Empezaré por rendirle honores a una compañera de BUP, de segundo. Era una chica de las que sin ser muy inteligente, era perseverante. Se sentaba en la primera fila y preguntaba prácticamente por todo. Al principio de curso solía exasperar a los profesores y provocar las risas del resto de compañeros.

Ya está María preguntando. Daba igual inglés, matemáticas o ciencias, ella lo preguntaba. La sorna general era constante. Unas risillas siempre acompañaban a la pregunta y tengo que reconocer que yo participaba de esa pandilla. Un día faltó María, y ese día las clases fueron igual que todos los días, salvo por una cosa. Pobre de mí, no me atrevía a preguntar al profesor, intimidado por mi timidez o por ser el que recogiese el testigo de María me quedé callado.

Fue en ese momento cuando comprendí la importancia de María en clase, preguntaba por mí, por todos, y ella era impermeable al cachondeito general, aunque cada vez menos reíamos, ya fuese porque habíamos reconocido nuestra ignorancia o porque, aunque no preguntábamos, nos aprovechábamos de su esfuerzo.

Hoy sé que es una buena profesional, arquitecta técnica, seguro que más a base de esfuerzo y tesón que de brillantez heredada por los genes. En la perspectiva recuerdo a María y casi nada al resto de la clase. Qué cosas.

Pues... por dónde íbamos? Sí, qué harán cuando el estadio esté terminado? Es una pregunta curiosa cuando se hace a los demás y no en primera persona. Yo que veo cómo hay gente esforzándose porque el dinero del Betis redunde en el Betis, sé por conocerlos que será un día grande cuando el campo de los béticos esté terminado. Para entonces continuarán activos mil frentes en los que aportar conocimientos, aportar información, construir y hacer cosas para que el Real Betis sea un poquito más de los béticos.

Yo leía con sorna hace tiempo a foreros a los que hoy admiro y no en la frecuencia en la que me deje perder la perspectiva. Yo admiro a aquellos que se levantaron donde pudieron, como esta web u otras, donde había un foro (en toda la definición de la palabra) y hacían lo que otros o no se atrevían o simplemente por ignorancia desconocían. Ellos dieron un primer paso alejado de aquellos que teniendo poder o no lo saben o no quieren utilizarlo esperando canjearlo por prevendas de supuesta nobleza.

Y de la nada, a sabiendas del destierro instantáneo con el que funciona el club con aquellos que se atreven a preguntar, a cuestionar, a saber, incluso a proponer e imaginar otro Betis. Pues todo eso es más que suficiente para que una vez hecho (ojalá) el estadio con el esfuerzo de todos los béticos se siga adelante, porque serán nuevos los retos, los numerosísimos retos.

Para quien piense que esto es un pulso entre el máximo accionista y una asociación de béticos les digo que nada más lejos de la realidad. Es un pulso del Betis con su FUTURO.

Muy bueno, Recontra.

Tu María me ha vuelto a llevar otra vez a las aulas. Qué falta hacen personas así en todos los órdenes de la vida.

La constancia es lo que impera, amigo. Es verdad que el que la sigue, la consigue.

¿ Qué haremos cuando esté el estadio terminado?

Suponiendo que lo veamos, seguir construyendo los raíles de alta velocidad, bien derechitos, para que la máquina llamada betis, que hemos visto renquear por su mala conducción, no tenga obstáculos ninguno para llegar a la estación de lujo, donde tiene fijada su meta. Y que llegue a ser posible el primero y, por lo menos que no se retrase.

"Iré a cualquier sitio, siempre y cuando sea hacia delante" (Dr. Livingstone)

Me ha encantado tu post compañero. Yo sólo espero que el estadio se finalice cuantos antes, aunque dudo mucho que este para la temporada 2009/2010...y espero que esté cuanto antes, porque así podré sentarme a disfrutar de los partidos junto a mis compañeros de la mejor peña Betica del mundo.

