 
2 - 0Tiempo completo |
| Diego Llorente 13' | 1-0 | |
| Oyarzabal 30' | 2-0 | |
| Colegiado: Hernández Maeso | ||
| VAR: Del Cerro Grande |
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El partido que ayer nos brindó el Real Betis Balompié estuvo a la altura del resto del mes que nos está dando el equipo, con la salvedad que en esta ocasión la Real Sociedad también estuvo mal, y nos ganó con una presión alta, muchas faltas y ninguna ocasión de gol. Si, ninguna, porque un gol nos lo metimos en propia puerta y el otro lo metió el VAR pitando un penalti que sólo Del Cerro Grande y el árbitro, sin personalidad, confirmó. Así se sentenció el partido ya que ninguno de los dos equipos logró hilar jugadas ofensivas.
La gran diferencia, al margen de la parcialidad arbitral, estuvo en nuestra fase de creación de juego, las lesiones se han cebado enormemente en esta zona del campo, hasta el punto que dos jugadores, uno de cantera sin experiencia en Primera y otro llamado a ser actor secundario eran los llamados a gestionar la salida de pelota, ordenar la presión y colocar a los compañeros así como iniciar el ataque. Todo esto no lo lograron, Guirao intentó hacerlo sencillo y presionar con anticipación hasta que lo cambiaron, Altimira no es mediocentro defensivo, y por mucho que intenta hacerlo su trayectoria como jugador fuera de la élite le lleva de forma natural a querer hacer cosas que no debe, recula por la falta de velocidad y no orienta bien su cuerpo para recibir, pero al parecer es lo que tenemos en el medio campo o, al menos para Pellegrini es lo que hay. Tal vez hay que analizar que este jugador con escasas dos decenas de partidos en Primera tenga en exclusiva la culpa, porque la salida de balón es algo de responsabilidad colectiva, por ejemplo, y a mi entender el Betis no la tiene trabajada como el resto de los equipos. Sufre mucho en la presión, se vio contra Getafe, Sevilla, Valencia y ayer. En este punto no estuvo fino Bartra, que su impetuosidad le lleva a cometer errores en exceso, pérdidas innecesarias de pelotas, salidas en conducción donde se mete en el agujero y tiene que soltarla y encimar fuera de sitio natural que crea huecos tras de sí.
Esta situación crea la imposibilidad de articular una buena defensa, a pesar que ayer no fue el principal problema si generó descoordinación entre la línea y por ende llega el primer gol, precisamente en pase erróneo de inicio de Bartra.
El hecho que contara con Lo Celso no evitó el resultado, debido a que el argentino debía bajar demasiado a recibir y colaborar en la defectuosa salida de balón y se quedaba sin fuelle en los últimos veinte metros. Espero además que el plan no fuera que en jugada individual nos salvara Lo Celso porque eso no es un plan.
Esto es algo que debemos entender que se puede trabajar, y creo honestamente que está en el debe del técnico. Como, en cierta medida, abusar del uso de determinados jugadores en partidos inocuos que conlleva una carga muscular a corto plazo transformándose en lesiones. Tal vez para partidos de clase Conference quepa confiar en pivotes de la casa por ejemplo, no hay nada más que ver el nivel de la competición para saber que el Betis Deportivo rascaría puntos con su once de gala.
Lo cierto es que esto era sintomático hace unos meses, donde la planificación deportiva “Tenemos plantilla para cumplir los objetivos” Alarcón dixit, nos ha llevado a tener que soportar jugadores con la treintena pasada que no están rindiendo acorde al salario
Es un problema de todos, y que llevar un mes sin ganar echa sal a la herida del bético.
Creo que esta situación no es definitiva, existen argumentos deportivos de peso para revertirla, hay al menos cuatro jugadores titularísimos que se les espera por las lesiones. La incorporación de éstos hará cambiar el rumbo de los resultados.
Otra de las cuestiones a valorar por mi parte y de la que soy acérrimo defensor es la cantera, ayer pudimos ver lo que todos desde la temporada 2022/2023 habíamos visto, y es que Jesús Rodríguez no sólo tiene nivel para la primera división, sino que encara y ataca con la misma valentía que en divisiones inferiores. Es agradable verlo y molesta que lo hayamos visto por tanta lesión y no por el mérito que ya demostraba. Si el Betis (y por ende su entrenador) no miran a cantera estaremos perdiendo una de las mejores generaciones de talento desde hace décadas, llevan tres años en el mejor nivel nacional de juveniles, demostrándolo en el Deportivo y de siempre, los mejores Betis que recuerdo tenían cinco o seis canteranos que barnizan de verdiblanco el vestuario y contagian el sentimiento. Visto los treintañeros sin rendimiento que estamos poniendo para perder pongo a los míos.
En cuanto a la delantera, ni está acertada ni le llegan con claridad pelotas. Anudando con lo anterior, hago un inciso, pues me viene el nombre de Pablo García, máximo goleador histórico de nuestra cantera, en edad juvenil, sin renovar… Quien quiera que tenga esa responsabilidad debe ver el fútbol de espaldas para no ponerle en la mesa un contrato ya, de hecho, la maniobra de dejarlo fuera de la última convocatoria como medida de presión es de una falta de clase absoluta. Déjense de monsergas y renuévenlo, es el futuro y no lo coarten frente a tuerce botas que ganan más que estos chavales y que no van a llegar a nada.
La verdad es que es 1 de diciembre, que los objetivos están intactos, tenemos que tener paciencia sin dormirnos, sabiendo que tenemos que mejorar muchos aspectos pero que todo está por hacer y cortar, eso sí no perdamos el tren. Cantatore decía que las ligas y los objetivos se alcanzaban cuando los tambores y las cornetas suenan en Sevilla y eso es cierto, nada es ahora definitivo, queda liga.
