No es el más estético, ni en que más calidad tiene. Pero conoce su oficio y lo desempeña de manera notable.
El tipo de jugador que siempre hace falta en un equipo.
Aparte de mejorar al cambiado, ha estimulado a sus compañeros e incluso a la grada, a la que tiene ganada sin ser tribunero (no le vendría mal meterle tribunerismo teniendo el nivel que tiene, por cierto, cuando se tiene un nivel apropiado a la exigencia que hay, ser tribunero suma en mi opinión).
Cuando volvió de la cesión tenía el mismo defecto que tiene ahora Rodri y Luis Henrique, rifaba la pelota con los nervios intentando cumplir. Pero al final la solución más sencilla es la adecuada. No te complicas, jugada fácil y a la siguiente.
Malo como la carne perro, pero el ímpetu, fuerza, dedicación, voluntad y coraje que ofrece hace que sus carencias pasen inadvertidas. Si conectara un poco más con la grada como dice algún compañero más arriba sería un jugador 100% Real Betis.
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