[CENTER]No lo se… Si, creo que es como mejor defino mi estado desde hace casi una semana. Preguntadme como estoy, hacedlo, porque no podré contestar otra cosa que: “no lo se”.
Sinceramente tengo un cruce de sentimientos, de pensamientos, de corazonadas… Mal hecho “forever”, mal hecho, uno con el Betis no puede guiarse de pensamientos racionales, ¿si de sentimientos? Quizás tampoco, pero no soy capaz de hacer otra cosa…
Esta semana me ha valido para pensar, hasta donde mi mente llega a base de recuerdos. Recuerdo, lo que sentí la primera vez que pude ver mi carnet de socia de mi Betis. Jamás podré olvidar el momento en el que de pie en el salón, ante mi padre, y la mirada de mi madre, éste saco un carnet y me lo puso delante: “Mira lo que traigo…”. Y recuerdo mucho mejor lo que sentí por dentro… algo especial, algo diferente, el mejor regalo jamás hecho. Necesitaba estar con mi Betis…
También recuerdo cada conversación con aquellos que me achacaban (y achacan) que como una mujer en el fútbol, que como una mujer así, que como una mujer entre tanto hombre… ¿Y? Mi sentimiento es igual de puro que el de los miles de hombre que me rodean. Necesito estar con mi Betis…
Quizás no quiero recordar los mejores triunfos logrados, me hacen daño imaginarlos, me hacen daño recordar lo feliz que fui, lo feliz que me hicieron… En aquellos momentos, también necesite a mi Betis…
Pero, ¿con qué me quedaría de mis 23 años de beticismo? No sería sin duda con la Copa del Rey, no sería con aquel mágico Mallorca-Betis, no sería con aquel Betis-Liverpool, no sería con ese duro Racing-Betis, no será tampoco con este Betis-Valladolid… Será simplemente con BETIS. Si. De 23 años, yo me quedaría con lo que ese nombre conlleva dentro.
Me quedo con lo que siento por dentro al pasar por su Estadio. Me quedo con lo que siento al ponerme su camiseta. Me quedo con el orgullo que sentía cuando iba a la facultad con mi carpeta repleta de Betis. Me quedo con lo que siento por dentro cuando escucho a mi afición celebrar un gol. Me quedo con los nervios de mi gente bética ante un partido de nuestro Betis.
Me quedo con el pesimismo de mi padre, y las conversaciones que eso origina: “Ojú Rocío, este partido lo perdemos…”, “No papá! Cállate anda, cállate!”, “Queréis callarse los dos?!”, grita siempre al final mi hermano…
Ahora me quedo con el beticismo que derrocha mi novio, a 500 Km: “Nena, me quedo el domingo al fútbol” “Tú estás loco! Vas a llegar a casa a las 4 de la mañana, que curras el lunes!”, “Me da igual, no puedo irme y dejar al Betis con la que nos jugamos… no puedo…”. Eso me llena…
Me quedo con lo que ahora estoy sintiendo al escribir esto…
No se que va a pasar pasado mañana… no lo se. Solo se, que pase lo que pase, yo el lunes me sentiré la bética número 1. Solo se que desde que salga del Estadio, iré orgullosa llevando ese escudo en mi camiseta… como lo he hecho siempre después de una derrota. Que no me importa donde estés Betis, que no me importa… que yo voy a estar siempre contigo. Solo me importa, el daño que te están haciendo, pero la lucha no ha hecho más que empezar, y un día, recuperarás tu esencia.
Sentir, luchar, ganar… ¡Podemos!. Claro que podemos… Podemos luchar por 102 años de historia y por miles de corazones que laten en verde… No nos jugamos un título, no nos jugamos un pase a Liga de Campeones, nos jugamos el descenso, pero para mí será como disputar la final de la Champions… Eres tú Betis, tú, el que me hace pensar así…
Te Quiero Betis, ayer, hoy y siempre…
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[LEFT]PD. Siento el tochito... pero o lo hago, o me corto las venas de los nervios...
