos, pues, más abonados digitales que todos los demás diarios españoles juntos y los orbyteros son la sal de la tierra.

                    Además, nuestra edición electrónica mantiene el liderazgo en internet, nuestras aplicaciones para móviles y tabletas crecen exponencialmente y lo mismo sucede con nuestras descargas de vídeo. En el canal tradicional, EL MUNDO es uno de los dos únicos diarios nacionales con más de un millón de lectores acreditados por el EGM -aventaja en 500.000 al tercero- y mantiene con claridad el segundo puesto en difusión pese a que la fuerte contracción del mercado distorsiona la perspectiva.

                    Cada uno podrá interpretar como quiera las miserias del presente, pero coincido con el diagnóstico que Miguel Ormaetxea hacía esta semana en su influyente blog Media.tics: no hay mejor garantía de supervivencia para una empresa periodística que conseguir que en el plazo de tres años el 50% de sus ingresos sean digitales. Ahí están los desafíos, ahí están las oportunidades e, inevitablemente, los riesgos. Recordad a Tácito.

                    Por encima de todas las cifras me siento fieramente orgulloso -y este es un patrimonio que nadie podrá arrebatarme- de haber sido durante estos 25 años fiel a los principios fundacionales de EL MUNDO, plasmados en esta misma página el 23 de octubre de 1989. Prometí que «EL MUNDO no servirá jamás a otro interés que el del público» y así ha sido. Prometí que «EL MUNDO no utilizará jamás la información como elemento de trueque u objeto de compraventa en el turbio mercado de los favores políticos y económicos» y nunca lo hemos hecho. Prometí que «toda noticia de cuya veracidad y relevancia estemos convencidos será publicada, le incomode a quien le incomode» y reto a que alguien aporte un solo ejemplo de que no haya sido así. Prometí que «toda investigación periodística será culminada, le pese a quien le pese» y en la medida de nuestras posibilidades -con éxitos históricos como los GAL, Filesa o las actas de ETA y asignaturas pendientes de la dimensión del 11-M-, nunca ha dejado de ocurrir. Prometí que «en este periódico no habrá tabúes, ni cotos vedados, ni zonas de sombra, ni sanctasanctórums» y no los ha habido.

                    Advertí por último: «Si alguien pretende hacernos pasar por el aro, como a tantos otros, que abandone desde hoy toda esperanza». ¿No es un milagro que dentro de la más bien lúgubre historia de la libertad en España hayamos podido mantener desafiante y enhiesto este estandarte durante todo un cuarto de siglo?

                    Mi último acto antes de dimitir como miembro del Consejo de Administración de Unidad Editorial ha sido apoyar con entusiasmo el nombramiento de Casimiro García-Abadillo como nuevo director de EL MUNDO. No tengo ninguna duda ni de su excepcional talento profesional, ni de su integridad personal, ni de su compromiso con todos estos valores. Bajo su batuta y con la misma orquesta -siempre he dicho que el director representa y coordina al elenco pero quienes tocan son los músicos- la continuidad de nuestro proyecto está asegurada. Casimiro tiene muchas de mis virtudes y pocos de mis defectos. Aunará la firmeza con la templanza y eso creará espacios de distensión sin que el periódico renuncie a ninguna de sus señas de identidad. El hecho de que el presidente ejecutivo de la compañía continúe siendo Antonio Fernández-Galiano -imbuido como pocos editores de la percepción del periódico como proyecto intelectual y ágora de debate- garantiza además que el nuevo director va a seguir teniendo la misma protección y cobertura con la que siempre he contado yo.

                    Por todo ello he preferido continuar ligado a Unidad Editorial y agradezco a sus directivos y accionistas que me permitan hacerlo en términos razonables.

                    Mientras EL MUNDO siga siendo EL MUNDO me sentiría incapaz -máxime tras lo sucedido el jueves- de hacer la competencia en ningún terreno a quienes siempre consideraré mis compañeros. Si las circunstancias cambian me tendrán, claro está, a su disposición.

                    Mientras sigue incubándose la crisis tremenda que de un modo u otro conmoverá todos los pilares de la España que conocemos, a mí me toca ahora dar un paso atrás. El 2 de marzo reanudaré mis cartas dominicales, auxiliado por el genio de Ricardo Martínez, bajo un nuevo epígrafe y en una ubicación distinta. Prepararé además la publicación de mi próximo libro -cuando me lo autorice la editorial revelaré su contenido-, me ocuparé de la revista 'La Aventura de la Historia' y dedicaré algo más de tiempo a mis amigos tuiteros.

