 
1 - 3Tiempo completo |
0-1 | 11' Kike G. | |
| Jesús Rodríguez 28' | 1-1 | |
1-2 | 80' Kike G. | |
1-3 | 83' Kike G. | |
| Colegiado: Hernández Hernández | ||
| VAR: Iglesias Villanueva |
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Qué bien suena un gol en el minuto 96, y si es de victoria sufrida más. El Real Betis Balompié rompió ayer una racha de derrotas que había sumido a la institución en una depresión no sólo futbolística sino de orientación ¿a dónde estábamos viajando?
Y como siempre, a lo largo de nuestra historia, fue la Casa, fue la Cantera la que puso lo que hay que poner, juego y dignidad, defendiendo la camiseta como sólo ellos saben. Me pregunto por qué es tan difícil confiar en los tuyos.
Volveremos a ello luego.
El Betis dispuso cuatro centrales en posiciones defensivas, de ellos Arribas en el lateral izquierdo como cuando era juvenil y Bartra como lateral derecho a pesar de su mal partido anterior, su lesión en el calentamiento provocó el debut de Ángel Ortiz, otro de Almendralejo con las trece barras, vaya debut el tuyo Ángel.
Delante Roca-Cardoso e Isco en la mediapunta, con Abde y Jesús Rodríguez en bandas con el nueve en Vitor Roque.
Muy nervioso inicialmente tuvo que defender las acometidas del Mallorca, bien en la presión y con alguna ocasión de gol abortada por Adrián. Una vez le cogieron el aire al partido los defensas franquearon las bandas con alto rendimiento.
No así en ataque, inocuo y hasta con desidia Abde, que no es merecedor de camiseta de titular, lento Isco al que se le nota la falta de pretemporada para llegar al punto correcto de forma, muy sólo Cardoso, con Roca totalmente ausente y Vitor Roque voluntarioso, pero sin peligro. La única y agradable excepción es Jesús Rodríguez, faro del ataque en el primer tiempo, bien en la conducción y cuando había que asociarse ayudando en defensa y echándose el equipo a las espaldas, a la postre MVP.
Corrigió esto Pellegrini en el descanso, una vez más debe modificar su plan preconcebido, metió a Altimira por Roca que aportó mucho más tanto en la presión como en la distribución, quitó a Abde para meter a Juanmi (ambos sin participación ni peligro) y Bakambú por Roque. No aportó Juanmi que prácticamente no tocó la pelota, si Bakambu con el gol.
Pero este partido se gana como consecuencia de la aportación y empuje de unos chicos que en su mayoría debutaban, pusieron todo, compitieron cada pelota, baluartes en defensa Ortiz y Arribas, la percusión constante de Jesús Rodríguez que cuando no la tiene la pelea para robarla y cuando la tiene no duda en encarar sin ningún respeto tenga a quien tenga delante y luego sale el juvenil Pablo García y pone toda la calle que lleva dentro.
A menudo nos encontramos con odas al jugador físico, el de metro ochenta y cinco para arriba que se pasa más tiempo en el gimnasio que jugando al fútbol, pobre de ellos porque no verán nunca jugar a esos locos bajitos, esos que de un toque doman la pelota, que saben dónde colocarse para hacerte daño, que de una asociación y una finta te sacan los tres metros necesarios para que ya sea tarde y vuelvas al gimnasio, que centran sedosamente y que no dan un balón por perdido ni le ganas uno si no pones el mismo veneno que ellos. Eso es el futbol y será por los siglos de los siglos, por eso Argentina es campeón del Mundo y por eso lo fue España, es entender el juego, es técnica, tiempo y engaño y lo demás son milongas…
Pues esos locos bajitos, Pablo, Ángel, Jesús son los que tienen la monea y los que te la cambian, y si, los llamo por su nombre porque los llevo viendo jugar desde que sus padres pasaban frío en los entrenamientos y hacían los deberes de vuelta a casa, tarde, con nocturnidad, con sueño y con sueños, esos que se están cumpliendo si los dejan.
Que nadie lo dude, son nuestra sangre, y son los que a lo largo de la historia siempre, siempre nos han sacado del agujero y de la pobreza. Aún hay más, porque Dani Pérez sabe jugar, Barea gana los duelos, Mateo Flores sabe lo que hace y Reina, y Adrián Martín, Rodrigo Marina, Paco Esteban y Migue Romero, Cuevas, Oya, Mora, Dani Romo, Masquet y podría seguir ad infinitum, son nuestro futuro, sólo hay que confiar en ellos, todos internacionales todos defienden el escudo en cada entreno, en cada derbi chico, en cada partido en una mañana fría de invierno llevados por sus padres, haciendo sacrificios, por favor Don Manuel Pellegrini, confíe y sea valiente.
