Con mi edad y mi "cabeza" (aparte del volumen, la tengo "peó" que un palmito "arrancao" a "patás"), tengo
para llenar unas cuántas páginas. La naturaleza, comete infinidad de "equivocos", y bién pudiera ser uno de
ellos el que esto escribe. Me dá un poco de reparo el contar algunas de las "situaciones" ó "hechos" que me
han sucedido, pues imagino (tampoco sería nuevo para mí), a los "adjetivos" que estaré expuesto. Pero.......
si uno es cómo es, para qué nos vamos a llamar a engaño.
Hay por aquí quién conoce, de viva voz, algún que otro despiste de los mios, sobre todo uno que no se puede
contar en público, si no ha prescrito, creo que conlleva cárcel (no piensen mal, fué un daño para mí mismo).
Este no lo conocen.......
Se casaba mi hijo, "Iglesia de Los Gitanos", la madre, cómo es costumbre, era la "Madrina", por lo que mi
desplazamiento desde el Cerro a tal Iglesia la ejecuté en otro coche, quedando en que me llevaría a unos
tios y primos del "novio" que llegaron desde Barcelona para el evento, aparte de mi vecina Consuelo. A su
hora, no era cuestión de llegar tarde, nos montamos todos en el coche (no se olvidó nadie), y allí que nos
presentamos: "con media hora de antelación". El coche, no os diré dónde lo aparqué, para no dar pistas,
pero encontré aparcamiento muy pronto. Bueno.....pues llegamos a la puerta de la "Iglesia", y en principio,
seguramente por que era temprano, no veía ningún conocido ni familiar del "novio". Pasa el tiempo y me
comenta mi cuñada lo grande que era la familia de la novia y lo pequeña del novio, o sea, la mía. Aquello
no era normal, faltaban cinco minutos y yo no encontraba ni amigos ni conocidos, por lo que me decidí a
preguntar, momento en que llega el novio........."NO ERA MI HIJO". Me presenté y allí estuvimos esperando
en.........................................la "Iglesia de los Negritos".
Mi "despiste" me costó no ver entrar al "novio auténtico" ni a la novia......llegamos tarde ( El aparcamiento
por la plaza dónde está los Gitanos "está fatá").
¡¡¡¡Por favor.......!!. Comentad los vuestros, así me sentiré un poco mas aliviado.
Caudetreba, es que como tú no eres" muy de iglesias..."
como se diría en estos casos, "son mis costumbres y hay que respetarlas". Gracias a dios, cuando se me han dado estos casos, ha sido siempre pegándome el madrugón en vez de que me llame el del turno saliente porque me toca entrar a mí.
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