Hasta seis jugadores por puesto

Chaparro aguanta estoicamente y frena la llegada de futbolistas mediocres a la vez que consensúa con Momparlet una amplia lista de refuerzos · El técnico se hace a la idea de irse a Jerez sin caras nuevas

Javier Mérida / Sevilla | Actualizado 24.06.2008 - 05:02

Paco Chaparro hace muchos días que se ha puesto firme y su labor principal, al igual que ocurriese este invierno, está siendo la de frenar el aluvión de futbolistas mediocres que los intermediarios no paran de ofrecerle al Betis, acostumbrados desde hace unos años a aprovecharse de la impericia de su director deportivo, Manuel Momparlet, y de las prisas de Manuel Ruiz de Lopera por firmar cuanto jugador gratis pulule por el mercado.

El máximo accionista, huérfano de gente de su confianza -su entrenador no lo es- para confeccionar un proyecto y sabedor de que es misión casi imposible reconquistar a la afición bética haga lo que haga, se ha propuesto invertir lo mínimo y no cesa de dar vueltas sobre la misma noria de la que lo quiere apear Chaparro: Antonio Hidalgo, Caneira, Javi Guerrero, Izquierdo, Luccin, Sunny... La lista de futbolistas no aptos para el Betis es interminable, pero el técnico ha consensuado con la secretaría técnica unas prioridades y unos nombres concretos, y de ahí no está dispuesto a moverse.

La prioridad, desde hace tres semanas, es un medio centro, llámese Emana o M'Bia, que ya se complementaría en cada caso con otro centrocampista porque Lopera no va a firmar nunca a los dos. Tanto es así que ni la oferta de seis millones que anunció públicamente haber realizado por el camerunés del Toulouse es cierta. Así lo confirma el presidente del club francés, Olivier Sadran, quien no debe tener noticias ni a través del intermediario que debía habérsela hecho llegar ya.

Y hasta que no fiche uno de esos dos futbolistas, los técnicos no están dispuestos a aceptar la llegada de ningún otro, sabedores de la impopularidad de la medida y de que Lopera, en ese caso, empezaría la casa por el tejado y, después, amparado en el modestísimo presupuesto que maneja, se echaría atrás en las prioridades y buscaría remiendos.

Aun así, Chaparro, Momparlet y el resto de técnicos han elaborado una lista de jugadores que contempla hasta seis opciones en algunos de los puestos señalados, a saber: ambos laterales, un defensa central, dos centrocampistas y un atacante, ya sea para la punta o para el extremo derecho, valiéndose en este caso de la polivalencia de Edu. En total, unos 30 futbolistas entre los que no se encuentran casi ninguno de los citados en las últimas semanas, meros ofrecimientos de representantes.

Sí está en la misma el atacante Goitom, pero sólo en último caso, ya que hay hasta cinco atacantes por encima de él y, además, su posición no es de las primeras a reforzar. Ocurre que como es de los que está más a tiro y, además, incluso existen en el club gestiones emprendidas de años atrás, le insisten a Lopera y, éste, por su bajo precio lo mueve y lo airea.

Chaparro, mientras, aguanta estoicamente y se hace a la idea de irse el 14 de julio a Montecastillo con la plantilla de año pasado, ya se verá si con descartes o sin ellos.

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