Desde aquí, antes que nada, quiero pedir perdón a todos aquellos béticos, todas esas personas que lo venían anunciando...que esto se veía venir...que o actuábamos o nos íbamos al infierno...

Y quiero pedir perdón porque yo, hasta ayer a las 20:45, era uno de esos béticos de los que van al campo del Betis a animar y ver el partido, pero que después, acabasen como acabasen las cosas, seguía con mi vida. Jamás he participado en un acto de reivindicación, ni manifestación, ni ningún otro acto que luche para mejorar el Betis actual.

Yo siempre decía "Bah, que lo hagan otros....ya mejorarán las cosas".
Quiero pedir perdón por todo ello, por haber estado ciego. Porque en mi corta experiencia bética (tengo 20 años, pero mi consciencia y memoria bética no se remonta más ayá del último ascenso en Jaen) ayer fue la primera vez que derramé lágrimas por el Betis, por algo que hasta ahora había considerado como un deporte y un entretenimiento más, lágrimas de impotencia y de culpa, porque yo me siento parte de la causa por la que el Betis está así.

Jamás me habría imaginado que pudiera llegar a llorar por el Betis, siempre he pensado que el fútbol es un deporte y debe tomarse como un hobby y nada más, hay muchas cosas más importantes en la vida. Pero ha sido necesario vivir un descenso en casa para yo darme cuenta de que el Betis es algo mucho más grande, pues no soy muy de derramar lágrimas así porque sí.

Asi que a todos aquellos béticos que lo venían avisando, los que ya sabía que esto ocurriría, repito: Lo siento.
No volveré a cometer el mismo error, ahora sé que el Betis no es un hobby más, y que el Betis realmente me duele. Ojalá me hubiera dado cuenta mucho antes, me tomo el descenso como un castigo y una cura de humildad.

Un saludo.....bueno, mejor dicho, UN ABRAZO para todos/as en estos momentos tan duros.