En Italia ya saben que si bajan el nivel competitivo de sus equipos en Europa, se pierde una plaza para jugar la Champions League, con todas las consecuencias económicas que esto conlleva.
Italia ha servido de claro ejemplo para los dirigentes del fútbol español que, viendo el poco nivel de la competición española, temen por la futura pérdida de ese puesto en la máxima competición del continente.
Como no van a arreglar la equiparación del dinero de las televisiones, han buscado una alternativa más manejable, a mi entender.
La alternativa es que los equipos que tienen cierto nivel y prestigio sean los que jueguen habitualmente la Champions. Ahora mismo, en España, son Atlético, Valencia, Málaga y Sevilla, toda vez que el Villarreal ha sufrido un accidente y el Athletic (a quien considero con un nivelazo de plantilla) tiene problemas internos. Teniendo en cuenta que el Málaga está sancionado, sólo queda que Atlético, Valencia y Sevilla estén arriba para representar a España y se puedan colar, al menos en los octavos de final de la Liga de Campeones (el resto de puntos los logran Madrid y Barça llegando siempre a semis, como mínimo).
¿Cómo se hace eso? Arbitrajes que te crió. El Atlético lleva toda la temporada con buenísimos arbitrajes para sus intereses, el Sevilla lleva años (desde que Del Nido se ha estado encargando de las labores legales de Villar) y el Valencia, que sólo llora contra el R. Madrid.
Y eso es lo que hay, ni Betis ni R. Sociedad y, ni mucho menos, Rayo, Getafe o Levante iban a llegar siquiera a la fase de grupos, con lo cuál, que coja la Liga Europa quien esté más en forma.