"Y ya no puedo más, siempre se repite la misma historia" canta Camilo Sesto... pues así estoy yo. Muchos años de descojone de prensa y aficiones por un cateto orgulloso de lo que malgasta, de lo que malhabla con tantas patadas al diccionario y ese egocentrismo puro y duro del que tanto se jacta nombrándose en tercera persona. Dieciocho años, sí, y los que quedan.

Prometer, prometía mucho, pero cumplir... ¿Qué es eso para tal personaje? Ni en Primera, ni libre ni limpio. Un Real Betis Balompié en Segunda por segundo año consecutivo, muchas excusas, de otros "empresarios" cuyo nivel de chupasangre parece ser similar o mayor y cuyos nombres desconocemos, bueno perdón, Bitton Sport dicen llamarse.

A todo esto, nos asegura que ningún bético ha ido a comprarle las acciones. Pues muy bien, pero resulta que junto con el "Lopera vete ya" que con victimismo nos dice que hemos conseguido iba "Por un Betis libre", ¿nos ha dado la posibilidad de obtenerlo? Porque quitando las ridículas elecciones y demás excentricidades a las que nos tiene acostumbrado, estoy seguro que esta afición habría estado a la altura de las circunstancias, a pesar de no haberlo estado en innumerables ocasiones yéndonos con el rabo entre las piernas ante tantas decepciones y mentiras, llegando al fin principal que busca el beticismo, la libertad de las trece barras.

Pero hoy, ante otro gran día loperiano, todo sigue igual, seguiremos sometidos al verde del dinero, de aquellos que no les importa el Betis si con ello no ganan dinero mientras que miles de almas seguirán a su manera al equipo con un mismo pensamiento, "¿qué será lo próximo?".

No sé qué puedo hacer por el Betis y ya no puedo más.