Por tercer año consecutivo los navarros se preparan una vez mas para el asalto del Villamarin; pretenden sumarse a la nueva ristra de gafes, entre los que se hallan viejos y nuevos conocidos: Sevilla, Español, Athletic, Deportivo, Recreativo. Y eso, que hasta 1991 los pamplonicas solían caer derrotados en Heliopolis, incluso algunas veces de manera contundente (hay tres manitas registradas: 35-36, 5-1, en los tiempos en que Paquirri y gran parte de la base que gano la Liga aun seguía intacta; 44-45, cuando el Betis de la postguerra en Segunda Division aun tenia pólvora en las botas; 73-74, 5-0, en tiempos de Szusza, con Mamelli, el "Wing" Anzarda; Aramburu, Biosca y demas). En otras ocasiones, cuando no era Poli Rincón el que salvaba los muebles ante los incómodos rojillos, tirando las penas máximas, cedidas por Cardeñosa para reforzar el pichichi madrileño, era aquel Valentin que vino del Córdoba, el encargado de conseguir los puntos cuando el partido expiraba.
Pero los tiempos han cambiado, desde que la victoria vale tres puntos y los porteros no pueden atrapar cesiones, aquellos equipos llamados a luchar por la permanencia, pierden puntos en casa, pero también los ganan fuera mucho mas que antes; de este modo, tradicionales clubes modestos como Santander, Rayo Vallecano o el mismo Osasuna, han conocido enormes triunfos fuera de casa; sin olvidar a las nuevas potencias como Villarreal, por ejemplo. El Betis, para no ser menos, esta Campaña suma cinco triunfos foraneos, los cuales estas alturas y en otras epocas, posiblemente hubieran bastado, salvo excepciones, para tener casi la permanencia conseguida al final del Campeonato.
Los navarros vienen con un Camacho ansiosos ambos de lograr sus primeros tres puntos fuera del Reyno de Navarra en Villamarin; y lo peor de todo es que si se da el caso, no es nuevo: un 0-5 hace dos temporadas, causante final de graves desordenes ante la puerta de cristales y el palco del mandamas, no basto para que, el año pasado se volviera a repetir el baño, también histórico: 0-3.
Ahora suenan las alarmas, la situación toma un cariz claro de convertirse en oscuro si el domingo pasa lo peor. Pero vamos, no quiero ni pensar en lo que podría pasar la Jornada siguiente, porque he estado viendo el calendario y lo he apartado para evitar los tembliques.
Esta claro que nos conformamos con ese 1 a 0 de toda la vida, pero lo que mas me aflije, no es que no se de el 1, que se puede dar perfectamente; sino que el 0 tampoco se de. Ese es el problema.
Pero los tiempos han cambiado, desde que la victoria vale tres puntos y los porteros no pueden atrapar cesiones, aquellos equipos llamados a luchar por la permanencia, pierden puntos en casa, pero también los ganan fuera mucho mas que antes; de este modo, tradicionales clubes modestos como Santander, Rayo Vallecano o el mismo Osasuna, han conocido enormes triunfos fuera de casa; sin olvidar a las nuevas potencias como Villarreal, por ejemplo. El Betis, para no ser menos, esta Campaña suma cinco triunfos foraneos, los cuales estas alturas y en otras epocas, posiblemente hubieran bastado, salvo excepciones, para tener casi la permanencia conseguida al final del Campeonato.
Los navarros vienen con un Camacho ansiosos ambos de lograr sus primeros tres puntos fuera del Reyno de Navarra en Villamarin; y lo peor de todo es que si se da el caso, no es nuevo: un 0-5 hace dos temporadas, causante final de graves desordenes ante la puerta de cristales y el palco del mandamas, no basto para que, el año pasado se volviera a repetir el baño, también histórico: 0-3.
Ahora suenan las alarmas, la situación toma un cariz claro de convertirse en oscuro si el domingo pasa lo peor. Pero vamos, no quiero ni pensar en lo que podría pasar la Jornada siguiente, porque he estado viendo el calendario y lo he apartado para evitar los tembliques.
Esta claro que nos conformamos con ese 1 a 0 de toda la vida, pero lo que mas me aflije, no es que no se de el 1, que se puede dar perfectamente; sino que el 0 tampoco se de. Ese es el problema.
Comentario