Betis: La plantilla bética se revaloriza en Primera
El juez de lo Mercantil 1 de Sevilla, Eduardo Gómez, ha dictado una resolución autorizando que la Liga de Fútbol Profesional (LFP) trabaje como experto independiente para los administradores concursales y haga una tasación de los jugadores del Real Betis Balompié con el fin de conocer su valor de mercado una vez que el club verdiblanco ha ascendido a Primera división. El valor contable de los jugadores —precio de adquisición menos las amortizaciones— no superaba en diciembre pasado los 23,8 millones de euros, cantidad que no incluía el valor de los jugadores de la cantera, como se puede leer en ABC de Sevilla.
La resolución se produce después de que los administradores concursales del Betis —Gerardo Narbona, Francisco Tato y Antonio Jesús González— enviaran un escrito al Juzgado Mercantil recordando que los derechos federativos del club son un activo que debe ser valorado a precio de mercado. Un aumento de su valor facilitaría al club llegar a un convenio con sus acreedores y salir así de la situación concursal actual.
Asimismo, los administradores concursales han encargado a Tinsa que valore la marca Betis como activo «intangible» del Betis, además de otros inmuebles, como el estadio Benito Villamarín, según han podido saber ABC.
Las cuentas de la temporada 2009-2010 del club reconocían deudas a largo y corto plazo por 66 millones de euros. El vicepresidente del Real Betis Balompié y administrador judicial del club, José Antonio Bosch Valero, cree que las deudas podrían alcanzar finalmente los 85 millones. La verdadera situación económica del Betis se conocerá cuando los administradores concursales presenten en las próximas semanas un informe con el balance actual. Para fijar el valor de sus activos, los administradores concursales necesitan que un experto profesional, como la Liga de Fútbol Profesional, haga una valoración de los jugadores del club, incluyendo a los de la cantera, y que Tinsa valore la marca y el estadio.
A principios de 2011 se planteó la posibilidad de que las deudas del Betis podrían impedir su ascenso a Primera división, ya que el Reglamento de la Federación Española de Fútbol estipula que las sociedades deportivas que tengan deudas con sus jugadores u otros clubes no pueden ascender, aunque se lo hayan ganado en el terreno de juego. Numerosos juristas consultados por ABC señalaron que la Ley Concursal —a la que ahora está sometido el Betis— impide la aplicación de la legislación deportiva, al tiempo que niegan que el Reglamento de la Federación tenga categoría de legislación deportiva. El Consejo de Gobierno tramita la reforma de la Ley Concursal para que las entidades deportivas que estén en concurso de acreedoras no estén exentas del cumplimiento de la legislación deportiva. «Pero hasta que se apruebe esa reforma —dicen los abogados consultados— la Ley Concursal está por encima del reglamento deportivo».
En esa línea, el magistrado de lo Mercantil Eduardo Gómez López ya dictó en febrero pasado un auto que anulaba la medida cautelar adoptada por la Real Federación Española de Fútbol de no expedir o renovar licencias de futbolistas o entrenadores al Betis, así como cualquier otra medida prevista en su reglamento general por el incumplimiento de pagos. En el auto, el magistrado ordenaba a la Real Federación de Fútbol que mientras no concluya el concurso de acreedores se abstenga de adoptar cualquier decisión sobre el Real Betis.
Deuda con jugadores
El Betis tenía a finales de 2010 al menos 58,1 millones de euros, de los que 3,2 millones eran deudas con la Liga; 3 millones de euros con clubes deportivos españoles; otros 3 con clubes extranjeros y 6 con una veintena de jugadores por salarios y derechos de imagen. El Reglamento de la Federación de Fútbol dice que los clubes que tengan deudas con futbolistas, técnicos u otros clubes no pueden ascender, pero la Ley Concursal está por encima.
Fuente: alfinaldelapalmera
El juez de lo Mercantil 1 de Sevilla, Eduardo Gómez, ha dictado una resolución autorizando que la Liga de Fútbol Profesional (LFP) trabaje como experto independiente para los administradores concursales y haga una tasación de los jugadores del Real Betis Balompié con el fin de conocer su valor de mercado una vez que el club verdiblanco ha ascendido a Primera división. El valor contable de los jugadores —precio de adquisición menos las amortizaciones— no superaba en diciembre pasado los 23,8 millones de euros, cantidad que no incluía el valor de los jugadores de la cantera, como se puede leer en ABC de Sevilla.
La resolución se produce después de que los administradores concursales del Betis —Gerardo Narbona, Francisco Tato y Antonio Jesús González— enviaran un escrito al Juzgado Mercantil recordando que los derechos federativos del club son un activo que debe ser valorado a precio de mercado. Un aumento de su valor facilitaría al club llegar a un convenio con sus acreedores y salir así de la situación concursal actual.
Asimismo, los administradores concursales han encargado a Tinsa que valore la marca Betis como activo «intangible» del Betis, además de otros inmuebles, como el estadio Benito Villamarín, según han podido saber ABC.
Las cuentas de la temporada 2009-2010 del club reconocían deudas a largo y corto plazo por 66 millones de euros. El vicepresidente del Real Betis Balompié y administrador judicial del club, José Antonio Bosch Valero, cree que las deudas podrían alcanzar finalmente los 85 millones. La verdadera situación económica del Betis se conocerá cuando los administradores concursales presenten en las próximas semanas un informe con el balance actual. Para fijar el valor de sus activos, los administradores concursales necesitan que un experto profesional, como la Liga de Fútbol Profesional, haga una valoración de los jugadores del club, incluyendo a los de la cantera, y que Tinsa valore la marca y el estadio.
A principios de 2011 se planteó la posibilidad de que las deudas del Betis podrían impedir su ascenso a Primera división, ya que el Reglamento de la Federación Española de Fútbol estipula que las sociedades deportivas que tengan deudas con sus jugadores u otros clubes no pueden ascender, aunque se lo hayan ganado en el terreno de juego. Numerosos juristas consultados por ABC señalaron que la Ley Concursal —a la que ahora está sometido el Betis— impide la aplicación de la legislación deportiva, al tiempo que niegan que el Reglamento de la Federación tenga categoría de legislación deportiva. El Consejo de Gobierno tramita la reforma de la Ley Concursal para que las entidades deportivas que estén en concurso de acreedoras no estén exentas del cumplimiento de la legislación deportiva. «Pero hasta que se apruebe esa reforma —dicen los abogados consultados— la Ley Concursal está por encima del reglamento deportivo».
En esa línea, el magistrado de lo Mercantil Eduardo Gómez López ya dictó en febrero pasado un auto que anulaba la medida cautelar adoptada por la Real Federación Española de Fútbol de no expedir o renovar licencias de futbolistas o entrenadores al Betis, así como cualquier otra medida prevista en su reglamento general por el incumplimiento de pagos. En el auto, el magistrado ordenaba a la Real Federación de Fútbol que mientras no concluya el concurso de acreedores se abstenga de adoptar cualquier decisión sobre el Real Betis.
Deuda con jugadores
El Betis tenía a finales de 2010 al menos 58,1 millones de euros, de los que 3,2 millones eran deudas con la Liga; 3 millones de euros con clubes deportivos españoles; otros 3 con clubes extranjeros y 6 con una veintena de jugadores por salarios y derechos de imagen. El Reglamento de la Federación de Fútbol dice que los clubes que tengan deudas con futbolistas, técnicos u otros clubes no pueden ascender, pero la Ley Concursal está por encima.
Fuente: alfinaldelapalmera
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