Un espíritu ya centenario recorre sin parada alguna nuestros corazones, ese espíritu...

-Ese espíritu es entrega. Que brinda su gente en cada momento, en cada instante, en cada segundo. La entrega de nuestros corazones en cada momento, la entrega de nuestra garganta en cada instante, la entrega de nuestra alma en cada segundo...

-Ese espíritu es sentimiento. Sentimiento que será cuestionado por algunos y demostrados por otros. Sentimiento que inunda, inundó e inundará nuestros corazones. Sentimiento que inunda nuestra alma como si de un líquido pegajoso se tratara que se pega, y no se despega. Sentimiento...

-Ese espíritu es ilusión. Ilusión a ver tu gloria en cada momento. Ilusión a sentirte cada día más. Ilusión a tenerte por y para siempre. Ilusión...

-Ese espíritu es temor. Temor de perderte. Temor de despertarme un día y no sentirte. Temor de no tenerte. Temor de no quererte. Temor...

-Ese espíritu es amor. El que sentimos por ti en cada momento. Amor que demostramos en cada instante. Amor por un sentimiento, amor por una ilusión, amor por ti...

-Ese espíritu es arte. Arte de la gente que te sigue sin rechistar por los más remotos lugares de la tierra. Arte y salero que nos haces predicar entre el mundo con todo lo que nos das y nos quitas...

-Ese espíritu es pasión. Pasión, pasión desenfrenada en cada momento que pasamos a tu lado. Pasión, pasión de quererte y sentirte tanto. Pasión...

-Ese espíritu es gloria. Gloria de tenerte. Gloria de sentirte. Gloria de quererte. Gloria de no perderte. Gloria, de tu gloria...

Ese espíritu tiene nombre, ese espíritu es BETIS.