La medicina de Iriney se llama testosterona
"No valen excusas, sólo echarle coj-ones", receta el brasileño, quien admite que la culpa de la situación es de los futbolistas

Javier Mérida / SEVILLA | Actualizado 19.10.2009 - 08:55

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Terapia ante la crisis
16 comentarios7 votosEs uno de los pocos que se está salvando de la crítica generalizada. Iriney Santos da Silva, en una trayectoria divergente a la del equipo, va cada día a más. El centrocampista brasileño demuestra partido a partido su oficio, su espíritu de lucha y el deseo ferviente de que el Betis salga de la crisis de juego y resultados en que se encuentra inmerso.

Ha llegado hace unos meses. Es nuevo en esta plaza y, por ello, corre el peligro de muchos otros que intentaron, con cierto liderazgo y sin éxito, cambiar el espíritu competitivo del vestuario. Se aburrieron o se aburguesaron.

Iriney, de momento, cree en el equipo. Habla siempre en primera persona, porque aunque él se pudiese excluir de muchos de los comentarios que realiza, no lo hace. "Las sensaciones son muy malas, pero debemos saber apretar los dientes antes que quedarnos atrás. Esto acaba de comenzar, nada es decisivo todavía, pero no podemos seguir distraídos. La prueba de cómo es esta categoría la tenemos en este último partido, ya que hasta el último puede hacerle daño al candidato si se despista", argumenta el amazonense.

El mediocampista verdiblanco, que el domingo vio cómo Tapia le cambiaba la pareja de baile y situaba a su lado a Sunny en lugar de Juande, tiene muy clara cuál es la receta para salir del atolladero. "No conozco otra forma que con el trabajo. El equipo debe formar una piña, unirse como nunca y salga a jugar quien salga, dar la cara. No hay excusas en esta categoría, sólo hay que echarle *******", sentencia.

En absoluto mira Iriney al banquillo. Confía ciegamente en los conocimientos de Antonio Tapia y sí es verdad que le cuesta explicar por qué el Betis no sabe defender ni atacar, como si no tuviese un plan de qué va a hacer cuando salta al terreno de juego. "Nuestro comandante nos da toda la libertad del mundo. Somos nosotros, los futbolistas, los que tenemos que apretar. Y jugar listos y concentrados. Los jugadores somos los culpables de lo que ocurre dentro del campo. Las cosas están muy claras, no hay que mirar hacia otro lado y si queremos estar arriba, tenemos que apretar más", afirma con vehemencia.

En un pequeño análisis táctico se advierte que al Betis le cuesta un mundo robar el balón y que, debido a ello, comete numerosas faltas en zonas que podrían denominarse de seguridad. El problema se agrava porque cuenta con un guardameta que rara vez abandona los palos y con futbolistas poco dotados para defender las jugadas de estrategia "Sí, es verdad que cometemos demasiadas faltas, pero también veo otras cosas en el campo con las que no estoy de acuerdo. Aunque son pequeños detalles del funcionamiento del equipo y estoy seguro de que vamos a ser capaces de arreglarlos", comenta de modo un tanto enigmático, ya que no quiere revelar cuáles son esos aspectos del juego.

El aspecto anímico también es de suma importancia. Tres empates y una derrota como la de Castellón hunden a cualquiera y los rostros de los futbolistas al abandonar Castalia eran fiel reflejo del abatimiento y la impotencia que sufrían. "Hundidos no estamos. Esto acaba de comenzar y sí es verdad es que se nos nota aún la sensación de la derrota, pero tenemos que ser fuertes de mente y positivos en todo momento, porque la Liga, y más en esta categoría, es muy larga", apostilla el futbolista brasileño.

Fuente: http://www.diariodesevilla.es/articl...tosterona.html


Por fín alguien que habla con dos dedos de frente. ÉSTA SÍ ES UNA FORMA NEUTRA DE ANALIZAR LA SITUACIÓN, APRENDE TAPIA.