El Betis no ha querido empezar la casa por los cimientos, pues, a pesar de no tener atado ningún director deportivo hasta el momento -aunque se hable de Cordón-, ya ha hecho oficial la incorporación de Manuel Pellegrini para que pase a ocupar el banquillo verdiblanco de cara a la temporada 2020/2021. El técnico ha firmado hasta 2023 y la intención, desde el club, es darle un empujón a un proyecto y un estilo de juego que, hasta ahora, no han ido del todo bien.
Lo que no le falta a Pellegrini es experiencia y, además, conoce el fútbol español. El chileno dio sus primeros pasos en un banquillo en su país, en Ecuador y Argentina. Tras triunfar allí, dio un paso al frente y se puso a dirigir a un Villarreal con el que no solo entró en Champions, sino que llegó a disputar las semifinales frente al Arsenal. Todo esto le hizo ganarse la confianza de todo un Real Madrid para que se pusiese al mando, aunque fue un año en blanco. Por ello, al final, hizo las maletas para entrenar al Málaga y volver a hacer historia: meter al equipo en Champions League y, en su última campaña, a pesar de la crisis, clasificarlo para Europa League.
Sus últimas experiencias han sido el Manchester City -donde ganó dos EFL Cup y una Premier League en tres temporadas– antes de que llegase Pep Guardiola, el Hebei China Fortune y, de nuevo, volvió a Europa para hacerse cargo del West Ham, en el que no pudo acabar su segunda campaña debido a los malos resultados. Ahora, después de prácticamente un año sin entrenar, tiene mucho trabajo por delante con el Betis.
Sin embargo, el que se sentará en el banquillo en las tres jornadas que restan de LaLiga será Alexis Trujillo, aunque Pellegrini se ponga ya manos a la obra para preparar la temporada que viene. Es toda una incógnita cómo funcionará en el proyecto de Haro y Catalán este nuevo técnico, pero su suerte será la suerte de todos los béticos.
La entidad de la Avenida de La Palmera añadía lo siguiente en su comunicado oficial: «El Real Betis apuesta por un técnico de alto nivel y gran prestigio internacional para elevar el nivel de rendimiento del primer equipo, encuadrado en un proyecto a tres años».
