Los nuevos hospitales de Esperanza Aguirre: una oportunidad de negocio
¿Saben los madrileños que Esperanza Aguirre ha dado la gestión privada de los nuevos hospitales de la Comunidad de Madrid a empresas inmobiliarias sin ninguna experiencia en el sector sanitario? ¿Saben los madrileños que los 8 nuevos hospitales de gestión privada han costado 8.000 millones de euros de nuestros bolsillos? ¿Saben los madrileños que, a pesar de los 8 hospitales nuevos, sólo hay 79 camas más en toda la Comunidad de Madrid? ¿Saben los madrileños que se ha dado un descenso real en el número de trabajadores sanitarios a pesar de haber más hospitales? La calidad de los servicios médicos que da la sanidad privada (instituciones con afán de lucro) es menor que la que da la pública (instituciones sin afán de lucro). Las empresas con afán de lucro en los servicios sanitarios tienen que ahorrar fondos en áreas que afectan a la calidad de los servicios a fin de conseguir el dinero que necesitan para pagar a sus accionistas y a sus gestores. El sector privado es un negocio. El afán de lucro no encaja con unos servicios cuyo objetivo debiera ser siempre servir a los pacientes.
Puede existir una percepción de que la privada es mejor que la pública porque, por ejemplo, los tiempos de espera son menores en la privada que en la pública. Pero la causa de las deficiencias de la sanidad del sector público está en la enorme escasez del gasto público sanitario que se da sobre todo en las comunidades gobernadas por el PP. Desmantelar la Sanidad pública Lo que Esperanza Aguirre está haciendo con la Sanidad en la Comunidad de Madrid es el mayor ataque que han sufrido los servicios públicos en España. Madrid se ha convertido en el laboratorio de la privatización de la sanidad pública, y, si este proceso no se frena, España asistirá al desmantelamiento del sector público.
A Esperanza Aguirre no le vale con que los nuevos hospitales sean de gestión privada, sino que en la Comunidad de Madrid se ha iniciado la privatización de la Atención Primaria, existiendo centros de salud que ya tienen algunas plantas privadas, con consultas privadas y médicos contratados de manera privada.
La macabra Ley 15/97 de Aznar
¿Por qué Esperanza Aguirre puede hacer esto con la Sanidad madrileña? Porque la Ley 15/97 instaurada por el Gobierno Aznar permite que las Comunidades Autónomas privaticen de la Sanidad Pública. En la Ley de Nuevas Formas de Gestión Sanitaria se apoyó el Gobierno de Esperanza Aguirre para promover en la pasada legislatura sus “hospitales administrados” (de gestión mixta público-privada). Si el PP de Esperanza Aguirre sigue en el poder el sistema madrileño de salud no será más que un conglomerado de empresas privadas, que dejará de mandar ciertos tratamientos o no realizarán intervenciones quirúrgicas si el gasto no les conviene. Este hecho se está constatando ya en el Hospital del Sureste, donde a enfermos con un tratamiento caro se les están negando el mismo.
Se hace necesario modificar los artículos 2 y 3 de la Ley 15/1997, para que los hospitales conserven el carácter público en la la titularidad, financiación, gestión y provisión de servicios. Esto que se está dando ya en Madrid es sólo el ensayo para después hacerlo a nivel de todo el estado si el PP llegara al poder en 2012.
El truco de los nuevos hospitales
Durante la primera legislatura de Esperanza Aguirre (2003-2007) se han edificado 8 hospitales por 2 mecanismos: a) por concesión de obra pública: el del Norte, Vallecas, Arganda, Coslada, Parla, Majadahonda y Aranjuez; y b) como concesión administrativa: el de Valdemoro. Este mismo camino siguen los 4 que está previsto construir esta legislatura (2008-2011), Móstoles, Villalba, Torrejón y Carabanchel.
Tanto en los unos como en los otros, todo el personal no saniario correrá a cargo de las empresas privadas concesionarias, un tercio aproximadamente de la plantilla, que podrá ser subcontratado. La diferencia es que, en los primeros, el personal sanitario lo pondrá la Administración, en los segundos, no.
