Mi anécdota no es exactamente volviendo de fiesta, fue en casa de un colega.
Perdón por el tochaco, voy a resumirlo todo lo que pueda.
Resulta que quedé con mis colegas en el cine para ver "Soy Leyenda".
Terminamos de verla y fuimos a comer a un McDonalds, nos inflamos de hamburguesas, alitas de pollo y de helado.
Después compramos un montón de gominolas, frutos secos y de RedBull, lo engullimos todo, jugamos un rato al fútbol y nos fuimos a la casa de otro colega para echarnos un FIFA.
Mientras jugábamos al FIFA la bomba de relojería que teníamos en nuestro aparato digestivo estalló.
La casa de mi colega solo tenía un baño y eramos 5 tíos con un ataque de cagalera y tuvimos que hacer cola para entrar en el baño.
Lo peor es que cada vez que uno salía del baño el olor a míerda aumentaba, cuando me tocó tuve que coger un cubo para no potar en el suelo del baño mientras cagaba.
El colega que nos invitó a su casa y otros 2 colegas que no se pusieron malos empezaron a grabar y a echar fotos con el móvil a los 5 desgraciados que estábamos cagándonos y vomitando.
Que mal lo pasé, nunca se me va a olvidar ese olor a muerte que dejamos en aquel piso.
Como llegaría al cortijo, realmente no sé si llegué o me llevaron, que amanecí en un cobertizo
rodeado de cabras. Aún la parienta no me ha dicho que pasó.
Lo que es muy comun es coger cosas de obras y meterla en casa.
En hotel de Madrid del año pasado cuando fui a ver betis cogí de la puerta del hotel una papelera y me la pasee por todo el hotel hasta meterla en la habitación, se la coloque en medio de la cama de dos que venian conmigo y ya estaban durmiendo.
La risas fue cuando amanecí y empezaron a decir,mientras yo dormia, que no sabia como habian metido aquello ellos alli
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