El Betis volvió a caer un partido más, esta vez ante el Villarreal (0-2), en un encuentro donde todo lo malo que le pudo pasar, le pasó, tanto por deméritos propios como por decisiones injustas o mala fortuna de cara a portería. Otro bochorno que invita a dar por finalizada la portería lo antes posible.
Alexis volvió a mantener el esquema de tres centrales y dos mediapuntas que venía usando en las últimas jornadas, manteniendo su confianza en hombres clave como Bartra, Guido, Canales o Fekir.
El partido comenzó torcido desde el principio, cuando Bartra forcejeó con Bacca dentro del área a los cinco minutos y el árbitro decretó penalti para el Villarreal, siendo transformado por Alcácer. El Betis reaccionó bien, gozando de una doble oportunidad de Fekir y Canales tras un centro de Pedraza, pero ambos se toparon con la defensa.
Incluso consiguió empatar el partido, ya que Anguissa se marcó en su propia portería una falta botada por Canales, pero el árbitro lo anuló por fuera de juego de manera inexplicable, ya que ningún jugador bético intervino en la jugada. Los verdiblancos seguían apretando, pero cuando mejor estaban volvieron a recibir otro duro revés, cuando en otra acción contemplativa de la zaga, Alcácer aprovechó para hacer el 0-2 a la media hora.
El Betis siguió apretando pero la suerte estaba completamente en contra, ya que en sendos remates de Bartra y Fekir el balón se paseó por delante de la portería de Asenjo sin poder acortar distancias. Encima, justo antes del descanso, en dos acciones absurdas Fekir recibió doble cartulina amarilla y dejó a los suyos con diez todo el segundo tiempo.
En el segundo tiempo no hubo historia alguna. El Villarreal controló y tuvo al Betis donde quiso y este ni pudo ni se le vio realmente convencido de conseguir sacar algo positivo de este partido. Incluso Bacca, Cazorla y Alcácer tuvieron claras ocasiones para aumentar la renta, pero erraron en los últimos metros para hacer el tercero.
