El vestuario del FC Barcelona se fractura
El partido ante el Celta de Vigo ha evidenciado que la relación entre el cuerpo técnico del FC Barcelona y los integrantes del primer equipo no es la más adecuada. Los futbolistas no están en absoluto conformes con la forma de proceder del preparador cántabro Quique Setién y de su principal ayudante, Éder Sarabia.
"Para algo están los entrenadores, para analizar esa clase de situaciones. Nosotros lo damos todo dentro del capo y te queda la sensación de que fuera de casa estamos perdiendo muchos puntos importantes que no perdíamos otras temporadas". Al término del último choque de Liga, saldado con un empate a dos tantos ante el Celta de Vigo, el delantero uruguayo Luis Suárez señaló al actual técnico del FC Barcelona, el cántabro Quique Setién, como uno de los principales responsables de la delicada situación que atraviesa el equipo.
Las palabras del sudamericano fueron solo una pequeña muestra de la tensión que se vive en el seno del vestuario. En el mismo choque, en una de las pausas de hidratación, el segundo técnico culé, Éder Sarabia, trató de dirigirse en un par de ocasiones a Leo Messi para hacerle algún tipo de indicación técnica, pero el argentino le esquivó sin ningún tipo de rubor, dando a entender que no estaba en absoluto interesado en lo que pudiera decirle.
Divorcio total: Messi ignora a Eder Sarabia en una pausa de hidratación https://t.co/n7TMq4rF2H Vía #ElPartidazoDeMovistar
— MARCA (@marca) June 28, 2020
Por si fuera poco, al término del choque, cuerpo técnico y jugadores mantuvieron una agria discusión en el vestuario. Según cuenta Marca, los futbolistas recriminaron al preparador algunas de sus decisiones tácticas y cuestionarios los cambios realizados durante el choque. "La discusión fue muy tensa, según algunas fuentes, y viene a demostrar que no hay ninguna sintonía entre los dos colectivos", asegura el rotativo.
Aunque aún se encuentra a dos puntos de liderato a falta de seis jornadas por disputarse, no parece que el clima actual sea el más idóneo para que la entidad barcelonista mantenga el pulso con un Real Madrid que ha regresado del parón en plena forma. En principio, la continuidad de Setién hasta el final de curso parece garantizada, pero si la cuerda sigue tensándose no sería descartable un nuevo cambio de entrenador.
- Por Juan C. Navarro
- Publicado el 29/06/2020 09:51 - Actualizado a las 09:58
El partido ante el Celta de Vigo ha evidenciado que la relación entre el cuerpo técnico del FC Barcelona y los integrantes del primer equipo no es la más adecuada. Los futbolistas no están en absoluto conformes con la forma de proceder del preparador cántabro Quique Setién y de su principal ayudante, Éder Sarabia.
"Para algo están los entrenadores, para analizar esa clase de situaciones. Nosotros lo damos todo dentro del capo y te queda la sensación de que fuera de casa estamos perdiendo muchos puntos importantes que no perdíamos otras temporadas". Al término del último choque de Liga, saldado con un empate a dos tantos ante el Celta de Vigo, el delantero uruguayo Luis Suárez señaló al actual técnico del FC Barcelona, el cántabro Quique Setién, como uno de los principales responsables de la delicada situación que atraviesa el equipo.
Las palabras del sudamericano fueron solo una pequeña muestra de la tensión que se vive en el seno del vestuario. En el mismo choque, en una de las pausas de hidratación, el segundo técnico culé, Éder Sarabia, trató de dirigirse en un par de ocasiones a Leo Messi para hacerle algún tipo de indicación técnica, pero el argentino le esquivó sin ningún tipo de rubor, dando a entender que no estaba en absoluto interesado en lo que pudiera decirle.
Divorcio total: Messi ignora a Eder Sarabia en una pausa de hidratación https://t.co/n7TMq4rF2H Vía #ElPartidazoDeMovistar
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Por si fuera poco, al término del choque, cuerpo técnico y jugadores mantuvieron una agria discusión en el vestuario. Según cuenta Marca, los futbolistas recriminaron al preparador algunas de sus decisiones tácticas y cuestionarios los cambios realizados durante el choque. "La discusión fue muy tensa, según algunas fuentes, y viene a demostrar que no hay ninguna sintonía entre los dos colectivos", asegura el rotativo.
Aunque aún se encuentra a dos puntos de liderato a falta de seis jornadas por disputarse, no parece que el clima actual sea el más idóneo para que la entidad barcelonista mantenga el pulso con un Real Madrid que ha regresado del parón en plena forma. En principio, la continuidad de Setién hasta el final de curso parece garantizada, pero si la cuerda sigue tensándose no sería descartable un nuevo cambio de entrenador.
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