Barcelona será finalmente la sede de la final de la Copa Davis entre España y la República Checa. Tal y como adelantó MARCA en su edición de este sábado el Palau San Jordi acogerá de nuevo la eliminatoria decisiva por conseguir la 'Ensaladera'.
De esta forma el pabellón barcelonés será la sede de la gran final de la Copa Davis por segunda vez tras la celebrada en el año 2000, donde España consiguió el preciado título.
Barcelona se impuso a la opción de Valencia, las dos únicas ciudades que optaban a acoger esta final, después de que Madrid decidiese no presentar su candidatura y de que la Federación Internacional, propietaria de la competición, hubiese descartado Tenerife, por ser una sede al aire libre, y Málaga, por el aforo del pabellón propuesto.
La decisión ha sido anunciada por el portavoz de la RFET, Igor del Busto, tras una reunión celebrada por la junta directiva en el Club de Tenis de Oviedo, que ha dado su apoyo a Barcelona por trece a uno.
El recinto olímpico de la Ciudad Condal, con capacidad para 17.600 espectadores, será el mismo en el que la Armada consiguiera la primera de sus tres Ensaladeras hace ahora nueve años. Por aquel entonces, el equipo formado por Albert Costa, Juan Carlos Ferrero, Alex Corretja y Joan Balcells se impuso por 3-1 a la Australia de Patrick Rafter, Lleyton Hewitt, Sandon Stolle y Mark Woodforde. Ahora se espera a Radek Stepanek, Tomas Berdych y compañía.