La Maglia Verde: Con la flecha hacia arriba 1-0. Real Betis vs UD Las Palmas

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Jornada vigésimoséptima con comparecencia de nuevo en casa tras el gran triunfo de la semana pasada frente al Real Madrid. Ayer tuve la suerte de poder asistir al Benito Villamarín con mis hijos y mi querido amigo Aurelio. Volver a tierra santa, como bien dice mi amigo, es siempre especial por los muchos recuerdos de la infancia y juventud. Como cuando pude ver un final de Tour en los Campos Elíseos. Contemplar lo que arrastra hoy el día el Betis es motivo de enorme alegría e ilusión para el futuro y porvenir. Y todo eso a pesar del día desagradable en lo climatológico. Lo que en ciclismo se llama pestoso: lluvia, viento, frío…

En la primera parte el Betis anduvo como el día, espeso, incapaz de superar la defensa de cinco hombres adelantada que pusieron los canarios. Con Fornals en medio campo se esperaba ese pase filtrado que pudiera generar alguna ocasión de gol. Pero nada de nada, lentitud e imprecisión en la zona de arriba sin desborde por las bandas. Un desdibujado Jesús Rodríguez dispuso de un mano a mano que Cillesen le sacó en lo que fue la única oportunidad clara en este primer período. Parecía pesar quizás el partido del jueves en Conference, donde hasta en dos ocasiones nos empataron tras ponernos por delante. Habrá que jugárselo al todo o nada en tierras portuguesas sin margen de error.

Ya en la segunda parte el Betis empezó a carburar un poco, metiendo algo más de ritmo a tan obtuso partido. Pero la clave estuvo en un estrecho margen de tiempo: en el 62’ entraron Abde y Altimira. Bien es cierto que el marroquí no anda fino a pesar de que lo intentó pero Altimira pareció insuflar esa energía e intensidad que se estaba echando en falta. A todo esto previamente se produjo una acción clave en el devenir del partido, Essugo fue expulsado en el 61’ por doble amarilla por una fuerte entrada a Isco. Con media hora por delante era de esperar que el gol cayera por su propio peso.

Si los canarios se habían mostrado timoratos en ataque como corredor que chupa rueda con descaro no dando un relevo, apenas se acercaron al área bética, ahora con más motivo. Así llegó por fin el primer gol por medio de Diego Llorente, que empalmó bien un rechace en la frontal del área. El resto fue un ejercicio de control del partido como escuadra que controla el pelotón sin permitir la más mínima escaramuza. Isco gozó en el descuento de un penalti que desafortunadamente no pudo ser transformado. Un par de minutos de incertidumbre por algún balón colgado a nuestra área pero sin consecuencias. Tres puntos de oro para afianzarnos en el sexto puesto tras las cuatro victorias consecutivas.

Fin de semana en el que los aficionados al ciclismo disfrutamos el sábado de la enorme exhibición de Tadej Pogacar  en el sterrato de la Strade Bianchi (a pesar de una durísima caída). Ayer comenzó la París – Niza y hoy la Tirreno Adriático. Semana de disfrutar y con el punto de mira en el jueves en el partido de vuelta de la Conference de nuestro Betis. Convencido que pasamos y si en Leganés somos capaces el domingo de conseguir un buen resultado, nos iríamos al parón previo al desenlace de la temporada de una manera inmejorable. Como corredor que afronta la última semana de una grande por etapas en buena posición y con expectativas de mantenerla o incluso mejorarla. Sigamos con la flecha hacia arriba, a pelear el repecho aunque tenga pendiente.

Esto no para, continuemos pedaleando con ilusión y entusiasmo, Vamos Betis, aprieta los dientes en este momento clave. Siempre contigo

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