Entre poco comprendidas peticiones de paciencia y cierta prudencia por parte de los protagonistas, los movimientos para la venta de las acciones de Farusa a Betis Sport no han cesado en los últimos días. Fuentes cercanas a la operación reconocieron a ABC que en esta semana se ha finalizado el proceso burocrático de la confección de los documentos necesarios para completar dicha transacción, por lo que sólo resta que se fije una fecha definitiva para la firma ante notario y que, quizás lo más importante, se mantengan los avales presentados el pasado 3 de octubre para alcanzar el preacuerdo con Lopera.Así pues, cuando las garantías económicas estén completamente resueltas, el hasta ahora máximo accionista bético y los componentes del grupo Betis Sport, que siguen afirmando que no tienen ningún tipo de empresario detrás que les avale la operación y que están invirtiendo en ello todo su patrimonio familiar, pasarán por la notaría para cerrar esta operación, interminable por la cuantía de la misma (bastante superior a los 70 millones de euros anunciados) y por la complejidad que entraña el cambio de poderes en una entidad de estas características.
Un paso importante sí se ha dado al fin. Se esperaba la llegada de la auditoría de las cuentas del club realizada por Garrido Auditores SL, la nueva consultora para esta temporada, ya que sustituye a la hasta ahora habitual Rubio, Membrive y Gisbert SL. Esta auditoría, exhaustiva y rigurosa según fuentes del club, reflejará el estado actual de la entidad para que tanto el vendedor del paquete mayoritario de acciones como el comprador sepan qué es lo que se está traspasando. Además, este análisis de las cuentas del Betis servirá también para la próxima junta de accionistas de diciembre.
De esta manera, estatutaria, jurídica y legalmente todo está en condiciones para que la anunciada venta se concrete en las próximas semanas. Desde Betis Sport se sigue guardando silencio en este sentido, mientras sus componentes continúan de viaje. Ninguno de los cuatro miembros conocidos (el anunciado como futuro presidente Francisco Sánchez Quintana y Pedro Muñoz, Juan de Dios Donaire y Mariano Fernández) ha estado estos días en Sevilla, alegando motivos profesionales ajenos a la inminente compra de las acciones de Farusa.
Lo que sí es cierto, como anunció ABC hace un par de semanas, es que Betis Sport pretende hacer un cambio tranquilo en la entidad, una transición pacífica, en el caso de que se concrete toda la transacción. Y es que contarán no sólo con prácticamente todo el personal administrativo del club, sino con un puñado de consejeros actuales. El papel de Lopera está definido como asesor al presidente. El propio máximo accionista actual presume en círculos internos y de confianza de que seguirá teniendo un peso importante en el gobierno de la entidad, pero su función será meramente consultiva, ya que Sánchez Quintana y su equipo pretenden aprovechar su experiencia en el mundo del fútbol para que sus primeros pasos no sean fallidos, además de mantener cierta continuidad con la temporada empezada y que les ayude a comprender el complicado funcionamiento de una entidad peculiar como el Betis.




Fuente: http://www.alfinaldelapalmera.com/in...4113&Itemid=38