SERGIO GARCÍA, UN DRAMA PARA LAS ARCAS
No va a ser fácil desprenderse de Sergio García, un futbolista que no ha rendido ni la mitad de lo que de él sed esperaba y que además está sujeto a un draconiano contrato: el de compraventa con el Zaragoza. Según adelanta hoy La Razón, el internacional costó 10, 4 millones en 2008 y cada año el Betis paga 500.000 euros a su antiguo. El club maño tiene un derecho de tanteo por el futbolista, se le adeudan 6 pagarés y cobrará una plusvalía si el atacante es traspasado. Al margen de los onerosos emolumentos que recibe por temporada, superiores al millón de euro, su incorporación al Betis aún drena las paupérrimas arcas de la entidad. Y no se trata sólo de lo que costó en su momento, 10,4 millones de euros con el IVA incluido, sino de una forma de pago, en forma de pagarés trimestrales, que representan un gigantesco esfuerzo para la precaria economía del Betis. Está recogido en el contrato que el club heliopolitano abonaría el fichaje en 14 pagarés trimestrales cada uno de elllos por valor de 642.00 euros hasta diciembre del año que viene. de hecho, el Betis aún le paga al Zaragoza por Sergio García. Tanto es así, que aún debe afrontar el pago de seis pagarés hasta el año que viene.

Pero no quedan ahí las cláusulas que rigieron la llegada de Sergio al Betis. Lopera abonó a la entidad maña en concepto de "premio adicional" 400.000 euros. ¿Por qué? Porque Sergio García disputó en la temporada del descenso más de 25 partidos con la casaca verdiblanca. El premio ascendió a medio millón de euros durante la temporada pasada. En medio del fracaso que no supuso no lograr retornar a Primera, el Betis pagó por contrato otros 500.000 euros porque Sergio fue alineado en más de 25 encuentros jugando en cada uno de ellos más de 45 minutos. Es más: tan generosa cuantía puede ser desembolsada al final de esta temporada con destino a las arcas del Zaragoza si Sergio permanece esta temporada en el club y también traspasa los partidos fijados en esta especial cláusula de productividad. Esta es una de las razones por las que Luis Oliver trata de desprenderse del delantero catalán. Por si fuera poco, una posible operación de venta estaría también caracterizada por los beneficios colaterales que obtendrá el Zaragoza, ya que se reservaron en su día un derecho de tanteo para "rescatar" a Sergio por el mismo dinero en que se cierre un hipotético el traspaso a un tercero. Por tanto, el Betis debe comunicar al club maño las ofertas por el atacante y el Zaragoza tiene cinco días para decidir si lo compra. Por si acaso el Betis omitiera este deber de información, la mitad de lo ingresado en la operación de venta de Sergio iría a parar, por contrato, a las arcas del Zaragoza. Y aparte del casi millón de euros de demasía que el Zaragoza ha ingresado por las dos temporadas que Sergio García ha militado en el Betis, si sonara la flauta y es traspasado por más de 9 millones de euros, la entidad que preside Agapito Iglesias se embolsaría, en concepto de plusvalía, el 25% del traspaso. De hecho, el Betis tendrá que pagar este mismo porcentaje de los que reciba por una presunta cesión del punta a otro club.

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