Anuncio

Colapsar
No hay anuncio todavía.

Momentos épicos del ciclismo

Colapsar

Adaptable Foro

Colapsar
X
  • Filtrar
  • Tiempo
  • Mostrar
Limpiar Todo
nuevos mensajes

  • #61
    Re: Momentos épicos del ciclismo

    Originalmente publicado por Le0 Ver Mensaje
    Bueno...

    Perico ganó dopado, dopado con una sustancia que la UCI no consideraba doping, pero sí el COI. De hecho, al año siguiente la UCI la incluyó como sustancia prohibida.
    Nada nuevo, el doping en el ciclismo es tan natural como respirar.
    Todos se dopan o se han dopado. No se libra nadie y Perico no es una excepcion.
    Editado por última vez por 11; https://www.betisweb.com/foro/member/2514-11 en 30/05/12, 17:27:32.

    Comentario


    • #62
      Re: Momentos épicos del ciclismo

      A mí, aparte de los distintos españoles que han ido corriendo el Tour, me encantaba un colombiano del Kelme que se llamaba Santiago Botero.
      Me impactaba la forma de subir que tenía, totalmente encorvado sobre la bici, moviendo un desarrollo bestial, recuerdo perfectamente esta victoria de etapa en el Tour 2002.
      Y también recuerdo lo humilde que era el tío, y lo buena gente que se le veía al hablar tras ganar (también era un grandísimo contrarrelojista), ganó algún Campeonato del Mundo, y alguna contrarreloj en el Tour.

      ¡¡GRANDE BOTERO!!

      Editado por última vez por betiko_panadero; https://www.betisweb.com/foro/member/7121-betiko_panadero en 30/05/12, 16:26:59.

      Comentario


      • #63
        Re: Momentos épicos del ciclismo

        Originalmente publicado por betiko_panadero Ver Mensaje
        A mí, aparte de los distintos españoles que han ido corriendo el Tour, me encantaba un colombiano del Kelme que se llamaba Santiago Botero.
        Me impactaba la forma de subir que tenía, totalmente encorvado sobre la bici, moviendo un desarrollo bestial, recuerdo perfectamente esta victoria de etapa en el Tour 2002.
        Y también recuerdo lo humilde que era el tío, y lo buena gente que se le veía al hablar tras ganar (también era un grandísimo contrarrelojista), ganó algún Campeonato del Mundo, y alguna contrarreloj en el Tour.

        ¡¡GRANDE BOTERO!!
        Me gustaba ese ciclista también

        Comentario


        • #64
          Re: Momentos épicos del ciclismo

          Venga co ño tanto Tour y tan os tia, un poquito de mundiales tambien no?

          OSCAR FREIRE, simplemente y llanamente, aqui el final de sus tres titulos el del 99 en Verona cuando ni dios le conocia y ataca a 400m de meta, el del 2001 en Lisboa pegao a la valla y el del 2004 de nuevo en Verona en una gran estrategia del equipo español:



          Y por supuesto aquel mitico doblete de 2003 en Hamilton, con el oro de Astarloa y la plata de Valverde con aquel mitico ataque del vasco y el sprint impresionante del murciano:

          Editado por última vez por Colxonero_88; https://www.betisweb.com/foro/member/3900-colxonero_88 en 31/05/12, 11:55:11.

          Comentario


          • #65
            Re: Momentos épicos del ciclismo

            Colxo, yo ya habia puesto mas mundiales que Tours... Ese de Freire en el 99 en particular!!


            jojojoo "lo spagnolo" me parto otra vez con Casagrande...

            Comentario


            • #66
              Re: Momentos épicos del ciclismo

              Originalmente publicado por Zanche Ver Mensaje
              Colxo, yo ya habia puesto mas mundiales que Tours... Ese de Freire en el 99 en particular!!


              jojojoo "lo spagnolo" me parto otra vez con Casagrande...
              jaja es que es buenísimo, nadie se lo esperaba

              Comentario


              • #67
                Re: Momentos épicos del ciclismo

                Alguien se acuerda de la preciosa victoria de Perico delgado en los lagos en la vuelta de 1992, descolgando a Montoya( que iba de amarillo) y a Rominger?Me pilló en la Expo, jugando a scalextric en el pabellón de retevisión jejej
                Fue la primera vuelta que ganó rominger. Lo que hace la confianza eh, Rominger pasó de ser un ciclista del montón a disputarle hasta un Tour a Indurain y ganar 2 vueltas más y un giro

                Editado por última vez por exJosema1907; https://www.betisweb.com/foro/member/29900-exjosema1907 en 04/06/12, 01:25:42.