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Sinceramente tengo un cruce de sentimientos, de pensamientos, de corazonadas… Mal hecho “forever”, mal hecho, uno con el Betis no puede guiarse de pensamientos racionales, ¿si de sentimientos? Quizás tampoco, pero no soy capaz de hacer otra cosa…
Esta semana me ha valido para pensar, hasta donde mi mente llega a base de recuerdos. Recuerdo, lo que sentí la primera vez que pude ver mi carnet de socia de mi Betis. Jamás podré olvidar el momento en el que de pie en el salón, ante mi padre, y la mirada de mi madre, éste saco un carnet y me lo puso delante: “Mira lo que traigo…”. Y recuerdo mucho mejor lo que sentí por dentro… algo especial, algo diferente, el mejor regalo jamás hecho. Necesitaba estar con mi Betis…
También recuerdo cada conversación con aquellos que me achacaban (y achacan) que como una mujer en el fútbol, que como una mujer así, que como una mujer entre tanto hombre… ¿Y? Mi sentimiento es igual de puro que el de los miles de hombre que me rodean. Necesito estar con mi Betis…
Quizás no quiero recordar los mejores triunfos logrados, me hacen daño imaginarlos, me hacen daño recordar lo feliz que fui, lo feliz que me hicieron… En aquellos momentos, también necesite a mi Betis…
Pero, ¿con qué me quedaría de mis 23 años de beticismo? No sería sin duda con la Copa del Rey, no sería con aquel mágico Mallorca-Betis, no sería con aquel Betis-Liverpool, no sería con ese duro Racing-Betis, no será tampoco con este Betis-Valladolid… Será simplemente con BETIS. Si. De 23 años, yo me quedaría con lo que ese nombre conlleva dentro.
Me quedo con lo que siento por dentro al pasar por su Estadio. Me quedo con lo que siento al ponerme su camiseta. Me quedo con el orgullo que sentía cuando iba a la facultad con mi carpeta repleta de Betis. Me quedo con lo que siento por dentro cuando escucho a mi afición celebrar un gol. Me quedo con los nervios de mi gente bética ante un partido de nuestro Betis.
Me quedo con el pesimismo de mi padre, y las conversaciones que eso origina: “Ojú Rocío, este partido lo perdemos…”, “No papá! Cállate anda, cállate!”, “Queréis callarse los dos?!”, grita siempre al final mi hermano…
Ahora me quedo con el beticismo que derrocha mi novio, a 500 Km: “Nena, me quedo el domingo al fútbol” “Tú estás loco! Vas a llegar a casa a las 4 de la mañana, que curras el lunes!”, “Me da igual, no puedo irme y dejar al Betis con la que nos jugamos… no puedo…”. Eso me llena…
Me quedo con lo que ahora estoy sintiendo al escribir esto…
No se que va a pasar pasado mañana… no lo se. Solo se, que pase lo que pase, yo el lunes me sentiré la bética número 1. Solo se que desde que salga del Estadio, iré orgullosa llevando ese escudo en mi camiseta… como lo he hecho siempre después de una derrota. Que no me importa donde estés Betis, que no me importa… que yo voy a estar siempre contigo. Solo me importa, el daño que te están haciendo, pero la lucha no ha hecho más que empezar, y un día, recuperarás tu esencia.
Sentir, luchar, ganar… ¡Podemos!. Claro que podemos… Podemos luchar por 102 años de historia y por miles de corazones que laten en verde… No nos jugamos un título, no nos jugamos un pase a Liga de Campeones, nos jugamos el descenso, pero para mí será como disputar la final de la Champions… Eres tú Betis, tú, el que me hace pensar así…
Te Quiero Betis, ayer, hoy y siempre…
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[LEFT]PD. Siento el tochito... pero o lo hago, o me corto las venas de los nervios...
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