Maglia verde. Paralelismos y éxtasis. Real Betis vs CA Osasuna

0

2 - 1
Tiempo completo

Nueva web  ➡ Ficha del partido ➡ Post del partido ➡ Galería de fotos 

Semana intensa para los que sentimos en verdiblanco, con competición europea por medio. El jueves me pasó como el partido ante el Sparta de Praga, que no pude ver la primera parte porque me pilla llevando a mi hija Carmen, con la que creo me he pasado con el veneno bético,  al entrenamiento de fútbol sala y ambos íbamos de camino escuchando Radio Betis como se está pendiente de Radio Vuelta. La segunda parte la pude ver con mi madre, bética sufridora y paciente, y disfrutamos juntos de la victoria con el susto incluido del tiro al palo local previo a nuestro gol.

Y es que en la mayoría de partidos que estamos viendo casi siempre todo pasa en las segundas partes. Cierto que hay que ver los partidos completos, como las carreras ciclistas, porque mucho de lo que pasa se fragua en la primera parte de los partidos o recorridos donde se consolidan escapadas que pueden ser decisivas cara al desenlace final. Pero hay un paralelismo en muchos partidos en donde la igualdad en el plano físico y táctico hace que los principios sean muy parejos. Por eso ayer tuvimos que esperar hasta el 35’ para ver algo, y es que Diao estuvo listo y se anticipó en el área pequeña y Willian José falló en la definición, posteriormente en el 39’ Isco no pudo rematar adecuadamente en magnífica posición porque el pase de Ayoze fue a media altura. Ya se estaba empezado a barruntar que algo pasaría , y en la última jugada de la primera parte vino el zarpazo del Tigre Willian para poner el 1-0 tras asistencia de un colosal Isco. Se consolidó la escapada buena.

Muchas faltas de Osasuna que interrumpían el juego, y jugadores a vestuarios con la sensación de ser una primera parte espesa y trabada pero con la victoria momentánea en el marcador como mejor noticia.

Transcurría la segunda sin sobresaltos hasta que vino el espectacular demarraje de Asane Diao en el 65’, que recordó en cierta manera a la jugada de Bale con Bartra en aquella final de Copa: derroche de fuerza y velocidad. O las de Perico en el Tour 88. Y aquí vino la polémica pues el árbitro señaló penalti y expulsión del zaguero osasunista. Tras revisión del VAR, la jugada queda anulada y el jugador amonestado restituido.

Como en otros partidos se empiezan a sacar amarillas más por el momento en que se producen, pues en la primera parte hubo entradas más fuerte donde únicamente los jugadores fueron advertidos. De hecho, el partido terminaría con 10 faltas nuestras (3 amarillas) y 25 del Osasuna (4 amarillas).

Y lo que tiene llevarle poco tiempo al pelotón, un resultado corto te expone a que en cualquier momento pueda pasar algo. En el 85’ balón largo y preciso del central Catena al costado de Miranda que pierde la posición y Rubén García controla y define a la perfección. Jugada tan simple como previsible que supone el empate. Parecía como cuando un director de equipo calcula el tiempo de los escapados para cogerlos poco antes de meta.

Con poco tiempo por delante, y con sólo 5’ de añadido, vino el éxtasis. Cómo no tuvo que ser Isco el que se sacara de la chistera un sensacional golpeo de balón que puso al Villamarín, ayer más de 49.000 personas, boca abajo. Se desataba la euforia por lo que tiene una victoria en el último kilómetro, las que mejor saben. Aún así el árbitro nos puso el corazón en un puño cuando parecía consultar el VAR por si hubiera posible posición antireglamentaria, pero la foto finish confirmó su corrección.

Tres puntos vitales para seguir escalando en la posición. Como los grandes corredores en una gran vuelta hay que estar arriba al final, y queda mucho pero no conviene perder comba. Como dice mi querido y sabio amigo Aurelio, bético ejemplar, los tres puntos vienen como aceite a las espinacas… Algún día contaré una anécdota con mi padre en un recorrido ciclista y la importancia de tan rico alimento para evitar pájaras.

Y un último paralelismo. Se ha incorporado para la causa un fornido central griego, Sócratis, necesario por las carencias en esa posición. He tenido que buscar ciclistas griegos que hayan tenido un papel relevante y no he encontrado ninguno. Tampoco en la historia del Betis porque, si no me equivoco, es el primer jugador heleno de nuestra historia.

A pensar en el miércoles, que retorna la competición copera en el mítico Francisco de la Hera de Almendralejo, pero no ante el Extremadura sino ante el Hernán Cortés. Con el encanto propio del ambiente de las carreras locales.

Vamos Betis, pedalea fuerte. Estamos contigo como con nadie. No hay amor paralelo

Nueva web Real Betis