                    Esta segunda vez el 'One Brief Shining Moment' de Camelot ha sido bastante menos breve y ha brillado mucho más que la primera. Hasta nuestros más enconados enemigos reconocen que la España de este último cuarto de siglo habría sido distinta, y probablemente peor, sin un diario como EL MUNDO. No sabemos lo que nos deparará el futuro, pero es la hora de pedir perdón a quienes dentro y fuera de la redacción se hayan sentido injustamente tratados por mis decisiones, la hora de dar las gracias de corazón a todos esos españoles que han abierto casi catorce mil millones de veces un periódico con mi firma, la hora de aprender las reglas de urbanidad del manual del buen ex director, la hora de colgar en el vientre de la ballena el lema de Juvenal -'Vitam impendere vero'- que me acompañará allí donde yo vaya.

                    pedroj.ramirez@elmundo.es


                    Cambia el director, sigue la orquesta | ELMUNDO.es

                    Comentario


                    • #11
                      Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

                      Pués se podrá decir que este Pedro J. es un tipo nada ético,sin escrúpulos o lo que sea...pero ha hablado claro y señalado.

                      Comentario


                      • #12
                        Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

                        'The New York Times' avisó a Pedro J. de "cambios editoriales menores".

                        El exdirector de 'El Mundo' pidió la retirada de su artículo porque, a su juicio, no se correspondía a lo que había escrito. El diario estadounidense asegura que "de ninguna manera" se alteró el argumento o la opinión del periodista


                        El diario estadounidense The New York Times ha asegurado que avisó el periodista Pedro J. Ramírez de que hizo "cambios editoriales menores" al artículo de opinión escrito por el exdirector de El Mundo que publica este jueves el periódico neoyorquino.

                        "El señor Ramírez nos envió un artículo de opinión. Fue traducido cuidadosamente y en el curso de nuestro proceso habitual de edición y comprobación de datos se hicieron varios cambios editoriales menores para asegurar la veracidad, claridad y precisión" del texto, dijo una portavoz del diario, que asegura que comunicaron al periodista que se harían esos cambios y en todo caso aclaró que "de ninguna manera" se alteró el argumento o la opinión, "ni las pruebas utilizadas como apoyo".


                        "El autor no nos ha contactado desde que el artículo fue publicado", añadió la portavoz de The New York Times, preguntada por el descontento de Pedro J. Ramírez por los cambios en el artículo de opinión publicado en las páginas editoriales del diario. El periodista español ha solicitado la retirada del artículo porque, según asegura en la web de El Mundo, lo que finalmente ha sido publicado no es lo mismo a lo que él dio el visto bueno y no respeta su punto de vista sobre lo sucedido.

                        El artículo publicado denuncia que fue destituido como director de El Mundo "por hablar claro", y afirma que la democracia española vive su momento "más frágil" desde la muerte del dictador Francisco Franco en 1975. En ese texto, Ramírez también critica al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de quien dice que "una vez en el poder mostró hostilidad hacia las verdades incómodas e indiferencia respecto a la opinión pública".

                        'The New York Times' avisó a Pedro J. de "cambios editoriales menores" - Público.es

                        Comentario


                        • #13
                          Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

                          Lo que no se cuenta de Pedro J. Ramírez y 'El Mundo'.


                          Pascual Serrano
                          Periodista. Su último libro se titula Traficantes de información. La historia oculta de los grupos de comunicación españoles (Akal).

                          El pasado 3 de febrero Pedro J. Ramírez dejó de ser director de El Mundo, el diario que fundó y dirigía desde hace 25 años. Casi setecientas páginas necesitó su biógrafo José Díaz Herrera en 2009 para desgranar la actividad periodística —y más que periodística— del director de El Mundo en el libro Pedro J. Ramírez al desnudo[1]. Y no es el único libro, Eduardo Martínez Rico escribiría también Pedro J. Tinta en las venas, en 2008, y anteriormente, en 1995, Esther Esteban, El tercer hombre. P.J. la pesadilla de F.G.

                          Desde 1980, cuando con 28 años le nombraron director de Diario 16, ha sido director de periódico. Según Díaz Herrera, "desde Mariano José de Larra, no ha existido en España un periodista más conocido y con más poder que él, (...) ha puesto y quitado ministros y presidentes de Gobierno a su antojo, tiene en sus manos a banqueros y a grandes empresarios". Según el biógrafo, "mientras los ejecutivos de Rizzoli-Corriere della Sera entraban a pares en la cárcel San Vitore de Milán —y salían con la misma facilidad—, Ramírez se empeñó en España durante 14 años en criminalizar a toda una clase política...".

