Para conseguir el título de la ESO ya no sólo no hace falta aprobar todas las asignaturas sino que ni siquiera habrá que agotar todas las convocatorias. Los alumnos podrán obtener el título con hasta tres materias pendientes y sin tener que esperar a septiembre para hacer los exámenes de recuperación.

La Consejería de Educación ha distribuido unas instrucciones para la evaluación en la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) en las que se promueve que la concesión del título (al término del cuarto curso) se produzca en el mes de junio, sin tener que esperar a los resultados de septiembre en aquellos casos de alumnos que tengan dos o tres asignaturas pendientes.

El escrito ha sido denunciado por la Asociación de Profesores de Instituto (APIA) de Andalucía, que considera un "disparate" la interpretación que la administración realiza de las normas de evaluación.

La directriz que ha llegado a los centros emana del Servicio de Inspección Educativa aunque en ella se citan recomendaciones de la Dirección General de Ordenación y Evaluación Educativa. En la misma se aclaran las dudas que supuestamente algunos centros habrían planteado al respecto: "¿Se puede titular en junio con una, dos o excepcionalmente tres pendientes, siempre que el equipo educativo estime que han alcanzado las competencias básicas y los objetivos de la etapa?", se pregunta la dirección general en el escrito. La respuesta es que sí, evidentemente.

Para llegar a esa conclusión se recuerda que las normas reguladoras "no condicionan la obtención de la titulación de la ESO a las convocatorias sino al cumplimiento de determinados requisitos, que son haber finalizado la ESO habiendo alcanzado las competencias básicas y los objetivos de la etapa, y estas condiciones pueden darse, si así lo constata el equipo docente, tanto en la evaluación ordinaria de junio, o en la evaluación extraordinaria de septiembre".

"Este procedimiento, que apoya la autonomía pedagógica de los centros para adaptarse a los condicionantes del contexto socioeconómico del centro, y a las circunstancias específicas del alumnado coincide con el de la promoción, pudiendo el alumno pasar al curso siguiente en junio con dos o tres materias pendientes, si así lo estima conveniente el equipo docente". O sea, de que lo que vale para obtener el título vale también para pasar de un curso a otro.

Por si el argumento utilizado pareciera endeble, el servicio de Inspección Educativa recuerda que, dado que el curso académico se inicia el 1 de septiembre de cada año y finaliza el 30 de junio del año siguiente, es por ello "por lo que podemos interpretar que es posible considerar que un alumno titule en junio con dos materias pendientes si, a juicio del equipo docente, ha alcanzado los objetivos de la etapa".

Sin embargo, en el mismo documento donde se interpreta de manera tan laxa las normas de evaluación, cuando se enumeran los contenidos del informe que los docentes deben preparar de cara a la información que se facilita a las familias, se cita expresamente que en dicho informe "se hará constar la obligatoriedad de presentarse a las pruebas extraordinarias para valorar la madurez académica y promocionar de curso".

La Asociación de Profesores de Andalucía (APIA) subraya esta contradicción y considera además una "irregularidad" que la Consejería de Educación defienda la titulación por anticipado y sin agotar la convocatoria extraordinaria de septiembre. La interpretación que la Junta hace de las normas de evaluación supone una "temeridad" además de "una discriminación en toda regla al conceder una 'ventaja' injustificable a una minoría de alumnos (de los centros en los que se está aplicando esta excepción)".

Recuerda APIA que la orden de 10 de agosto que regula el procedimiento legal al que ha de someterse todo equipo docente establece la propuesta de titulación ha de realizarse en la convocatoria de junio (en caso de haber superado todas las materias) o en la extraordinaria de septiembre, en el caso de alumnos con asignaturas suspensas, de la cual se ha de levantar acta consignando la calificación o el 'no presentado', "lo que indica que el procedimiento administrativo no puede considerarse concluido en junio, existiendo asignaturas pendientes de calificación".

APIA ha anunciado que exigirá a la consejera de Educación, Mar Moreno, la retirada de esas recomendaciones, el cese de las actuaciones de la inspección educativa que de ellas se deriven y la apertura de una investigación interna "a fin de poder localizar el origen de semejante dislate". Igualmente, la asociación se reserva la posibilidad de emprender acciones legales para defender "el derecho que asiste a los profesores a no ver perturbada su objetividad ni su imparcialidad en el desempeño de su actividad profesional".