El Euskadi-Bolivia pudo terminar en tragedia según denunció en un comunicado Erne, sindicato mayoritario de la Ertzaintza. La policía autónoma vasca tuvo que intervenir durante el encuentro contra los ocupantes de uno de los fondos para la reiterada explosión de petardos y encendido de bengalas y continuó la actuación a la conclusión del partido.

La Ertzaintza, en una información recogida por Efe, ha confi rmado que un grupo de espectadores tiró objetos, petardos y asientos del campo contra los agentes, lo que dio pie a que hubiera varias cargas. Catorce ertzainas resultaron heridos: dos sufrieron fracturas y el resto contusiones diversas.

El sindicato policial se quejó por el “caos organizativo y de seguridad” que se produjo en el estadio donostiarra de Anoeta y sus alrededores al permitir que se entrara al recinto con “todo tipo de utensilios, bengalas, petardos y bombas de humo”. Y alertó de lo perjudicial de las bengalas recordando el fallecimiento de un niño en el estadio de Sarriá en 1992: “Queda lo suficientemente lejos como para no ver el peligro”.

Un detenido de 15 años. El comunicado añadió que al acabar el encuentro “grupos perfectamente organizados” utilizaron estos objetos contra los agentes, que fueron “acosados, rodeados y agredidos. El escrito de Erne apostilló que “las pancartas y las expresiones” utilizadas durante el partido fueron un avance de lo que iba a ocurrir después. Los incidentes se saldaron con dos detenidos, uno de ellos de solo 15 años de edad, y el sindicato de la policía vasca recalcó que “no sucedió ningún hecho más grave por la profesionalidad” de los agentes. No obstante, subrayó que “se estuvo muy cerca de la tragedia”. Erne ha pedido que se apliquen medidas para que los protagonistas de los incidentes no vuelvan a un recinto deportivo.

En una breve nota ofi cial, la nueva consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, se solidarizó con los agentes heridos en Anoeta en unos disturbios de los que resaltó que fueron llevados a cabo “por un pequeño grupo de personas”.

Pudo haberse suspendido

El masivo encendido de bengalas durante el partido provocó que durante unos minutos no se pudiera ver una de las porterías. De haberse producido en un torneo oficial, lo más probable es que el choque se hubiera suspendido unos minutos por el humo y la peligrosidad de las bengalas.

El departamento de Seguridad del Gobierno vasco ha expresado hoy su apoyo a la Ertzaintza tras los incidentes ocurridos ayer al término del partido amistoso entre las selecciones de Euskadi y Bolivia disputado en Anoeta, mientras que el PP ha anunciado que pedirá explicaciones a la consejera.

Los incidentes en San Sebastián se saldaron con 14 ertzainas heridos, dos de ellos con fracturas y el resto con contusiones, y dos detenidos, uno de ellos de 15 años. El sindicato mayoritario de la Ertzaintza, Erne, ha acusado al Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco de "poner en grave riesgo la integridad de los agentes por falta de seguridad e incumplimiento de los protocolos de actuación en acciones similares por parte de los mandos policiales".

En un breve comunicado, la nueva consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, ha expresado su total apoyo a la labor de la Ertzaintza durante los incidentes, "en los que la obligación de los agentes es velar por la seguridad de la ciudadanía".

Beltrán de Heredia ha trasladado su solidaridad a los agentes que sufrieron las agresiones en los disturbios que, a su juicio, fueron protagonizados "por un pequeño grupo de personas". Por su parte, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, ha anunciado en una red social que su partido va a pedir explicaciones a la nueva consejera.

A juicio de Basagoiti, "los dictadores suelen querer usar el fútbol para sus soflamas", y el partido de Navidad de la selección vasca "suele ser el 1 de mayo de Batasuna", por su vertiente reivindicativa. Por ello, ha juzgado como "incomprensible que no adoptasen medidas previas con la tropa de Garitano", en referencia al diputado general de Guipúzcoa.