 
18:30Vista previa |
| Colegiado: Sánchez Martínez |
| VAR: Iglesias Villanueva |
Detalles
| Día de partido | Fecha | Hora | Liga | Temporada | Tiempo completo | TV |
|---|---|---|---|---|---|---|
| Jornada 27 | domingo, 09/03/2025 | 18:30 | LaLiga | 24-25 | 90' | Movistar |
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A menudo suele ser habitual en tertulias o cursos de entrenadores hablar del talento. Es cierto que suele ser un término muy usado pero poco analizado, por lo que suele despertar distintas versiones o incluso debates encendidos al respecto.
Por un lado, tendríamos las definiciones más clásicas recogidas en diccionarios que apelan a la inteligencia para desarrollar una función, para desempeñar un oficio. Pero un mundo tan competitivo como el actual en el que surgen nuevas profesiones y formas de entender la eficacia se diluye lo que entendemos por la destreza.
La semana pasada, en un curso de RFAF, al preguntar a los alumnos algunos definían el término como «algo con lo que se nace y que por lo tanto se posee de manera inconsciente». Otro sector apostaba por «el trabajo para adquirir competencias desde la práctica». Es interesante porque, desde la perspectiva del fútbol, entender el ingenio en uno o en otro sentido puede marcar, desde la política deportiva de la institución, a la estructuración organizativa de los departamentos de captación, formación y análisis que defiendo mi libro scouting deportivo.
Si se nace con talento, por lo tanto, estamos predestinados a disfrutarlo y no tenemos responsabilidad; podríamos pensar que no necesitamos dedicarle atención para desarrollarlo; surge de forma natural. Si se adquiere con trabajo, depende de nosotros, pudiendo aportar mucho en ese aspecto desde el esfuerzo y la dedicación. Tanto si somos el jugador como si somos el club o la empresa que trata de formarlo tendríamos capacidad de desarrollarlo. Entenderán entonces que según como lo afrontemos podremos aportar en su cuidado.
Igualmente interesante es a la hora de detectar esa capacidad centrarnos en el «talento evidente», aquel que todo el mundo ve porque destaca por encima de los demás. Suele ser habitual que el foco se ponga entonces en aquel jugador determinante desde lo técnico, desde la definición y desde el espectáculo.
A la hora de disfrutarlo como aficionado es sencillo de identificar. A la hora de captarlo por el club esa apuesta segura, tanto por «rendimiento inmediato» como por unir lo que «la prensa mediática» necesita y lo que «el espectáculo» demanda. Habría que añadir aquí el coste que lleva aparejado este tipo de talento inmediato y evidente que todos queremos y sabemos detectar.
Por ello, me gustaría poner el foco en la otra versión de lo que se entiende por «el don» tanto para el juego como para los departamentos scouting deportivo de los clubes .
Hay talentos que existen para que otros brillen. Personalidades y características que hacen que el que está al lado brille más y saque a relucir su mejor versión. Este tipo de habilidad suele ser difícil de detectar pero conseguirlo es adelantarse a la competencia.
Existen personas que tienen como principal virtud el entender que el colectivo está por encima de lo individual, destacando en tareas estando enfocados en la táctica del plan elaborado. Descubrir esta versión del talento suele ser bastante complicada debido a que están más centrados en ayudar y mantener el orden que en destacar.
Son ejemplos de aptitud que no suelen acaparar portadas pero que son necesarios como la gasolina en el coche o el hormigón en los edificios. Según sea su calidad, así será la eficacia del producto final.
Mi opinión personal es que aquellos clubes o empresas que se centren en detectar, potenciar y acompañar a esos «talentos ocultos» que vertebran el día a día construirán una estabilidad para crecer. Si, además, se tiene la suerte de disfrutar del «talento evidente» de la magia y la creatividad, sería una mezcla idónea.
Aquellos que dan equilibrio, que cubren al compañero, que pelean cada oportunidad y que mantienen la concentración… son imprescindibles. Tal vez no sean las estrellas que aclama el espectáculo, pero son los que sostienen los cimientos del estilo.
Cuidemos, demos cariño y animemos a esos profesionales que, desde la sombra, protegen y potencian cada detalle acercándonos a nuestros sueños.
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