                Comentario


                • #68
                  Re: Momentos épicos del ciclismo

                  Originalmente publicado por Zlatan Ver Mensaje
                  jaja es que es buenísimo, nadie se lo esperaba
                  El final de Freire es increíble. Con lo que había en ese grupo metido, Ullrich, Vandenbroucke, Casagrande... Llegó con trece días de competición, por lesiones, y tuvo fuerzas para atacar a 2-3 km, y volver a atacar a falta de 1 km, cuando nos esperábamos que se la jugara al sprint, que era su fuerte.

                  Comentario


                  • #69
                    Re: Momentos épicos del ciclismo

                    Originalmente publicado por Josema1907 Ver Mensaje
                    Alguien se acuerda de la preciosa victoria de Perico delgado en los lagos en la vuelta de 1992, descolgando a Montoya( que iba de amarillo) y a Rominger?Me pilló en la Expo, jugando a scalextric en el pabellón de retevisión jejej
                    Fue la primera vuelta que ganó rominger. Lo que hace la confianza eh, Rominger pasó de ser un ciclista del montón a disputarle hasta un Tour a Indurain y ganar 2 vueltas más y un giro

                    La recuerdo! Una gran etapa.

                    Comentario


                    • #70
                      Re: Momentos épicos del ciclismo

                      El Giro, Indurain y el susurro del viento

                      España estaba de fiesta, eran buenos tiempos, los Juegos Olímpicos estaban a punto de celebrarse en Barcelona. La Expo, con su modernidad, llevaba el primer AVE a Andalucía, a Sevilla, e Indurain -'Miguelón' - se convertía en el primer español que conquistaba Milán, la Maglia Rosa y el Giro. 20 años se han cumplido ¡Cómo pasa el tiempo!

                      Decía el escritor británico del siglo XIX, Gilbert Keith Chesterton, que “lo maravilloso de la infancia es que cualquier cosa en ella es una maravilla”. Algo que sigue pensando aquel niño de 10 años que se plantaba delante de la televisión para seguir comprobando como un gigantón de piernas robustas, taimadas e infranqueables luchaba contra gigantes pirenaicos, italianos y suizos para convertirse en el primer español que conseguía hacerse con la Maglia Rosa, conquistaba el Giro de Italia y descarnaba otro jirón de historia como la pieza de un puzzle que quería dar lugar al retrato de su leyenda.

                      Aquel niño, de mirada inocente y emocionada, aún recuerda como el viento no dejaba de llamar a Miguel Induráin, como persistía en “susurrarle al oído melodías que sólo él lograba entender” y que sólo él podía trasformar en victorias emocionantes y sufridas. En conquistas históricas para hacer, que como aquel niño de 10 años, muchos quisieran contemplar las incipientes faldas de la leyenda de Miguelón desde el sillín de una bicicleta, en lugar de verlo desde el sillón de casa.

                      Éste es el relato, en definitiva, de la primera victoria de un español en la Corsa Rosa. Una crónica que cumple 20 años y que tuvo su punto de partida el 24 de mayo de 1992, en Genoa, con un prólogo de 10 kilómetros. Un día soleado en la región de Liguria que suponía el inicio de la preparación para el Tour, el gran objetivo de Miguel Indurain. Aún no montaba en Espada. Aún pedaleaba a un ritmo endiablado en un locomotora llamada bicicleta que, si no llega a ser por el fallo de un cambio, le hubiese conducido a vestirse de rosa por primera vez. Tan sólo tres segundos le separaron del especialista en prólogos de la época, Thierry Marie.

                      No obstante, aquel era un Giro para valientes y la Maglia suele premiar a los que arriesgan. Entonces no existía el ciclismo de último kilómetro que hoy vivimos. Sólo había ciclistas, sufrimiento, asfalto y ambición. Ahí, a pesar de su carácter bonachón, el navarro era el mejor. Por eso, sólo dos días después, en un pequeño puerto conocido como Foce di Scopetone, 'El diablo', Chiapucci para los amigos, lanzó un ataque demoledor que únicamente pudo seguir Indurain y Giorgio Furlán. Los favoritos acabaron entrando todos juntos, pero Marie quedó lejos, la maglia se ceñía al cuerpo del campeón navarro. El rosa había encontrado el huésped para hacer la simbiosis perfecta.

