El efecto Aurelio
Chaparro ajusta el sistema con su plantilla, ésta le muestra su total confianza y aprueba que el turco siga jugando más suelto · La propia defensa apuesta por organizarse mejor para no atar al cerebro
Javier Mérida / Sevilla | Actualizado 09.12.2008 - 07:57
Paco Chaparro es un hombre ambicioso e ilusionado. Ni los vaivenes del propio devenir liguero hacen mella en su moral, en ese afán por construir un equipo que sea reconocible por su identidad de juego. Algunos resultados, como el del pasado domingo frente al Espanyol, suponen trabas para tan loable propósito, pero el trianero se muestra firme y muy seguro. Cuenta con el aval que siempre supone el apoyo de sus futbolistas, incluso el de algunos de los que asoman con cuentagotas en sus alineaciones.
El lunes, como esa fiesta que restaron hace años tras la semana de Feria, suele ser de resaca en Los Bermejales. El técnico, junto a su plantilla, disecciona el partido del día anterior. Y, a diferencia de otras épocas, son varios los futbolistas que intervienen en esas charlas en la ciudad deportiva, entre ellos el capitán Juanito, no sólo por esa distinción sino por ser uno de los futbolistas que mejor analiza y conoce los códigos de este juego.
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Después del partido comentó que iba a decirle a Aurelio que no se fuera tanto para adelante, porque dejaba desguarnecido el sistema defensivo. Ahora sale la noticia de que ha tenido una charla y los defensas (Arzu y Juanito, los jefes del vestuario), le han dicho que siga Aurelio adelantandose cuando lo crea necesario, y que ellos se iban a esmerar más en defensa. Lo peor de esto es que da la impresión de que Chaparro pinta poco dentro de esta plantilla. Cómo se puede creer eso de que se van a esmerar, si eso es imposible, por la bajísima calidad, colocación y predisposición de la pareja de centrales más nefasta que hay en el futbol español. Señor Chaparro si tiene que reforzar el sistema defensivo, quite de una vez a ese estorbo llamado Capi, y mire un poco al segundo equipo y suba al primero jugadores que le sirvan para eso, como Cañitas y no a los que le larga Nogué (como Segura) que no aportan absolutamente nada al equipo. ¡Ah se me olvidaba! haber si alguna vez vemos al Betis con un planteamiento sobre el terreno de juego, y no que parecen pollos descabezados a los que bailan los equipos contrarios medio decentemente asentados en el centro del campo.
Chaparro ajusta el sistema con su plantilla, ésta le muestra su total confianza y aprueba que el turco siga jugando más suelto · La propia defensa apuesta por organizarse mejor para no atar al cerebro
Javier Mérida / Sevilla | Actualizado 09.12.2008 - 07:57
Paco Chaparro es un hombre ambicioso e ilusionado. Ni los vaivenes del propio devenir liguero hacen mella en su moral, en ese afán por construir un equipo que sea reconocible por su identidad de juego. Algunos resultados, como el del pasado domingo frente al Espanyol, suponen trabas para tan loable propósito, pero el trianero se muestra firme y muy seguro. Cuenta con el aval que siempre supone el apoyo de sus futbolistas, incluso el de algunos de los que asoman con cuentagotas en sus alineaciones.
El lunes, como esa fiesta que restaron hace años tras la semana de Feria, suele ser de resaca en Los Bermejales. El técnico, junto a su plantilla, disecciona el partido del día anterior. Y, a diferencia de otras épocas, son varios los futbolistas que intervienen en esas charlas en la ciudad deportiva, entre ellos el capitán Juanito, no sólo por esa distinción sino por ser uno de los futbolistas que mejor analiza y conoce los códigos de este juego.
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Después del partido comentó que iba a decirle a Aurelio que no se fuera tanto para adelante, porque dejaba desguarnecido el sistema defensivo. Ahora sale la noticia de que ha tenido una charla y los defensas (Arzu y Juanito, los jefes del vestuario), le han dicho que siga Aurelio adelantandose cuando lo crea necesario, y que ellos se iban a esmerar más en defensa. Lo peor de esto es que da la impresión de que Chaparro pinta poco dentro de esta plantilla. Cómo se puede creer eso de que se van a esmerar, si eso es imposible, por la bajísima calidad, colocación y predisposición de la pareja de centrales más nefasta que hay en el futbol español. Señor Chaparro si tiene que reforzar el sistema defensivo, quite de una vez a ese estorbo llamado Capi, y mire un poco al segundo equipo y suba al primero jugadores que le sirvan para eso, como Cañitas y no a los que le larga Nogué (como Segura) que no aportan absolutamente nada al equipo. ¡Ah se me olvidaba! haber si alguna vez vemos al Betis con un planteamiento sobre el terreno de juego, y no que parecen pollos descabezados a los que bailan los equipos contrarios medio decentemente asentados en el centro del campo.
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