«Me molesta que se diga que Lopera se lleva dinero de los fichajes del Betis»


KAKO RANGEL Luiz Vianna, ayer, posando para ABC en un hotel sevillano

POR MATEO GONZÁLEZ

-Hay gente que dice que es el director deportivo del Betis...
-¡Ojalá! Sólo soy un trabajador que intenta ayudar al Betis. No tengo ninguna autoridad ni mando en fichajes ni en nada. Observo jugadores en las condiciones que me piden y apunto nombres que puedan venir. Nunca ha venido un jugador porque quisiera yo.


-¿Su cargo tiene un nombre?
-No. Hoy en día todos los clubes europeos tienen gente de confianza en cada mercado y el brasileño es muy importante. Intento que el club tenga una buena imagen, pero no por ello soy el director deportivo. Aquí hay uno, que es Momparlet, que cada vez tiene más fuerza.


-Pues muchos piensan que tiene usted un poder enorme...
-Será porque aparezco con los fichajes, me siento en el palco cerca de Lopera... La gente cree que tengo influencia, pero no es así. Puedo tener la misma de un aficionado, pero vivo en Brasil, mi trabajo es el fútbol y hablo con Lopera y Momparlet por los intereses del Betis.


-¿Qué futbolistas ha traído?
-Prácticamente estuve en las operaciones de todos los brasileños. Tengo relación con el Betis desde que fichó Denilson en el 97, aunque llegó en el 98, cuando el entrenador era Oliveira, que estaba como loco por fichar a Jacques. Lopera me preguntó, me dijo que el entrenador lo quería y que costaba un millón de euros. Le dije que podía salir más barato y lo compró por 500.000 euros. Yo lo traje por petición del entrenador, pero nunca lo había visto antes. Con Assunçao fue diferente. Desde que llegó Denilson se buscaba un medio y di ese nombre. Entonces era del Santos y estaba cedido al Flamengo y era barato. Pero se hizo por más cuando estaba en la Roma.


-En ese tiempo hubo de todo, como Ivonaldo, ¿también suyo?
-De ese le quería hablar. Yo no participé en ese fichaje. Lo vi sólo cuando el Betis jugó el amistoso con el Flamengo. No diré nada malo ni bueno de él, pero no sé cómo llegó aquí. En ese partido Fabao jugó muy bien junto a Juan, que ahora está en la Roma. También Adriano, que tenía 17 años. Yo los ofrecí. Lo que pasa es que el Betis estaba en Segunda, Juan costaba más y se eligió a Fabao. Pero no fui yo. Adriano costaba poco pero al estar en Segunda no se podía apostar.


-Los mejores han sido Edu y Oliveira, ¿suyos?
-En lo de Edu sólo opiné. Sí traje a Oliveira en 2004. El año anterior lo teníamos pero su agente se lo llevó escondido a Valencia. No fue fácil. Salí de Brasil un lunes diciéndole a mi mujer que volvería el viernes y me quedé aquí 33 días, viajando en coche desde Valencia a Sevilla. Al final vino y triunfó. Tuvo la mala suerte de la lesión y buscamos una salida para que se pudiera traer a otro delantero. Lo metimos en el Sao Paulo para conseguir una ficha, que se recuperara, que pudiera ir al Mundial... Era invierno y el Betis sólo quería un cedido con opción a compra. Así era imposible traer a uno importante, pero tuvimos la suerte de que Tardelli, tras el Mundial sub 20, se había peleado con el técnico del Sao Paulo y conseguimos a un jugador que nadie se esperaba pero Serra quería uno más y vino Robert. Ahí sólo opiné. Luego di informes sobre Jorge Wagner y decía que no era lateral. Ficharlo era una buena idea, pero no hice esa operación. Si vas hoy a Brasil a firmar un medio zurdo, es el mejor que hay. Con él llegó Sobis, por el que se peleaba media Europa. Lo ofrecí en 2005 por un millón y pico, pero llegó en 2006 ya revalorizado. Lo tenía hecho con el Racing pero nos cruzamos y nos lo llevamos con la misma oferta. Es un gran jugador. El último ha sido Lima, al que vieron mucho los técnicos del club.


-Y ha evitado varios pufos...
-Le voy a contar algo que parece un chiste. En 2003 un agente le ofreció dos brasileños a Lopera y éste me consultó. Uno era Gustavo Nery, por el que le pedían cinco millones. Le dije que era demasiado. En la misma charla me dio el otro nombre, Alex Preto. «Presidente, no lo conozco de nada», le dije. «Pero, si es brasileño», me respondió. Le dije que le preguntara al agente en qué equipo jugaba. Éste sólo le decía que era el nuevo Roberto Carlos, pero no el equipo. Por lo visto tenía 25 años y jugaba en un equipo de Tercera Regional de Sao Paulo. Le dije a Lopera que colgara. No tenía tiempo para ser el nuevo Roberto Carlos.


-Hay quien sospecha que usted o Lopera se benefician de los fichajes, ¿es eso cierto?
-Eso me molesta mucho, especialmente por Lopera. Lo mío es lógico, es mi trabajo. El Betis me paga bien pero mucho menos que el resto de equipos del mundo y aquí yo trabajo más que en cualquier otro. Llevo más de 15 años en esto, conozco muchos presidentes y como Lopera hay pocos. No es un piropo. Se dedica al cien por cien al Betis y es algo que no vi en ningún otro lado. En las operaciones en las que he participado no he visto ir una peseta a un sitio extraño. Si la gente dice que vengo a ganar dinero, que lo diga. Yo vengo a trabajar, a veces sin cobrar. Molesta que la gente se crea eso de Lopera. Puede tener todos los defectos del mundo, pero decir que coge dinero de los fichajes es una tontería. Aquí es todo legal, pero en los malos momentos la gente piensa lo peor.



Ándate con cuidao Chaparro que llega la hora de la verdad pero la de verdad.