Originalmente publicado por iMisut
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Un señor gasta gran parte del dinero de su familia en máquinas y ruletas.
Un señor que gasta gran parte del dinero de su familia en máquinas y ruletas, no puede darles de comer.
Al señor que gasta gran parte del dinero de su familia en máquinas y ruletas, a la que por ello no puede dar de comer, le recomienda su amigo de ruleta que contrate con el poquísimo dinero que le queda a un administrador para justificar su despilfarro ante la familia.
Y este señor ya ha hecho la misma jugada más de 1 vez.
Problema primigenio y causa de la situación. El señor despilfarrador que sigue gobernando la Familia y la ha dejado hambrienta en varias ocasiones.
Consecuencia y efecto del problema primigenio. El administrador no tiene nada que gestionar.
Así el despilfarrador y su amigo de la ruleta consiguen que la familia se enrede con el administrador e incluso que los secuaces justifiquen ante la familia que el problema es del administrador y que además bastante hace con lo que tiene. Así nos olvidamos de la causa primigenia.
El causante del problema desaparece y la pobreza y el hambre es un mal divino que tiene la familia por causa del destino.
Más viejo que el hilo negro.
Más miserable que quienes venden humo y quieren que la historia real se enfoque desde donde no se debe.
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