En un partido donde el Betis fue superior a su rival pero no encontraba la manera de generar ocasiones apareció Joaquín, primero oportunista para rematar un rechace del portero rival, y segundo, por puro ímpetu para finalizar un maravilloso pase de Guardado para así colocar al Betis con un seis de seis en el Benito Villamarín. El equipo de Setién coge forma.

Este es el camino a seguir. Siete temporadas después el Betis vuelve a ganar sus dos primeros partidos como local en la liga y lo hace dejando buenas sensaciones que deberán ser contrastadas fuera de Sevilla, el gran lunar de momento de este equipo. Los cimientos para hacer del Villamarín un fortín están puestos y aún la mejor versión, o la versión que todos esperamos ver de este equipo, está bastante lejos.

Hoy el Betis fue bastante superior en cuanto a juego al Deportivo, el cual dejó unas sensaciones paupérrimas en el Villamarín y que basó su futbol en balones largos a Andone y en segundas jugadas con su línea de tres medias puntas. Por su parte el Betis, siguió la línea continuista vista en las jornadas anteriores creciendo en el partido con la acumulación de posesión en el centro del campo y generando futbol ofensivo y ocasiones desde las bandas.

En una de esas posesiones en el centro del campo, moviendo el balón de lado a lado, llegó el primer gol de Joaquín en una gran acción de Tello y uno de los muchos y buenos centros de Barragán. El Betis había encontrado el gol rápido, estaba siendo bastante superior y pareció relajarse.

El Deportivo comenzó a encontrar su línea de tres a la espalda de Javi García y empezó a situarse en campo contrario con bastante facilidad. Y pese al poco peligro ofensivo en la única ocasión del Deportivo clara del partido, primero con un lanzamiento al travesaño y luego, tras un mala gestión del rechace de Javi García y Narváez, el Deportivo encontró el empate.

Tras el gol, el Betis encadenó sus peores minutos del partido con muchas dudas en faceta ofensiva dejando numerosas pérdidas y fue solo en los minutos finales de la primera mitad donde pareció dar una marcha más. Por su parte el Deportivo, volvió a replegarse para buscar una contra que definiera el partido.

Ya en la segunda mitad, el Betis mejoró, y seguramente, sumó su mejor tramo de juego en la temporada con posesiones largas, rápidas y con muchísimo sentido liderado por un Guardado que empezó a sumar galones y mejoró muchísimo más con la salida de Camarasa al campo.

El Betis generaba, llegaba pero no materializaba ninguna ocasión clara. Y Mientras era el Deportivo en las contras quien llegaba con más peligro. Cada balón perdido en posesión era un drama mayúsculo para el Betis al que le costaba replegar pero la contundencia de la pareja de centrales paró lo que podría haber resultado definitivo.

Pero el Betis comenzó a hacerse fuerte con ataques posicionales que hicieron que todo el equipo se metiera el campo rival para así, cada vez robar más cerca del área rival y generar más acciones ofensivas. El Betis sumó minutos de calidad en la segunda mitad. Y cuando ya los espectadores del Villamarín miraban el videomarcador nerviosos por la cercanía del final del partido, Guardado apareció para robar, liderar un contrataque y meter uno de los pases de la jornada para que Joaquín, el héroe de la tarde, marcase el gol que daría la segunda victoria de la temporada del Betis