Hospitales para Acciona, Sacyr-Vallehermoso, Hispánica, ACS, FCC,…
En los nuevos hospitales no se ha contratado ni a un sólo médico más, se han trasladado de los existentes. ¿Por qué los construye entonces Esperanza Aguirre? Para dárselos a Acciona, Sacyr-Vallehermoso, Hispánica, ACS, FCC,… a los que se les da la parte de servicios y de gestión, a pesar de que estas empresas, procedentes del sector inmobiliario, son empresas sin experiencia previa en la sanidad.
El objetivo de la política de Esperanza Aguirre está más relacionado con el beneficio de las empresas constructoras que con la salud de los madrileños. Esperanza Aguirre deriva ingentes cantidades de los presupuestos públicos hacia las empresas privadas que, ante los síntomas de hundimientos de los sectores más especulativos, han tomado posiciones en la sanidad pública.
A pesar de la apertura de los nuevos hospitales se ha producido un descenso real en el número de trabajadores. El personal sanitario que va a atender a los pacientes también lo va a contratar la empresa concesionaria. Eso quiere decir que el personal del sistema Nacional de la Salud que están trabajando actualmente en estas áreas hay que quitarlos de ahí. Se está enajenando patrimonio público de la seguridad social. La motivación sanitaria de Esperanza Aguirre es inmobiliaria, no de cuidar la salud de los madrileños.
Los nuevos hospitales de Esperanza Aguirre: una oportunidad de negocio | Confluencias
Construyo nuevos hospitales del bolsillo de los contribuyentes, les doy su gestión a empresas que no tienen nada que ver con la sanidad, desplazo a trabajadores sanitarios de otros centro. Resultado: peor atención en otros centros, agujeros típicos de la sanidad privada y millones para el bolsillo de tus amigotes.
Esto si que es preocupante, y no de otras gilipolleces que se hablan en España. Esto no sale en el telediario de Antena 3 ¿verdad?
¿Saben los madrileños que Esperanza Aguirre ha dado la gestión privada de los nuevos hospitales de la Comunidad de Madrid a empresas inmobiliarias sin ninguna experiencia en el sector sanitario? ¿Saben los madrileños que los 8 nuevos hospitales de gestión privada han costado 8.000 millones de euros de nuestros bolsillos? ¿Saben los madrileños que, a pesar de los 8 hospitales nuevos, sólo hay 79 camas más en toda la Comunidad de Madrid? ¿Saben los madrileños que se ha dado un descenso real en el número de trabajadores sanitarios a pesar de haber más hospitales? La calidad de los servicios médicos que da la sanidad privada (instituciones con afán de lucro) es menor que la que da la pública (instituciones sin afán de lucro). Las empresas con afán de lucro en los servicios sanitarios tienen que ahorrar fondos en áreas que afectan a la calidad de los servicios a fin de conseguir el dinero que necesitan para pagar a sus accionistas y a sus gestores. El sector privado es un negocio. El afán de lucro no encaja con unos servicios cuyo objetivo debiera ser siempre servir a los pacientes.
Puede existir una percepción de que la privada es mejor que la pública porque, por ejemplo, los tiempos de espera son menores en la privada que en la pública. Pero la causa de las deficiencias de la sanidad del sector público está en la enorme escasez del gasto público sanitario que se da sobre todo en las comunidades gobernadas por el PP. Desmantelar la Sanidad pública Lo que Esperanza Aguirre está haciendo con la Sanidad en la Comunidad de Madrid es el mayor ataque que han sufrido los servicios públicos en España. Madrid se ha convertido en el laboratorio de la privatización de la sanidad pública, y, si este proceso no se frena, España asistirá al desmantelamiento del sector público.
A Esperanza Aguirre no le vale con que los nuevos hospitales sean de gestión privada, sino que en la Comunidad de Madrid se ha iniciado la privatización de la Atención Primaria, existiendo centros de salud que ya tienen algunas plantas privadas, con consultas privadas y médicos contratados de manera privada.