                      Ataques por doquier

                      La contrarreloj del día siguiente no hizo más que confirmar lo evidente hasta el momento, Miguel Indurain era el más fuerte. En 34 kilómetros de lucha contra el crono entre Arezzo y Sansepolcro, endosó a Chiapucci más de un minuto y más de dos a 'Coppino', Franco Chioccioli, el campeón de la anterior edición y a quien el parecido con el gran Fausto Coppi le llevo a poseer ése sobrenombre. Tan sólo su compañero de equipo, Armand de las Cuevas, fue capaz de resistir en pie el primer envite del navarro de Banesto.

                      La superioridad de Indurain empezaba a no gustar demasiado. El Giro tradicionalmente ha sido una carrera de italianos, para italianos; motivo por los que los ataques de los corredores del país transalpino se sucedieron durante muchas etapas. 'Miguelón' era el enemigo a derrotar.

                      El más combativo, porque la rebeldía corría por sus venas, fue Chiapucci. No obstante, sería otro transalpino, Roberto Conti, quien se lo puso muy difícil en 'Il Duce' Terminillo.

                      El ataque que lanzó el corredor del Ariostea, hizo que Indurain tuviese que desgastarse y tomar las riendas de la carrera, para dar al traste con la escapada en el último kilómetro de la ascensión. Ahí, otro grande, el colombiano 'Lucho' González, aprovechó para hacerse con la victoria. El mayor perjudicado de lo sucedido en la novena etapa fue Coppino, que perdió más de tres minutos. Eso sí, la gallardía, el coraje y la dignidad de Chioccioli, le hizo recuperar casi todo el tiempo en un furibundo ataque camino de Ímola.

                      Pero lo más interesante, la prueba definitiva, se encontraba a la espera, agazapada en la legendarias y escarpadas rampas de los míticos Dolomitas. La duodécima etapa fue un día difícil para los ciclistas, de esos que la lluvia y el frío se meten hasta el tuétano y te pueden hacer perder una minutada. Un día, cuya meta estaba en Alta Badía y cuyo último escollo era el Passo di Campagnolo. Peligroso el ascenso, pero aún más el descenso. Chiapucci y Giovannetti ven en el asfalto mojado la gran ocasión para sacarle tiempo, por fin, a Miguel Indurain. Lo consiguieron...aunque sólo hasta que llegó el llano.

                      Indurain demostró su carácter, la prudencia dejó paso a la ambición, a las ganas de decirles a sus rivales: “no hace falta arriesgar la vida para ganar”. El viento volvía a susurrarle a Miguel que conseguiría alcanzarlos y darles una lección que aprender. Y lo hizo. Les atrapó y les superó esprintando en la línea de meta. El botín: 4 segundos de bonificación más sobre 'Il diavolo'. El aprendizaje, demoledor: “No podréis conmigo”.

                      Hermes reencarnado en Indurain

                      Los dolomitas no otorgaron muchas más oportunidades a los grandes rivales de Miguel Indurain en aquella edición, Chiapucci y Chioccioli, más por la fortaleza del navarro que por el escapado terreno, por lo que la contrarreloj de 66 kilómetros de la última etapa que llevaba a Milán, se convirtió en un mero trámite.

                      Ahora bien, un trámite que estará en los anales de la historia del ciclismo. 'Miguelón' se vestía de Hermes. Con sus zapatos alados asidos a los pedales de su bicicleta, dobló a Chiapucci, quien había salido tres minutos antes. La fortaleza del navarro, de Miguel I de Italia, era impresionante. Sólo al alcance de quienes se saben poseedores de una plaza en el Olimpo ciclista.

                      Después de eso, se bajó de la bici, atendió a los medios con toda la paciencia que le caracterizaba y cumplió, como dijo Javier Ares “el sueño de la mayoría de los españoles. Tener a un ciclista de nuestro país coronado de rosa en el podio de Milán”

                      Aquel niño de 10 años todavía recuerda, como si fuera ayer, el 14 de junio de 1992, cuando Miguel Indurain se coronó Rey de Italia. La Corsa Rosa, ya no esperaba que un español llegase a lo más alto. 'Miguelón', lo había logrado.





                      El Giro, Indurain y el susurro del viento | VAVEL.com
                      Editado por última vez por Séneca; https://www.betisweb.com/foro/member/9682-s%C3%A9neca en 16/06/12, 17:06:34.

