Re: ¿Porqué soy del Betis?
El fútbol es una moneda. Una cara es lo deportivo, lo socio-histórico. Aquello que científicamente se puede cuantificar, ver, probar... Los números, las estadísticas. Las copas en las vitrinas y los trofeos a "mejor equipo del mundo". Galas, jugadores top, dinero... En ese mismo lado está el sistema económico, y como entra en el fútbol para convertir el fútbol en algo que primeramente no lo era.
En el otro lado de la moneda, está aquello que trasvasa la línea del tiempo histórico y que forma parte del "Gran Tiempo". El tiempo de los significados, de los símbolos, de lo irracional e incuantificables. Los sentimientos y las pasiones.
No lo digo yo, lo dice Vicente Verdú en su libro "Fútbol. Mitos, ritos y símbolos". Aunque como aportación, diré que en el Betis, nos quedamos totalmente con una de las caras de la moneda, casi sin opción de ver la otra cara. Y quizás si fuera al revés dejaría de tener la idiosincrasia que tiene, sin esos partidos que se ganan en el minuto 86. Sin esas permanencias que nunca son tranquilas. Sin esos ascensos en la última jornada. Sin ese desfalque de intensidad pasional no sería el Betis. No entiendo al Betis como un equipo de fútbol, para mi es una simple excusa para guardar un sentimiento compartido EN TODO EL MUNDO.
El fútbol es una moneda. Una cara es lo deportivo, lo socio-histórico. Aquello que científicamente se puede cuantificar, ver, probar... Los números, las estadísticas. Las copas en las vitrinas y los trofeos a "mejor equipo del mundo". Galas, jugadores top, dinero... En ese mismo lado está el sistema económico, y como entra en el fútbol para convertir el fútbol en algo que primeramente no lo era.
En el otro lado de la moneda, está aquello que trasvasa la línea del tiempo histórico y que forma parte del "Gran Tiempo". El tiempo de los significados, de los símbolos, de lo irracional e incuantificables. Los sentimientos y las pasiones.
No lo digo yo, lo dice Vicente Verdú en su libro "Fútbol. Mitos, ritos y símbolos". Aunque como aportación, diré que en el Betis, nos quedamos totalmente con una de las caras de la moneda, casi sin opción de ver la otra cara. Y quizás si fuera al revés dejaría de tener la idiosincrasia que tiene, sin esos partidos que se ganan en el minuto 86. Sin esas permanencias que nunca son tranquilas. Sin esos ascensos en la última jornada. Sin ese desfalque de intensidad pasional no sería el Betis. No entiendo al Betis como un equipo de fútbol, para mi es una simple excusa para guardar un sentimiento compartido EN TODO EL MUNDO.
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