                          Entre 1975 y 1980 trabajó en ABC y el 17 de junio de 1980 fue nombrado director de Diario 16. Le cesaron el 8 de marzo de 1989 y seis meses después puso en marcha el diario El Mundo[2]. Su papel en la caída del Gobierno de Felipe González tras numerosos escándalos de corrupción y los crímenes del terrorismo de Estado fue fundamental. Pedro J. Ramírez siempre estuvo en el ojo del huracán. Ha destapado tantos escándalos como ha protagonizado y nunca ha ocultado su interés por influir en políticos y gobernantes. Pocos dudarán en considerarlo el periodista más influyente de España[3]. El periodista y ex-presidente de El Periódico, Antonio Franco, dijo que "Pedro J. encarna muy bien estos periodistas que se erigieron como un símbolo para intentar ser los directores espirituales de la política de este país por encima de la gente escogida democráticamente".

                          La mayoría de los que le conocen —políticos incluidos— coinciden en que no se puede definir una clara ideología política en el director de El Mundo. El senador del PNV Iñaki Anasagasti afirmó que "la ideología de Pedro J. es la de vender periódicos. No tiene otra". José Díaz Herrera recuerda que quien hizo bandera periodística de la denuncia de los GAL y su relación con el gobierno de Felipe González, años antes "pidió primero que el Ejército, al margen de las instituciones, acabara con ETA[4], después pretendió la pena de muerte para los terroristas[5] y, por último, escribió decenas de artículos y editoriales defendiendo a los GAL".

                          Pedro J. no sólo ha sabido moverse bien en el periodismo y la política, sino también en los negocios. Tras ser destituido del Grupo 16 en 1989, según denunciaron, por motivos políticos debido a sus investigaciones críticas contra el Gobierno de Felipe González, Pedro J. Ramírez y Alfonso de Salas crean la empresa Unidad Editorial (Unedisa), editora del diario El Mundo. Los responsables intentaban presentar el proyecto como colectivo y participativo. Afirmaban que "el capital del periódico está fragmentado en participaciones inferiores al 10%, distribuidas entre más de 400 accionistas (buena parte de ellos empleados de la propia empresa)"[6]. Roberto Montoya, hoy ya fuera del periódico, fue responsable de Internacional, afirma que "El Mundo nunca fue algo parecido a una cooperativa. El banquero Mario Conde fue el primero o uno de los primeros accionistas. Los directivos, gente como Pedro J. Ramírez, Alfonso de Salas (en la parte económica), J. Fernández, Alfonso Rojo y el resto de fundadores, tenían un paquete de acciones y ofrecieron a los curritos comprar participaciones, pudiendo pagarlas de sus propias nóminas, pero los trabajadores nunca tuvieron un porcentaje significativo. Jamás hubo espíritu de cooperativa, ni a nivel de las decisiones económicas ni a nivel de la línea editorial ni nada de nada"[7].

                          En 1991, el grupo italiano Rizzoli-Corriere della Sera (RCS) adquiere el 45% del capital. Los directivos y profesionales acumulaban un 26% y Banesto (Mario Conde) un 4'5 %. Tal y como alardeaban en el diario, "El Mundo se había convertido, entre tanto, en elemento determinante de la vida española como consecuencia de sus revelaciones sobre los casos Filesa, Ibercorp, GAL, Fondos Reservados o Cesid"[8]. El 28 de noviembre de 1998 El Mundo y el Grupo Recoletos establecen una gran alianza estratégica por la que Recoletos adquirió entre el 20% y el 30% del capital de Unidad Editorial y se adhirió al pacto entre el Grupo Rizzoli y los fundadores de El Mundo.

                          El periodista José Díaz Herrera cuenta en su libro Pedro J. Ramírez al desnudo, el pelotazo que algunos directivos del periódico hicieron en este periodo con los trasvases de accionariado. Conocedores los componentes del núcleo dirigente del diario del interés de Recoletos por comprar acciones de El Mundo, crearon una sociedad de inversiones con el objetivo de adquirir el pequeño paquete que tenían algunos de los profesionales al 200% de su valor nominal. Así lo cuenta Díaz Herrera:

                          "Otros muchos periodistas ajenos al "chanchullo" que se traían entre manos Pedro J. Ramírez y Alfonso de Salas, cuya lista se haría interminable, se desprendieron de los títulos adquiridos en 1989 y 1991 para que "El Mundo fuera suyo". Endeudados hasta las cejas en algunas ocasiones para que nadie arrebatara a la sociedad el derecho a recibir información libre y pluralista, forzados a vender antes de tiempo porque nadie les informó de los "manejos" de sus jefes, su esfuerzo se convertía a partir de 1998/1999 en un negocio de cuatro espabilados"[9].

