No sólo los 60 puntos que lucen en el casillero del Real Betis Balompié y que lo ha llevado a clasificarse para competición europea haciendo de esta temporada un ilusionante comienzo de lo que esperamos sea una dinámica positiva que se mantenga en el tiempo, son los que hay que resaltar en esta temporada.
Los béticos con su incondicional seguimiento al equipo de sus amores, han hecho que los números de asistencia al estadio Benito Villamarín durante toda la temporada sean también dignos de ser recordados.
Ya en el primer partido de liga con la expectación que se creó durante el verano con el estreno de la nueva grada de gol sur y el cambio de imagen que habían sufrido todas las gradas del estadio, se consiguió una asistencia buenísima para estar aún en pleno verano.
Si en la temporada 2016/2017 se consiguió una media de 32.819 espectadores, en esta que termina se ha aumentado la media en casi 13.000 personas firmando unos números de 45.734 espectadores entre liga y copa (46.781 si contamos sólo los partidos de liga).
Todo eso teniendo en cuenta que los verdiblancos han jugado tres partidos en viernes, tres en lunes y dos entresemana.
En seis ocasiones las gradas del santuario heliopolitano superaron las 50000 almas, en los partidos con Barcelona, Villarreal, Real Madrid, Málaga, Sevilla y Éibar.
Siendo el partido más seguido el derbi con el eterno rival del pasado fin de semana con 55.588 espectadores (600 aproximadamente aficionados sevillistas ya que el club igualó las entradas visitantes que recibieron en el partido de ida y a esas 570 hay que sumar las de cortesía que se intercambian los equipos).
Estas espectaculares cifras han hecho que el ambiente vivido en el Villamarín durante todo el campeonato haya sido mágico.