Ahora no nos falles Betis, no puedes hacerlo, después de conquistar lo que parecía más difícil, de conseguir lo “imposible”, de transformar una quimera en una realidad palpable en menos de un mes, tras colocarte tercero a falta de dos jornadas, ya dependes de ti mismo. Ahora Betis, no puedes fallarnos, cuantas veces a lo largo de tu centenaria historia no has escalado una montaña inaccesible para dar con tus huesos en el suelo en el terreno más liso, más llano, más sencillo. Esta vez no va a pasar, ¿Verdad Betis? Esta vez, a pesar de las dificultades, has ido apoyándote en el hombro, las gargantas y el corazón de todos y cada uno de los béticos que pueblan el Universo. Estabas muerto y a golpe de fe, que es lo que caracteriza al Betis, una fe inquebrantable en dos colores hermosísimos: el verde y el blanco, has ido poniendo un pie por delante del otro, muy poquito a poco, y has ido caminando, cada vez más veloz y más seguro, hasta alcanzar el objetivo que nos parecía tan lejano. Ya estás tercero Betis, y esto no se nos puede escapar. Los penaltis de Tarragona y ante la Real, el postrero gol hecho milagro de Juanma en Huesca, la gran segunda parte del sábado ante el Numancia. Cuatro de cuatro. Quedan dos, reza en la pizarra del vestuario verdiblanco en las entrañas del Villamarín, Quedan dos, un objetivo, un lema, una frase escrita a fuego en los corazones de todos los béticos. El próximo sábado estaremos contigo en Salamanca, a tu lado, como siempre, esta vez Betis, no nos puedes fallar, y sé no vas a hacerlo. Salamanca, que suena en su eco a Burgos, a Jaén engalanada de Verdiblanco, Salamanca, Salamanca y solo Salamanca, una hermosa tierra para volver al lugar de donde el Betis nunca debió salir, la primera división. Vamos Betis, un pasito más, no nos falles ahora.

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