Crónica. El Betis devora a su monstruo 1-0. Real Betis vs Atlético de Madrid.

Real Betis y Atlético de Madrid midieron sus fuerzas en el Benito Villamarín en partido correspondiente a la jornada 11 de Liga. 52621 espectadores presenciaron en directo cómo su equipo destrozaba por fin la mala racha contra este rival. El 1-0 final es un resultado tan justo como corto: los de Pellegrini han sido netamente superiores al equipo colchonero.

Ambos equipos venían de vencer en Liga y perder en Europa, con los métodos de sus entrenadores cuestionados por momentos. Con este resultado, el Atlético de Madrid ha sufrido hoy su primera derrota en Liga.

Con hasta 6 ausencias llegaba el Betis al choque: Lo Celso, Isco, William Carvalho, Marc Roca, Natan y Bellerín, por unos u otros motivos, no pudieron ser convocados. Con este panorama, Pellegrini se decidió por una alineación compuesta por Rui Silva bajo palos; Aitor Ruibal y Perraud en laterales; Diego Llorente y el capitán Bartra completando la línea de 4 defensas; Altimira y Johnny Cardoso en el doble pivote; con Abde atacando por la izquierda, Fornals por la derecha y el Chimy Ávila y Vitor Roque en punta. Dos delanteros otra vez, como en Pamplona, donde el invento salió bien, y ante el Copenhague, donde no funcionó.

El Atlético de Simeone también venía con importantes ausencias, sobre todo en el centro de la defensa. El entrenador argentino apostó de inicio por un 4-4-2 en el que Griezmann y Julián Álvarez compusieron el ataque, estando escoltados por escuderos del nivel de Lino, Gallagher, De Paul y Koke.

El Betis se ha abonado a los goles tempraneros: si contra el Copenhague tardó 8 minutos en abrir la lata, hoy le ha bastado la mitad de ese tiempo. Fue en una jugada por banda izquierda en la que Perraud conecta con Abde, que se interna en el área y su centro es involuntariamente remachado a su propia red por Giménez. 1-0 en el minuto 4.

El gol no fue un espejismo. El Betis literalmente se comió al Atlético en la primera parte. No se recuerda un periodo en el que el equipo haya estado tan intenso y atrevido ante un rival de este nivel. Todo el ataque estuvo excelente, especialmente Vitor Roque y Abde, continuos incordios para una defensa rojiblanca que no era capaz de dar una a derechas. El doble pivote con Altimira y Cardoso era una máquina de robar y generar juego.

Ambos equipos buscaron una presión alta, pero solo funcionaba la del Betis. Como un auténtico bloque en el que todos tocaban la misma música, se generaban ocasiones prácticamente cada minuto. Hasta 13 remates por parte local en la primera mitad… pero solo uno entre palos. Y es que la puntería fue el talón de Aquiles verdiblanco.

Abde primero en un mano a mano que manda incomprensiblemente fuera, luego en un disparo que impacta el larguero, Vitor Roque tras un fallo de Oblak, Chimy Ávila en remate cruzado desde cerca… las ocasiones claras no dejaban de sucederse ante un Atlético que no tuvo más remedio que pasar a defensa de 5 para evitar la sangría.

El equipo de Simeone, consciente de que merecía un castigo mayor, intentaba pausar el aluvión y buscar opciones a balón parado. En la única ocasión clara visitante en este periodo, Reinildo cabeceó para que Rui Silva detuviera muy seguro.

Con una mezcla de orgullo por el juego y desesperación por la falta de puntería se llegó rápido al descanso, tras una primera parte en la que el Betis bordó el fútbol pero perdonó demasiado. De hecho, su único gol fue en propia puerta del rival.

Como era de esperar, Simeone hizo cambios al descanso. Javi Galán y Sorloth reemplazaron a Reinildo, que estaba amonestado, y Gallagher. El Cholo mantuvo el sistema de 5-3-2 pasando a Griezmann a la izquierda, con el noruego y Julián Álvarez en punta. Pellegrini no tocaba de momento nada.

En la segunda parte el choque se igualó. El Atlético empezaba a combinar terminando los ataques, y lógicamente la gasolina verdiblanca se agotaba. Griezmann en un disparo rechazado y Julián Álvarez, negado bien por Rui Silva, generaron peligro.

Aun así el Betis también las tuvo, pero sus futbolistas pecaban de individualismo: remataban desde cualquier posición en lugar de buscar pases letales. Vitor Roque, Altimira, el Chimy Ávila y Abde en dos ocasiones.

Poco a poco el equipo local volvió a tirar de orgullo, y recordó al de la primera parte. Al son de un enorme Cardoso, que amagó con lesionarse pero pudo seguir en el campo, el Betis siguió su avalancha ofensiva. La ocasión más clara, mezclada con polémica, llegó mediado el segundo tiempo: el balón le llega a Fornals dentro del área, que remata a la cruceta. La pelota rebotada le llega de nuevo al castellonense, que intenta rematar de cabeza pero Javi Galán lo evita levantando la pierna. Gil Manzano señala penalty en primera instancia pero el VAR lo corrige y la pena máxima es anulada, para enfado de equipo y afición.

A 15 minutos del final Pellegrini hizo su primer cambio: Assane Diao reemplazó a un gran Chimy Ávila. Nada más entrar, el canterano tuvo una ocasión en la que remata fuera desde lejos, cuando tenía mejores opciones que chutar.

Por parte visitante, Correa, que había entrado unos minutos antes, empezó a asustar a una parroquia verdiblanca que le conoce bien. Y cerca estuvo de liarla como de costumbre: dos remates al palo y un mano a mano ante Rui Silva encogieron el corazón al estadio entero.

Al partido era un correcalles espectacular. El Atlético jugaba ya con 4 delanteros y el Betis buscaba las contras. En una de ellas, Vitor Roque anota un gol que es bien anulado por fuera de juego. Los 7 minutos de descuento dados por Gil Manzano se antojaban un suplicio.

En la prolongación, el Atlético fue una máquina de colgar balones, pero el Betis era un frontón. Y de esta manera el partido terminó con un 1-0 final cortísimo para los méritos béticos.

Con este resultado, el Betis suma ya 18 puntos en 11 jornadas y se coloca quinto momentáneamente, justo una posición y 2 unidades por detrás del rival de hoy.

La semana que viene hay de nuevo doble ración de Betis: nos estrenamos el jueves en la Copa del Rey contra el Gévora en Almendralejo, antes de viajar el domingo al nuevo San Mamés en un partido clave para las aspiraciones ligueras de ambos.

Jugando como hoy cualquier cosa es posible. Así sí, Betis.

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