Lo primero, para dejar un tema delicado al margen. ¿Cómo habéis vivido todo lo de Miki Roqué?
—Es una noticia negativa, pero lo importante es que él se lo ha tomado con mucho ánimo y está convencido de superarlo para volver cuanto antes a jugar. Eso a nosotros también nos transmite confianza y lo único que queremos es ayudarle en lo que podamos.

—Su sustituto será Juan Calahorro...

-Creo que es un buen jugador. Es contundente, muy fuerte y por arriba va bien. Estoy seguro de que se va a acostumbrar rápido a la dinámica del grupo, ya que lleva varias semanas entrenando con nosotros. Seguro que lo hace bien, si tiene la oportunidad de jugar.

—Hablando de usted, ¿pasa por su mejor momento?

—Lo que pasa es que el delantero lo que tiene es el gol. Es verdad que en los últimos cinco partidos llevo cuatro goles, algo que hace parezca el mejor momento, pero creo que en otros momentos de la temporada me he encontrado mejor. Lo que pasa es que no tenía la fortuna de marcar y parece estás peor.

—Pero cuando veía que Rubén y Emana anotaban y usted no...

—Al delantero siempre se le evalúa por los goles, así que todos queremos marcar. Aunque estés haciendo un trabajo bueno, si no entran los goles, siempre sientes que no estás cómodo del todo. Gracias a Dios, ahora están entrando, y lo que quiero es que pueda seguir la racha.

—¿Cómo prefiere jugar? Porque se le ha visto más cómodo sin el tridente.

—Sinceramente, me da igual mientras juegue. Lo que hay que tener claro son las diferentes formas de jugar. Si jugamos Achille, Rubén y yo hay que hacer unas determinadas cosas y si no, otras. Lo importante es tener claro lo que hacer en cada momento.

—Nadie ha sido capaz de explicar los motivos de la mala racha...

—La verdad es que no. Creo que no tiene una explicación clara, han sido muchas cosas. A lo mejor el cansancio de la Copa y un poco de relajación. Lo importante era salir de esa dinámica, que es lo más complicado, y lo hemos hecho en los tres partidos de la semana pasada. Ahora hay que intentar coger otra vez la dinámica de cosechar resultados positivos una semana tras otra.

—¿Hubo nervios o ansiedad?

—En el vestuario estábamos tranquilos en el aspecto de que sabíamos que éramos el mismo equipo que lo había hecho bien en la primera vuelta y éramos líderes. Seguíamos trabajando y entrenando bien, por lo que sabíamos que los resultados iban a llegar, pero siempre cuesta romper esa dinámica.

—Se empezó a hablar del puesto del entrenador, pero los jugadores lo defendieron

—Creo que las declaraciones de todos los jugadores han ido en la misma línea. Hemos transmitido la confianza que teníamos en el míster. Confiábamos cien por cien y sabíamos que podía solucionarlo, porque es el mismo entrenador que había hecho todo el trabajo bueno hasta ahora.

—Ha sabido aislaros de todo lo extradeportivo

—El míster desde el principio, desde la pretemporada, nos insistió en que debíamos ser un grupo fuerte, una piña, y centrarnos sólo en el plano deportivo, porque es en lo único que podemos ayudar nosotros.

—Cambios en la plantilla, varias directivas y presidentes, Ley Consursal... ¿Le había pasado algo así?

—Que se fuera medio equipo y llegara otro nuevo, sí, pero el tema institucional sí que es verdad que nunca había vivido algo así.

—Pero algo afectará

—Sí afecta en algo, pero los jugadores del año pasado han sido un ejemplo, porque a nosotros nos han querido de esa responsabilidad. No nos han querido meter en esos líos, así que no hemos tenido ningún problema. Entre todos hemos intentado ayudar para que saliera adelante.

—¿Están perjudicando los árbitros?

—Creo que si miramos al final, creo que sí han perjudicado. Han sido cinco goles anulados que eran legales. Al final eso son puntos, y en la situación en la que nos encontrábamos, sin ganar partidos, hubieran cambiado todo. Pero tampoco vale la pena pensar más en los árbitros, porque se puede equivocar igual que nosotros, pero hay algunas cosas que son las que cuestan más de entender.

—Pero, ¿hay persecución?

—Creo que persecución, no. No hay nada detrás de las equivocaciones, pero a mí lo que me da más rabia no es que se equivoquen, que son humanos, sino la actitud de prepotencia. No dejan hablar, dicen que mandan ellos y tú te tienes que callar. Hay muchos árbitros que hablan contigo y te dicen lo que ves, algo que te hace comprender que se pueden equivocar. Es la mejor forma, pero hay otros casos en los que no te dan explicaciones, a pesar de ser tan claro como lo del día de la Ponferradina.

—Contento, entonces, por el «neverazo»...

—Creo que habrán visto las imágenes, que eran muy claras.

—Hubo comida con el técnico y la directiva el miércoles. ¿Qué les dijeron?

—Tampoco han cambiado el mensaje. Más que mensaje, era una comida de unidad para que siga el buen ambiente en el grupo y que se traslade a la directiva y al cuerpo técnico.

—Ahora toca enfrentarse al Rayo Vallecano y al Celta.

—Va a ser un mes importante, porque nos vamos a enfrentar a los dos rivales directos. Ojalá podamos tener buenos resultados para poder encarar con más tranquilidad el final de temporada.

—¿No ve con posibilidades a otro equipo?

—Creo que va ser cosa de los tres, porque el Granada parecía que venía en línea más ascendente, pero al final resulta muy complicado. Remontas y remontas, pero luego siempre surge algún problema.

—¿Qué le han parecido las declaraciones de López Garai?

—Ellos que se preocupen de los suyo, que nosotros ya miraremos lo nuestro. Aquí no hemos hablado en ningún momento de los otros equipos, ni del Celta ni del Rayo, y tampoco nos preocupa que hablen de nosotros. Tenemos que estar centrados en lo nuestro y ya está.

¿Al Rayo le puede afectar la Ley Concursal?

—Les puede afectar, porque es una situación complicada, pero también puede ser que les sirva, como a nosotros, para unirse más y pelear.

—Y ustedes, ¿qué le dicen a los afcionados?

—Nuestro mensaje es el mismo. Igual que cuando ganábamos decíamos que quedaba mucho, después de estas cinco derrotas, también queda mucho. Hay que tener tranquilidad, porque nosotros lo vamos a dar todo por subir, que es el objetivo. Por nosotros no va a quedar.

—¿Se pone una cifra de goles?

—No sé, ya en pretemporada dije que no me quería marcar una cifra de goles, así que ahora menos. Mientras más mejor. Más o menos estoy contento. Evidentemente, me gustaría llevar más, pero tampoco me quejo.

—Sáquenos de dudas. ¿Quién tira los penaltis?

—Es según el momento. Estamos los tres, Achile, Rubén y yo, y ahí decidimos. El otro día Achile dijo que lo tiraba, que estaba con confianza.

—Y a ver quién se lo quita...

—Eso (risas), pero no hay ningún problema.

—Hablando de Emana, dice que se va a pintar la cabeza de verdiblanco. ¿Cuál es su promesa?

—No sé, algo haremos, pero espero que sea en conjunto y por el ascenso directo.


“No creo que sea mi mejor momento, pero ahora estoy haciendo goles�



Nos hacen falta tus goles...sigue asi Pichichi