 
3 - 2Tiempo completo |
0-1 | 10' Antony | |
0-2 | 21' Diego Llorente | |
| Fran Beltran 62' | 1-2 | |
| Javi Rodriguez 64' | 2-2 | |
| Swedberg 88' | 3-2 | |
| Colegiado: Busquets Ferrer | ||
| VAR: Del Cerro Grande |
Nueva web ➡Ficha del partido➡Post del partido➡Galería de fotos
Al empezar el partido contra el Celta vimos un Real Betis Balompié con una notable actitud ofensiva, era esperanzador, desde el primer minuto del partido se volcaba a nuestro favor todo, eran momentos dulces, con un primer gol de un fichaje invernal, Anthony, que con un toque de tobillo colocó el balón fuera del alcance del portero y sorteando varios defensas que impedían el espacio de tiro, un gol al alcance de pocos jugadores que describe perfectamente la dimensión del jugador que tenemos cedido y los motivos por los que se pagó tanto dinero por él.
El nueve elegido Bakambu hacía buenos minutos, desmarques, asociaciones, robos y como colofón peinó desde el primer poste un buen centro de córner para que convirtiéramos el 0-2 que, unido a dos largueros llegó a parecer escasa la diferencia con la que nos fuimos al descanso.
Lo que sucedió en ese descanso sólo lo saben Pellegrini y los jugadores, pero el cambio, a peor, fue radical. En principio hizo un cambio de lateral izquierdo sentando a Perraud con amarilla por Ricardo Rguez, que sigue sin estar en forma. Ese fue el primero de muchos errores en los cambios realizados por Pellegrini y que a la postre nos costaron los tres puntos de manera absolutamente incomprensible.
El Celta, plagado de chicos de cantera, asedió de inicio al Betis no sólo por banda sino por el centro donde los dos pivotes Fran Beltrán y un excelente canterano Fer López nos bailaban el agua, limpiaban con pases líneas y en asociaciones sorteaban el obstáculo Roca-Cardoso con excesiva facilidad. Todo había cambiado, el equipo dominador estaba encerrado, sin posesión de la pelota y ausente de jugadores que en esa situación asumieran la responsabilidad de echarse el equipo a las espaldas y pasar el mal rato.
Para más INRI, Pellegrini no contento con equivocarse en sacar a Ricardo en lugar del canterano Arribas que tan excelentemente cerró la banda izquierda en Mallorca, saca a Altimira por Roca (había pedido el cambio), saca a Jesús Rodríguez incomprensiblemente y saca a Bakambu y mete a Roque para luego completar el desatino sacando a Lo Celso para meterlo en la banda derecha.
Estos cambios y la actitud de salida del equipo tras el descanso enterraron cualquier posibilidad de sacar algo positivo en Vigo y por ende meternos en problemas en la clasificación alejándonos de objetivos europeos.
La primera pregunta es en relación con el cambio de Jesús Rodríguez, el canterano es una de las primeras opciones de cambio siempre y no puede escudarse en que no puede terminar 90 minutos pues unos segundos antes del cambio había realizado un ataque en velocidad para luego ponerse a ayudar en defensa y sobre todo porque vuelve a darle una oportunidad a Abde que en partidos anteriores no la mereció.
En cuanto al lateral izquierdo es palmaria la baja forma de Ricardo Rodríguez, de hecho, entraban por su banda como cuchillo en mantequilla y me pregunto si tras el partido de Arribas en Mallorca no puede por méritos al menos optar a ese puesto el canterano.
El cambio de Anthony, al que no vi cansado, tampoco lo entendí, sobre todo porque a Lo Celso se le nota perdido en la banda derecha y sin actitud en esa zona, quizás porque el argentino se siente discriminado respecto del trato que el técnico le ofrece a Isco. Al malagueño le ha dado la 10 a pesar de los buenos partidos de Gio por la zona de mediapunta, y ayer, así como en casa contra el At Bilbao, le regaló al Isco 25 minutos incomprensiblemente ya que desde el 70/75 el malagueño anda por el campo sin aportar ni en ataque ni en defensa, el depósito le da para 70 minutos.
Debe plantearse el técnico adaptar el sistema para colocar en igualdad a Isco y Lo Celso para no perder definitivamente al argentino que a leguas se le ve a disgusto teniendo que adaptarse a Isco, ambos son buenos jugadores y quizás el 4-1-4-1 podría tener encaje de ambos por dentro, partiendo ambos a pierna cambiada, yo no soy quién para afirmar esto pero si se muchísimo de gestión de personas y veo claramente que perdemos a un magnifico jugador que cuando se ha sentidad protagonista ha dado goles, asistencias y un recital de fútbol.
Más doliente aún fue el partido de Altimira que ni defendió ni distribuyó siendo responsable claro con su actitud (andando) en los dos últimos goles. Puedo afirmar sin ambages después de verlo ya unos cuantos partidos que Mateo Flores le supera en muchas facetas, defensivamente, en el posicionamiento táctico y en el tratamiento del balón, la pelota en los pies de Altimira ralentiza el juego, la soba excesivamente facilitando al rival las tareas defensivas, por el contrario Mateo juega al primer toque, lo hace fácil dando el protagonismo a otros mientras él se dedica a lo que sabe, posicionarse para la jugada tras pérdida y mantener la posición.
A estas alturas tengo meridianamente claro que la apuesta del entrenador por cantera no es firme, ni valiente, no les da el puesto a pesar que cuando salen no lo hacen mal, sólo los ha puesto cuando el cuadro médico ha sido de numerosas bajas, siento mucho esto porque cuando se vayan todos y las cosas se pongan feas los que nos sacaran del agujero serán los de siempre, los canteranos. El Betis debe tener siempre un entrenador que apueste por este libro de estilo y con dolor tengo que decir que Pellegrini no lo hace aunque la estadística diga que ha alineado a 20 canteranos es eso, estadística, si interpretamos esa apuesta comprobamos que no es ni decidida ni valiente y ello a pesar que Ortiz se ha ganado el sitio (veremos cuando vuelvan los lesionados) Mateo sabe lo que hace, Jesús simplemente es el mejor de los últimos partidos, Arribas en un defensa serio, Pablo y Dani Pérez no han desentonado nunca. ¿qué hacemos Manuel? ¿Seguimos confiando en quien tira la camiseta o en chicos que han mamado Betis desde que tenían dientes de leche? ¿Les falta calidad o actitud? Yo digo no.
En resumen, hay una palabra por la cual un entrenador empieza a perder la autoridad y es cuando es injusto, cuando la alineación no refleja los méritos alcanzados y siento decir que está empezando a pasar. El partido de ayer fue una ignominia que no puede volver a pasar, está en su mano señor entrenador.
