Varios equipos hacen estadios nuevos, algunos espectaculares (el del Valencia es tremendo) y nadie habla del estadio del Betis... porque lo dan ya por finalizado o por imposible.

Que por cierto, los retrasos son en el peor de los casos de 1 años

Por cierto... ¿¿cuántas estrellas uefa tendrá nuestro estadio??

(fuente marca.com)

Mudanza en tiempos de crisis

En la actualidad, tres equipos de la Liga BBVA están embarcados en la construcción de nuevos estadios. Un reto siempre complicado de afrontar, y más en tiempos de crisis como los que atravesamos. Sin embargo, todo indica que el Espanyol tendrá su nuevo estadio en los plazos previstos y que Athletic y Valencia sólo sufrirán un cierto retraso, algo más acusado en el caso de los vascos. Otro problema es el que afecta al Barcelona, que ha paralizado totalmente la faraónica remodelación del Camp Nou anunciada hace apenas un año.

Cronológicamente, el primer proyecto en echar a andar fue el del RCD Espanyol, embarcado en la búsqueda de un nuevo hogar desde el derribo del inolvidable Sarrià. Finalmente, el club blanquiazul halló ubicación en unos terrenos entre Cornellà y el Prat de Llobregat, y las obras comenzaron a finales de 2004. La inauguración estaba prevista para abril o mayo de 2009, y así será, salvo catástrofe. La semana que viene se plantará el césped y el estadio será entregado al club antes de finales del presente año. Se espera al Liverpool de Albert Riera como invitado para la inauguración de un recinto con capacidad para 40.000 espectadores y cuatro estrellas de categoría UEFA. Su coste será de 60 millones de euros.

El siguiente estadio en ser terminado debe ser el Nou Mestalla, aunque en este caso sí habrá retraso, de entre seis meses y un año con relación a la fecha prevista inicialmente, junio de 2009. Precisamente esta misma semana se ha desbloqueado una situación de tensión entre el Valencia y las empresas constructoras –previo pago de 40 millones de euros por parte del club–, que habían ralentizado el ritmo de trabajo como medida de presión.

El presidente ché, Vicente Soriano, ha dado un nuevo impulso a la construcción del Nou Mestalla, que estará, según el club, acabado en diciembre de 2009. Es decir, con la temporada en curso, por lo que una mudanza debería ser aprobada por la Liga de Fútbol Profesional (LFP). El nuevo estadio valencianista, cuya construcción se cobró la vida de cuatro trabajadores en mayo de este año, tendrá un aforo de 75.000 espectadores, cinco estrellas UEFA (la máxima categoría) y un precio final de unos 220 millones de euros.

Aunque no se trata de cifras oficiales, una cantidad similar se baraja para el Nuevo San Mamés, o San Mames Barria. También hay un ligero retraso sobre la previsión de inicio de las obras, que ha pasado de finales de 2008 a mayo de 2009, según se ha informado en la reciente Asamblea de Socios del Athletic. Aunque estaba previsto que el club vizcaíno empezara a jugar en su nuevo estadio en el curso 2010-11, no lo hará hasta dos temporadas después (2012-13), pese a que el recinto sólo estará construido en sus tres cuartas partes. El estadio no estará totalmente rematado hasta 2014, aunque, en una reciente entrevista concedida a Deia, el presidente Javier García Macua negaba que la crisis de la construcción hubiera afectado al proyecto. “Al contrario, si se licita poca obra, se pueden obtener mejores precios”, aseguraba.

San Mames Barria, con capacidad para unos 55.000 espectadores y cinco estrellas UEFA, nace con la difícil misión de tomar el relevo de ‘La Catedral’, seguramente el estadio más emblemático del fútbol español.

Pero, sin duda, el caso más llamativo es el del nuevo Camp Nou, cuya remodelación –tasada en unos 250 millones de euros– a cargo del arquitecto británico Sir Norman Foster se encuentra totalmente parada, tanto por motivos económicos como administrativos.

Joan Laporta presentó un ambicioso proyecto hace poco más de un año, con motivo del 50 aniversario del Camp Nou, pero el problema es la financiación: el Barça pretende recalificar los terrenos del Miniestadi (como hizo el Real Madrid en su día con la extinta Ciudad Deportiva), pero los vecinos del barrio de Les Corts se oponen a la operación, que consideran un “pelotazo urbanístico”. De momento, el precioso diseño imaginado por Norman Foster acumula polvo olvidado en un cajón, mientras el Barça y el Ayuntamiento de la ciudad tratan de darle salida.