mi primer acercamiento al sexo, fué al ver una película antiquísima, seguramente en blanco y negro. eso me lo supongo, claro
. porque hasta el mundial 82 no vi yo nada en color, aparte aquellas pantallas de tres colores ¿os acordais? que dividian la pantalla en tres y le daban a las películas un aspecto extraterrestre, cuando menos.
mi vecina tenía una así y vacilaba de tener tele en color.
de lo que no vacilaba era de los ataques epilépticos que con toda probabilidad le daban al ver a un josé maría iñigo con los pelos azules,bigote verde y mandibula marrón...
en fin, a lo que iba. en aquella película salía una joven que mostraba sus pechos ante un espejo... no me quedé catatónico porque mi madre me mandó a acostar antes de que sucediese.
y tarde en dormirme, aquella vi´sión y aquel hormigueo que me venía desde la churrina (si, yo de pequeño decía churrina), no me dejaban.
he de decir que a veces mi churrina se ponía dura inexplicablemente, daba igual la situación y yo no entendía porque, me gustaba pero no lo entendia.
aquella noche intuí que entre aquellos pechos y aquella minidureza había algo...
mi segundo acercamiento, al menos tres años después, o dos, yo que sé, fué al escuchar una conversación de los mayores en el recreo.
"yo soy capaz de llenar medio vaso de leche", decía uno. "toma y yo...", le contestaba un coro.
yo no decía nada, evidentemente, solo era un oyente, pero no entendía tanto presumir, cuando yo todas las mañanas llenaba, no medio, sino uno y a veces hasta dos vasos de leche, que me zampaba con galletas...
hasta que escuché la palabras mágicas... ¡¡¡ hacerse una **** !!!.
como siempre fuí de alto C.I. comprendí que allí no se hablaba de desayunos.
y me hubiera gustado quedarme hasta el final. pero no pudo ser...
normalmente invisible, aquel día no lo fuí... "¿oye m.... , tú te haces *****?
"yo lleno un vaso de leche", dije.
lo que no sabía era de que leche ni como, pero lo dije.
como cualquiera hubiese hecho... y como cualquiera hubiese hecho, me fuí inmediatamente seguido de las risas y las burlas... a jugar al fútbol.
después entre los mios tuvimos varias reuniones en los que llegamos a la conclusión, acertada por otra parte, que había que agarrarse la churrina darle parriba y pabajo y pensar en... algunos en la señorita mayte, otros en mari carmen, la de clase.. y otros como yo... en la chica de la película.
en fin, que ya tenía varios componentes para resolver aquel enigma... aquellas tetas en blanco y negro, las erecciones y inexplicables y ¡¡ hacerse una **** !!!
y me dediqué a ello con entusiasmo.
la naturaleza es sabía y lo que no sabemos pero deberíamos, nos lo inculca a través de eso que llaman "instintos".
y ahí estaba yo, dale que te dale. hasta que salía un liquidillo transparente, a todas luces insuficiente para llenar no ya un vaso, sino siquiera una cuchara sopera,
y así se acababa aquella "****", que me dejaba con la msma dureza y con un desasosiego y desazón tremendas...
¡¡¡ hasta que ocurrió !!!... y casi que me muero. supongo que me gustaría, supongo.
porque de lo que me acuerdo fué del susto tan tremendo al ver surgir aquel chorro blanco que ni por asomo me esperaba... casi me mato, beybe !!!!, literalmente, de la taza al suelo...
tardé unos pocos días en volver a repetir la experiencia. ¿aquello había sido bueno o malo? ¿estaría enfermo?:
el caso, es que estaba sobreaviso... y allá que fuí.
en mi mente aquellos pechos multiplicados por dos. y en mis manos lo demás.
y todo siguió el proceso lógico, parriba, pabajo, dureza, liquidito transparente y.... finalmente el esta vez si esperado, chorrillo blanco. y se me despejaron las dudas, aquello era bueno... vaya que si lo era.

continuará...