                      Comentario


                      • #71
                        A mi lo que nunca se me olvidara nunca es cuando Amstrong se pasa de frenada en una curva, o esquiva una caida q no recuerdo bien el motivo, en un descenso y atraviesa a campo a traves entre 50-100 metros para luego incorporarse luego a la calzada.
                        Que suerte tuvo el ****** xD ni pinchazo, ni caida ni na de na xDD

                        Comentario


                        • #72
                          Re: Momentos épicos del ciclismo

                          Originalmente publicado por lobezno8 Ver Mensaje
                          A mi lo que nunca se me olvidara nunca es cuando Amstrong se pasa de frenada en una curva, o esquiva una caida q no recuerdo bien el motivo, en un descenso y atraviesa a campo a traves entre 50-100 metros para luego incorporarse luego a la calzada.
                          Que suerte tuvo el ****** xD ni pinchazo, ni caida ni na de na xDD

                          Comentario


                          • #73
                            Re: Momentos épicos del ciclismo

                            Esta tampoco estuvo mal...

                            Comentario


                            • #74
                              Re: Momentos épicos del ciclismo

                              Este es el más épico de todos.

                              Pero campeones son todos. Sin diferenciación en ninguno de ellos.
                              Editado por última vez por Le0; https://www.betisweb.com/foro/member/1176-le0 en 18/06/12, 17:52:55.

                              Comentario


                              • #75
                                Re: Momentos épicos del ciclismo

                                Juanjo Méndez tiene 48 años, pero en agosto cumplirá 20, porque durante ese mes, en 1992, justo después de los Juegos Olímpicos de Barcelona, volvió a nacer. Un accidente de moto le tuvo al borde de la muerte. Más del otro lado que de éste.

                                "Me dieron por muerto", explica. "Me habían tapado ya con una manta cuando un Guardia Civil se dio cuenta de que me movía. Dio la voz de alarma y de inmediato me subieron a una camilla para llevarme al hospital. Tuvieron que bajar a mi hemano de la camilla, porque iba en la moto conmigo aunque no tenía nada serio, para llevarme a mí". Tenía 28 años.

                                En el Hospital Taulí de Sabadell obraron el milagro. "Llegué clínicamente muerto", sigue explicando Méndez, "pero gracias al doctor Ramón Gisbert, que estuvo más de media hora realizándome masaje cardíaco, estoy aquí. El brazo me lo arranqué de cuajo en el accidente, pero la pierna me la tuvieron que amputar, por encima de la rodilla, en el hospital".

                                Juanjo ha conseguido superar la historia, los miedos y los traumas, pero sólo él sabe lo que pasó: "Me tuvieron tres semanas en coma artificial, para que pudiera superar los dolores". Cuando despertó, apenas era consciente de lo que había sucedido. "Mi mujer me tuvo que decir lo que había pasado y cómo había quedado mi cuerpo. Como estaba con morfina, lo acepté bastante bien. Recuerdo que estuve viendo los Juegos Paralímpicos en la televisión del hospital. Flipaba viéndoles".

                                Entonces no pensaba que algún día él podía ser uno de los protagonistas de los Juegos Paralímpicos: "El accidente me cambió la vida y, aunque intentaba moverme, engordé un montón y llegué a pesar 100 kg. Hasta que un día dije: 'tengo que salir adelante, tengo ganas de vivir, una gran familia y muy buenos amigos'. Uno de ellos, Bernard Moreno, que hoy es mi preparador, me convenció para probar con la bici. Al principio fue un calvario", recuerda.

                                Su primera experiencia fue en el velódromo de Horta. "Necesitaba ayuda para subirme a la bici y al principio a pie iba más rápido que dando pedales". Sólo habían pasado dos años del accidente. "En 1997 corrí un Campeonato de España y me animé, aunque todavía estaba gordito. Pero lo que me picó de verdad fue el Mundial que disputé aquel mismo año en Colorado. Había mucho nivel y me dieron una paliza de las buenas, pero me vino muy bien porque me cargaron las pilas".

                                Aunque siempre con su inseparable Bernard al lado, ahora ya no necesita ayuda para subirse a la bici. "Es como montar en un patinete", dice con toda la naturalidad del mundo. Por eso, disfruta como nadie enseñando el 'oficio' a los que vienen por detrás: "Ayudar a otros me ayuda mucho, porque el día a día es muy duro".

