Ya dijo Manuel Pellegrini que el Betis no iba a ofrecer novedades en el próximo mercado de fichajes de enero pero eso no quiere decir que el club esté quieto. Algunos jugadores de la plantilla tienen una situación difícil por bajo rendimiento o por falta de minutos y uno de ellos es Borja Iglesias, quien ha perdido gran parte de su valor de mercado. En el club han arropado al gallego para que recuperara su mejor versión pero dada la falta de evolución y las necesidades económicas de la entidad se plantea una cesión para el atacante con el objeto de que goce de la confianza que ahora no muestra de verdiblanco.

Y es que Borja Iglesias ha hecho goles con regularidad en todos los clubes en los que ha estado menos en el Betis. Después de abonar 28 millones de euros en dos pagos al Espanyol, la apuesta del Betis por Borja Iglesias ha sido un rotundo fracaso. El futbolista no es ni la sombra de lo que fue en el Zaragoza y en el club catalán, cuando apuntaba a la selección española y era uno de los nueves del momento. Manuel Pellegrini empezó alineando como titular a Borja, que tuvo protagonismo aprovechando la lesión de Sanabria en la pretemporada y que Loren estuvo varias semanas fuera por el Covid-19. Jugó en los triunfos ante el Alavés y el Valladolid pero no marcó. De hecho, para encontrar su último gol oficial con el Betis hay que irse a enero de 2020. En pretemporada sí lo hizo y lo celebró con sus compañeros con fuerza. Esa fortuna no ha tenido recorrido con el inicio del curso.

En estos momentos Borja Iglesias es la tercera opción de Pellegrini para el puesto de nueve, ya que Sanabria es el habitual en los onces y Loren se ha convertido en el primer recambio. El técnico chileno quería mantener en verano a los tres arietes pero dada la delicada situación económica del club y la devaluación de Borja Iglesias la alternativa del préstamo a otro club para que asuma parte de su ficha y el futbolista pueda recuperar sensaciones está ganando enteros en la dirección deportiva bética.

La de Borja Iglesias es una de las fichas más altas de la plantilla, ya que fue contratado a muy elevado precio debido al nivel que estaba mostrando en el Espanyol. El Betis necesita deshacerse de algunos de estos salarios que no puede soportar en una situación económica como la actual, además de percibir ingresos por traspasos antes de que se cierre el balance en junio de 2021. La marcha de Borja busca aliviar una posición sobrecargada y en la que en caso de necesidad se cuenta con la opción de Raúl García de Haro, el delantero centro del Betis Deportivo, del que se espera un gran desarrollo.

Borja Iglesias ha disputado esta temporada 352 minutos repartidos en ocho de los once partidos que ha disputado el Betis. Sólo fue titular en los dos primeros. Se trata de un jugador bien estimado en la plantilla por su compañerismo y personalidad pero que no está encontrando el fútbol que habitualmente ha mostrado. El delantero ha recibido apoyo psicológico profesional para tratar de enfocar su situación y el propio Pellegrini y su cuerpo técnico han tratado de animarle para que recuperara la confianza. Ahora se plantea que en enero pueda salir a préstamo, con o sin opción de compra.

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