Con este movimiento, Susana Díaz se convertirá ya en septiembre en la nueva presidenta de Andalucía. Y lo hará previsiblemente con el apoyo de izquierda Unida, el socio de gobierno. Antes del comité director, Griñán va a mantener un encuentro con los ocho secretarios provinciales del PSOE andaluz. A todos les va a decir que el partido está preparado ya para el relevo después del proceso de primarias en el que Díaz ha obtenido un respaldo abrumador sin necesidad de acudir a las urnas.
Los motivos
Cuando anunció su marcha hace un mes, Griñán aludió a razones personales y familiares. Pronto cumplirá los 70 años. También aludía a la complejidad para elaborar el próximo presupuesto por los recortes del Gobierno. Pero lo cierto es que el caso de los ERE ha tenido que jugar un papel esencial en su decisión. Griñán ha controlado el proceso de su relevo, pero no controla los tiempos de la jueza Mercedes Alaya, que ya le ha nombrado varias veces en sus autos y recientemente ha abierto la puerta a su posible imputación.
Precisamente este jueves está prevista la declaración del ex interventor de la Junta, que según ha sabido la SER, habría declarado ya a la Guardia Civil que alertó a Griñán de las irregularidades que se estaban cometiendo. El socialista lo ha negado por activa y por pasiva, y es un asunto que además le irrita profundamente, pero nadie puede garantizar en este momento que la jueza no vaya a plantear una posible imputación del todavía presidente andaluz.
Las consecuencias
A la espera de que Griñán dé este miércoles los detalles y el calendario, se plantean tres consecuencias. La más inmediata: Susana Díaz será la nueva presidenta de la Junta en septiembre. Griñán podría ser elegido senador por la comunidad autónoma en el primer pleno del parlamento, por lo que mantendría su aforamiento tras dejar su acta de parlamentario, y Díaz tendría que acometer una remodelación del gobierno, aún por definir, aunque parece claro que saldrían los consejeros señalados por la jueza en el caso de los ERE. La consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, ha sido mencionada por Alaya en sus autos.
A partir de ahí, no habría escenario de adelanto electoral inmediato por dos motivos: afianzar la figura de Díaz y la estabilidad que garantiza el pacto con IU. En principio, Griñán mantendría la secretaria general del PSOE andaluz, aunque a medio plazo, habría que convocar un congreso extraordinario para decidir el nuevo liderazgo y definir la relación entre Susana Díaz y el actual número dos del partido, Mario Jiménez
¿En qué situación queda la oposición?
Está claro que esta decisión coge con el pie cambiado a muchos. Para el PP andaluz es el peor de los escenarios posibles, en pleno 'caso Bárcenas' y sin un candidato claro en Andalucía, toda vez que Juan Ignacio Zoido ha mostrado a las claras su voluntad de seguir como alcalde de Sevilla. Ahora mismo se barajan varios nombres, como los de José Luis Sanz, Juan Manuel Moreno Bonilla, Carmen Crespo o José Antonio Nieto, pero la dirección dice no tener prisas para designarlo.
Este nuevo escenario precipitará probablemente las cosas. Izquierda Unida ha renovado recientemente su ejecutiva regional y ya ha dejado claro que su prioridad es garantizar la estabilidad del Gobierno andaluz, que no tiene tanto que ver con los nombres sino con el cumplimiento del programa de gobierno en Andalucía, un pacto que actualmente goza de muy buena salud.
http://www.cadenaser.com/espana/articulo/jose-antonio-grinan-dejara-presidencia-junta-andalucia-principios-septiembre/csrcsrpor/20130723csrcsrnac_45/Tes
Los motivos
Cuando anunció su marcha hace un mes, Griñán aludió a razones personales y familiares. Pronto cumplirá los 70 años. También aludía a la complejidad para elaborar el próximo presupuesto por los recortes del Gobierno. Pero lo cierto es que el caso de los ERE ha tenido que jugar un papel esencial en su decisión. Griñán ha controlado el proceso de su relevo, pero no controla los tiempos de la jueza Mercedes Alaya, que ya le ha nombrado varias veces en sus autos y recientemente ha abierto la puerta a su posible imputación.
Precisamente este jueves está prevista la declaración del ex interventor de la Junta, que según ha sabido la SER, habría declarado ya a la Guardia Civil que alertó a Griñán de las irregularidades que se estaban cometiendo. El socialista lo ha negado por activa y por pasiva, y es un asunto que además le irrita profundamente, pero nadie puede garantizar en este momento que la jueza no vaya a plantear una posible imputación del todavía presidente andaluz.
Las consecuencias
A la espera de que Griñán dé este miércoles los detalles y el calendario, se plantean tres consecuencias. La más inmediata: Susana Díaz será la nueva presidenta de la Junta en septiembre. Griñán podría ser elegido senador por la comunidad autónoma en el primer pleno del parlamento, por lo que mantendría su aforamiento tras dejar su acta de parlamentario, y Díaz tendría que acometer una remodelación del gobierno, aún por definir, aunque parece claro que saldrían los consejeros señalados por la jueza en el caso de los ERE. La consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, ha sido mencionada por Alaya en sus autos.
A partir de ahí, no habría escenario de adelanto electoral inmediato por dos motivos: afianzar la figura de Díaz y la estabilidad que garantiza el pacto con IU. En principio, Griñán mantendría la secretaria general del PSOE andaluz, aunque a medio plazo, habría que convocar un congreso extraordinario para decidir el nuevo liderazgo y definir la relación entre Susana Díaz y el actual número dos del partido, Mario Jiménez
¿En qué situación queda la oposición?
Está claro que esta decisión coge con el pie cambiado a muchos. Para el PP andaluz es el peor de los escenarios posibles, en pleno 'caso Bárcenas' y sin un candidato claro en Andalucía, toda vez que Juan Ignacio Zoido ha mostrado a las claras su voluntad de seguir como alcalde de Sevilla. Ahora mismo se barajan varios nombres, como los de José Luis Sanz, Juan Manuel Moreno Bonilla, Carmen Crespo o José Antonio Nieto, pero la dirección dice no tener prisas para designarlo.
Este nuevo escenario precipitará probablemente las cosas. Izquierda Unida ha renovado recientemente su ejecutiva regional y ya ha dejado claro que su prioridad es garantizar la estabilidad del Gobierno andaluz, que no tiene tanto que ver con los nombres sino con el cumplimiento del programa de gobierno en Andalucía, un pacto que actualmente goza de muy buena salud.
http://www.cadenaser.com/espana/articulo/jose-antonio-grinan-dejara-presidencia-junta-andalucia-principios-septiembre/csrcsrpor/20130723csrcsrnac_45/Tes
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