                                Su pasión ha hecho que, incluso, haya fundado un club, Genesis Cycling Team, en el que "hay minusválidos y gente normal. Es el primer club integrado", dice con orgullo, aunque su debilidad son los 19 minusválidos que aprenden a desolvolverse con la bicicleta allí. "Conseguir que un niño, al que le falta una pierna, aprenda a montar en bici es lo más grande", explica.

                                Su debilidad, sin embargo, es Raquel Acinas, una chica que sigue sus pasos. "Tiene 33 años y también le falta una pierna. Ayudarle a ella me ayuda a mí, porque me siento útil. Es la mejor terapia".

                                Veinte años después del accidente, casi se podría decir que fue una bendición. "No sé si tanto", responde Juanjo con ironía, "pero es verdad que no hubiera podido hacer todo esto: conocer tanta gente, conocer medio mundo... y montar en bicicleta con sólo un brazo y una pierna". Pero, lógicamente, sigue sin ser fácil: "A veces me duelen los miembros que no tengo", comenta. "Es lo que se llama el miembro fantasma. No lo tenemos, pero nos duele. El brazo, por ejemplo, me duele con cierta frecuencia. Incluso lo muevo. La pierna que me falta, también, pero como para caminar llevo prótesis ortopédica, algo menos. Pero en ocasiones me duele la rodilla y el tobillo que no tengo". ¡Increíble!.

                                Deportivamente, Juanjo tiene el grado de discapacidad máximo, de ahí que corra en la categoría C 1. "Soy de los más afectados de mi categoría y en cierto modo corro en inferioridad, porque si ves una foto de un podio, por ejemplo, ves que los demás están enteros, aunque pueden tener parálisis cerebrales, pero no me quejo y sé que es imposible hacer 50 categorías. Yo salgo siempre a ganar, para pasear me quedo en casa", dice expresando su filosofía deportiva.

                                Su problema son los ataques de los rivales: "Como no me puedo poner de pie sobre la bicicleta por motivos obvios, cuando arrancan no puedo seguirles. En persecución en pista, por ejemplo, en la arrancada me sacan seis segundos; luego tengo poco a poco que recuperarlos", cosa que muchas veces consigue porque en 2011 fue campeón del Mundo de persecución individual en el velódromo de Montichiari (Italia).

                                Con estos antecedentes, Juanjo aspira a una medalla en los Juegos Paralímpicos de Londres: "He cumplido casi todas mis ilusiones, pero un oro en Londres sería el colmo. Hay un alemán y un inglés que sé que me lo van a poner muy difícil, pero creo que también ellos me tienen mucho respeto. Seguramente estarán este fin de semana en Segovia", en la prueba de la Copa del Mundo, luego el duelo se presenta emocionante.

                                Por él, desde luego, no va a quedar: "Como necesito entrenar más que los demás", más que los que están 'enteros', "por las mañanas, normalmente, me entreno en carretera y por las tardes o voy al velódromo o hago pesas y natación". Muchos profesionales, de todo tipo de deportes, deberían tomar ejemplo. Y todo para llegar a fin de mes a duras penas: "Vivo de una pequeña pensión que me quedó y de la beca ADO", de poco más de 20.000 euros. "Pero no me quejo. Al contrario, soy un privilegiado", que, además de campeón del Mundo de pista el año pasado, fue plata en los Juegos Paralímpicos de Atenas y bronce en Pekín. "Medallas en los Mundiales tengo muchas, pero no llevo la cuenta".

                                Juanjo fue monaguillo antes que fraile, porque antes de sufrir el accidente, había sido ciclista amateur. "Empecé a correr a los 14 años", explica. "Luego, como amateur, corrí en el equipo de Sisquillo. Coincidí con Del Pino y Montoya", recuerda. "Era un gregario", añade con humildad. Pero consiguió formar parte del Cesadén, una de las mejores canteras que tuvo el ciclismo español en los 80. "Mauri, Miguel Ángel Martínez y los hermanos Gonzalo eran mis compañeros. Era un equipazo, pero era de los que tiraba del carro".

                                Méndez a punto estuvo de dar el salto al profesionalismo con el CR, pero no tuvo suerte. "Al final lo dejé todo y me puse a trabajar como transportista, con un furgoneta". ¿Para quién? "Para una ortopedia". El accidente, años después, cambió su vida.

                                [center][/center]
                                Editado por última vez por Le0; https://www.betisweb.com/foro/member/1176-le0 en 18/06/12, 17:51:25.

                                Comentario

                                Adaptable footer

                                Colapsar
                                Espere un momento...
                                X