Volvió el público a la Ciudad Deportiva Luis del Sol y lo hizo para presenciar un encuentro más que interesante entre el Betis Deportivo y el Linares Deportivo. Más bien una final a estas alturas de la competición liguera, en la que los billetes para disputar los playoffs están en juego. Pero, además, los aficionados béticos también pudieron ver de cerca el talento de uno de sus pupilos, Raúl, que continúa llamando a la puerta del primer equipo y se ganó una muy esperada ovación.
El choque, desde los primeros instantes, desprendió mucha intensidad. Iba a ser un enfrentamiento duro y eso se palpó cuando los jugadores pisaron el verde de la Avenida de Italia. Sin embargo, fueron los locales los primeros en llevarse una alegría. Raúl consiguió reencontrarse con el gol cuando se cumplieron poco más de cinco minutos en el contador y puso la ventaja en el marcador tras un error de Josema por parte del conjunto linarense.
El Linares intentó ejercer una presión alta para buscar los errores y poner en aprietos al Betis Deportivo. No obstante, el filial de las trece barras estuvo muy bien plantado, con solidez y esa verticalidad que tanto le costó encontrar a los visitantes, a pesar de que no bajaron los brazos y siguieron probando suerte. El tiempo se hizo largo, pero llegó el descanso.
En la segunda mitad, la alegría tampoco se hizo esperar de nuevo para los béticos. El killer verdiblanco siguió brillando en su feudo, bajo el calor de su afición, y aumentó la ventaja en el luminoso para poder respirar con algo más de tranquilidad con el paso de los minutos. Con esto, el técnico rival movió el banquillo buscando la reacción de su equipo y Toni García obligó a Dani Rebollo a hacer una buena intervención, pero acabaron complicándose la vida. Un penalti sobre Calderón, el tanto de Callejón desde los once metros y ya eran tres los goles que encajaba un Linares que no tuvo un buen día.
La cosa no quedó ahí. A Raúl García de Haro no solo se le caen los goles de los bolsillos, sino que también la ambición. El delantero quiso buscar la guinda a su partido y completó un hat trick con otro golazo. El 4-0 dio una gran comodidad a los de Manel Ruano, mientras que los visitantes acabaron sufriendo una bajada de ánimos en la que también influyó el buen hacer del guardameta local.
Finalmente, la euforia de unos y la desesperación de otros se palpó en la Ciudad Deportiva Luis del Sol. Ahora, al Betis Deportivo le toca pensar en el encuentro de la próxima semana frente al Córdoba. Otra final en la que tienen mucho que decir y otra jornada más que dará mucho de qué hablar en la Segunda División B.
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Hacía falta ganar, tal y como decíamos en nuestra previa, y se ganó a un rival directo...
