Pues muy sencillo, porque este tio no ha puesto ni un ****** duro en efectivo ni de ningún modo en la compra del 51% del capital accionarial y sabe perfectamente que si coge algún dinero por la venta de sus acciones, el que entre, cuando tire de la manta, descubrirá que este ********* se había apropiado del Betis con la presentación de un aval por importe de 700 millones de pesetas y que correspondian 450 de ellos a los que habiamos puesto los béticos de a pie, ante lo cual y viendo aparte el cúmulo de irregularidades contables y de ingeniería financiera que habrá hecho en 17 años semejante elemento, lo más probable es que fuese denunciado por estafa y apropiación indebida y lo metieran en el trullo.
Por tanto, la encrucijada de este timador profesional es terrible, ya que de buena gana se iría, pero debido a estos condicionamientos, está condenado a hacer encajes de bolillos(pantomimas incluidas), para ganar tiempo y que lleguen mejores momentos de bonanza deportiva para que se olviden de su persona y que prescriban todos los delitos que solo él sabe, habrá cometido.
¿ No pensáis lo mismo vosotros?