Un poco alarmista,dirán algunos.Puede.Pero la realidad es la que es.

Se renuncia al mejor entrenador al que podemos optar de cuantos quedan en mercado por lo mismo que renunciamos al mejor entrenador de nuestra Centenaria historia.Bueno,renunciamos no,renunció el indigno.Por la negativa a formar un equipo digno de la mejor afición del mundo,esa por la que dice estar muriendo...etcétera.

Que quiero decir?Muy simple.El mensaje es claro para el que quiera entrenar.Aquí se hace lo que diga el indigno,y si saca la patita del tiesto,se le enseña la puerta de salida.Y el numerito para el entrenador de turno,venir con los pantalones por las rodillas a un equipo que lleva dos años librándose de bajar por los pelos,es digno de...¿elogio?

Otra temporada igual.Otro entrenador buscando un retiro de oro.Otra vez la misma plantilla mediocre y acomodada.Y otro año pasando unas fatigas que no nos merecemos por culpa del de siempre.Sólo cambia una cosa.Los carnets.Y por supuesto,subiendo,cosa lógica,ya que nos garantizan emoción hasta la última jornada.

P.D.: sabiendo que es prácticamente imposible que lo lea,o que se lo comuniquen,pero aún así,darle las gracias y mi enhorabuena al Señor (con mayúsculas) Marcelino García Toral,primero por demostrar una hombría y una dignidad rara vez vista en un mundo como el del fútbol,segundo por dejar en evidencia (una vez más) al ¿sr? Lopera,y a su único amor reconocible.El dinero.Ojalá se cruce en el futuro en nuestro camino...cosa que veo dificil,porque apunta a grande.Muchas gracias,Marcelino.