La macabra Ley 15/97 de Aznar
¿Por qué Esperanza Aguirre puede hacer esto con la Sanidad madrileña? Porque la Ley 15/97 instaurada por el Gobierno Aznar permite que las Comunidades Autónomas privaticen de la Sanidad Pública. En la Ley de Nuevas Formas de Gestión Sanitaria se apoyó el Gobierno de Esperanza Aguirre para promover en la pasada legislatura sus “hospitales administrados” (de gestión mixta público-privada). Si el PP de Esperanza Aguirre sigue en el poder el sistema madrileño de salud no será más que un conglomerado de empresas privadas, que dejará de mandar ciertos tratamientos o no realizarán intervenciones quirúrgicas si el gasto no les conviene. Este hecho se está constatando ya en el Hospital del Sureste, donde a enfermos con un tratamiento caro se les están negando el mismo.
Se hace necesario modificar los artículos 2 y 3 de la Ley 15/1997, para que los hospitales conserven el carácter público en la la titularidad, financiación, gestión y provisión de servicios. Esto que se está dando ya en Madrid es sólo el ensayo para después hacerlo a nivel de todo el estado si el PP llegara al poder en 2012.
El truco de los nuevos hospitales
Durante la primera legislatura de Esperanza Aguirre (2003-2007) se han edificado 8 hospitales por 2 mecanismos: a) por concesión de obra pública: el del Norte, Vallecas, Arganda, Coslada, Parla, Majadahonda y Aranjuez; y b) como concesión administrativa: el de Valdemoro. Este mismo camino siguen los 4 que está previsto construir esta legislatura (2008-2011), Móstoles, Villalba, Torrejón y Carabanchel.
Tanto en los unos como en los otros, todo el personal no saniario correrá a cargo de las empresas privadas concesionarias, un tercio aproximadamente de la plantilla, que podrá ser subcontratado. La diferencia es que, en los primeros, el personal sanitario lo pondrá la Administración, en los segundos, no.
Hospitales para Acciona, Sacyr-Vallehermoso, Hispánica, ACS, FCC,…
En los nuevos hospitales no se ha contratado ni a un sólo médico más, se han trasladado de los existentes. ¿Por qué los construye entonces Esperanza Aguirre? Para dárselos a Acciona, Sacyr-Vallehermoso, Hispánica, ACS, FCC,… a los que se les da la parte de servicios y de gestión, a pesar de que estas empresas, procedentes del sector inmobiliario, son empresas sin experiencia previa en la sanidad.
El objetivo de la política de Esperanza Aguirre está más relacionado con el beneficio de las empresas constructoras que con la salud de los madrileños. Esperanza Aguirre deriva ingentes cantidades de los presupuestos públicos hacia las empresas privadas que, ante los síntomas de hundimientos de los sectores más especulativos, han tomado posiciones en la sanidad pública.
A pesar de la apertura de los nuevos hospitales se ha producido un descenso real en el número de trabajadores. El personal sanitario que va a atender a los pacientes también lo va a contratar la empresa concesionaria. Eso quiere decir que el personal del sistema Nacional de la Salud que están trabajando actualmente en estas áreas hay que quitarlos de ahí. Se está enajenando patrimonio público de la seguridad social. La motivación sanitaria de Esperanza Aguirre es inmobiliaria, no de cuidar la salud de los madrileños.
Los nuevos hospitales de Esperanza Aguirre: una oportunidad de negocio | Confluencias
Construyo nuevos hospitales del bolsillo de los contribuyentes, les doy su gestión a empresas que no tienen nada que ver con la sanidad, desplazo a trabajadores sanitarios de otros centro. Resultado: peor atención en otros centros, agujeros típicos de la sanidad privada y millones para el bolsillo de tus amigotes.
Esto si que es preocupante, y no de otras gilipolleces que se hablan en España. Esto no sale en el telediario de Antena 3 ¿verdad?
Comentario