                          En opinión de Díaz Herrera,

                          "La compra de la participación de El Mundo por Recoletos escondía en realidad uno de los mayores "pelotazos" de la prensa española de los últimos años para unos pocos elegidos. Así, mientras una parte de la redacción vende anticipadamente sus títulos al 200% al carecer de información privilegiada, los "jefes" lo hacen al 520% y los super-jefes, el núcleo duro, esperan al 2002 o 2003 y obtuvieron plusvalías de 1.900% e incluso más"[10].

                          El Grupo Rizzoli mantendrá, con su participación del 45% en el capital de Unidad Editorial, su condición de principal accionista. Entre los negociadores del acuerdo se encontraba Cesare Romiti, recién nombrado presidente del Grupo Rizzoli, tras dejar la presidencia de Fiat. Según informó El Mundo, "Romiti se ha implicado personalmente en la negociación de los acuerdos dentro de su nueva etapa de activa dedicación a la empresa periodística"[11]. Dos años después, mientras seguía siendo presidente de Rizzoli, Cesare Romiti fue condenado en Italia, en firme, a once meses y diez días de prisión por "falsedad contable" relativa al periodo en el que fue directivo de la Fiat. La condena terminaría anulada gracias a las reformas legales introducidas por Berlusconi por las cuáles la falsedad contable dejaba de ser delito.

                          Más tarde, en 2003, Recoletos vende a Rizzoli su 30% de acciones de Unedisa, lo que convertía a los italianos en propietarios del 87% de la editora de El Mundo. En esa época, algunos otros altos directivos del periódico pegaron otro "pelotazo" vendiendo sus acciones, ahora a los italianos. Por ejemplo Pedro J. Ramírez, se embolsó "entre 1999 y 2003 alrededor de 2.000 millones de pesetas por la venta de los títulos que le correspondían por la autocartera de Unidad Editorial y otros propios"[12]. Así lo explica Juan Carlos Escudier, uno de los periodistas de El Mundo que vendió sus acciones antes de que llegasen Recoletos y Rizzoli con el talonario:

                          Ramírez conoce, porque es un periodista de una pieza, que los accionistas italianos de su medio van a comprar en un plazo de meses acciones del periódico con una prima del 500%. ¿Qué hace el avispado informador? Ofrece a algunos trabajadores de El Mundo, a través de una sociedad instrumental en la que figura él mismo, comprar esos mismos títulos al 200%. La libertad de mercado es uno de los pilares de la libertad de expresión[13].

                          En la actualidad Pedro J. Ramírez posee un 1% de acciones de Unidad Editorial, pero se trata de una participación a la que no le preocupa la evolución económica del grupo. Tiene un contrato de sindicación de sus acciones con Rizzoli con una cláusula especial, mediante la cual, si se marcha de la empresa o es despedido, sus títulos pasarán a ser adquiridos por Corriere della Sera al 3.000% de su valor facial[14]. Porque para dirigir un periódico hay que saber mucho más que periodismo.


                          Lo que no se cuenta de Pedro J. Ramírez y 'El Mundo' - Público.es

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                          • #14
                            Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

                            He buscado un tema relacionado con el 11 M pero me salen muchos resultados que no tienen nada que ver, creo que este tema está lo suficientemente relacionado con Pedro J Ramírez como para reflotar este post.

                            Artículo sobre una de las consecuencias del periodismo villano, de mercadeo, de conspiranoia que Pedro J Ramírez ha fomentado en nuestro país. Creo que la memoria de esta señora y el dolor que ha tenido que pasar su actual viudo, el comisario de Vallecas el 11 de marzo de 2004, Rodolfo Ruiz, merecen unos minutos para la lectura de este artículo, dentro de una serie dedicada al 11M diez años después.

                            La teoría conspirativa del 11-M mató a mi mujer
                            Editado por última vez por Berbet; https://www.betisweb.com/foro/member/99955-berbet en 04/03/14, 16:34:07.

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                            • #15
                              Re: Pedro J. Ramírez deja la dirección de 'El Mundo'.

                              Originalmente publicado por Berbet Ver Mensaje
                              He buscado un tema relacionado con el 11 M pero me salen muchos resultados que no tienen nada que ver, creo que este tema está lo suficientemente relacionado con Pedro J Ramírez como para reflotar este post.

                              Artículo sobre una de las consecuencias del periodismo villano, de mercadeo, de conspiranoia que Pedro J Ramírez ha fomentado en nuestro país. Creo que la memoria de esta señora y el dolor que ha tenido que pasar su actual viudo, el comisario de Vallecas el 11 de marzo de 2004, Rodolfo Ruiz, merecen unos minutos para la lectura de este artículo, dentro de una serie dedicada al 11M diez años después.

                              La teoría conspirativa del 11-M mató a mi mujer
                              "Valoré también presentar una querella contra Pedro J., pero me lo desaconsejaron por el poder del personaje"


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