Empezaré por rendirle honores a una compañera de BUP, de segundo. Era una chica de las que sin ser muy inteligente, era perseverante. Se sentaba en la primera fila y preguntaba prácticamente por todo. Al principio de curso solía exasperar a los profesores y provocar las risas del resto de compañeros.

Ya está María preguntando. Daba igual inglés, matemáticas o ciencias, ella lo preguntaba. La sorna general era constante. Unas risillas siempre acompañaban a la pregunta y tengo que reconocer que yo participaba de esa pandilla. Un día faltó María, y ese día las clases fueron igual que todos los días, salvo por una cosa. Pobre de mí, no me atrevía a preguntar al profesor, intimidado por mi timidez o por ser el que recogiese el testigo de María me quedé callado.

Fue en ese momento cuando comprendí la importancia de María en clase, preguntaba por mí, por todos, y ella era impermeable al cachondeito general, aunque cada vez menos reíamos, ya fuese porque habíamos reconocido nuestra ignorancia o porque, aunque no preguntábamos, nos aprovechábamos de su esfuerzo.

Hoy sé que es una buena profesional, arquitecta técnica, seguro que más a base de esfuerzo y tesón que de brillantez heredada por los genes. En la perspectiva recuerdo a María y casi nada al resto de la clase. Qué cosas.

Pues... por dónde íbamos? Sí, qué harán cuando el estadio esté terminado? Es una pregunta curiosa cuando se hace a los demás y no en primera persona. Yo que veo cómo hay gente esforzándose porque el dinero del Betis redunde en el Betis, sé por conocerlos que será un día grande cuando el campo de los béticos esté terminado. Para entonces continuarán activos mil frentes en los que aportar conocimientos, aportar información, construir y hacer cosas para que el Real Betis sea un poquito más de los béticos.

Yo leía con sorna hace tiempo a foreros a los que hoy admiro y no en la frecuencia en la que me deje perder la perspectiva. Yo admiro a aquellos que se levantaron donde pudieron, como esta web u otras, donde había un foro (en toda la definición de la palabra) y hacían lo que otros o no se atrevían o simplemente por ignorancia desconocían. Ellos dieron un primer paso alejado de aquellos que teniendo poder o no lo saben o no quieren utilizarlo esperando canjearlo por prevendas de supuesta nobleza.

Y de la nada, a sabiendas del destierro instantáneo con el que funciona el club con aquellos que se atreven a preguntar, a cuestionar, a saber, incluso a proponer e imaginar otro Betis. Pues todo eso es más que suficiente para que una vez hecho (ojalá) el estadio con el esfuerzo de todos los béticos se siga adelante, porque serán nuevos los retos, los numerosísimos retos.

Para quien piense que esto es un pulso entre el máximo accionista y una asociación de béticos les digo que nada más lejos de la realidad. Es un pulso del Betis con su FUTURO.

Ese pulso al que aludes, incluye las dos premisas.

Por una parte es una batalla de David contra Goliath, ya que sin uno es imposible que exista el otro. Además de que terminará cayendo el más grande por su propio peso, el golpe ya ha sido asestado, es cuestión de tiempo.

Por otra parte es ineludible que el mero hecho de tener que batallar contra un miserable, indigno y ruin que ha dirigido durante años un gran club a base de ensoñaciones y palabras incumplidas ya ha repercutido y repercutirá al devenir de un nombre, de una bandera, tras la cual se encuentra un batallón de generaciones, sentimientos e historia.

Sinceramente creo que no será tan difícil volver a pulir lo que un día fue un club grande y humilde, sin muchos títulos, pero estandarte de la ciudad y las buenas artes de la gente que siempre lo apoyó, simplemente porque el sentimiento sigue ahí, porque la gente no lo ha olvidado, por las ganas de recuperar lo que es nuestro y devolvérselo a nuestro nombre, a nuestro club.

Por último y como piedra angular de esa recuperación, lo primero que haría cuando el campo estuviese terminado sería cambiarle el nombre. No por borrar una parte, además importante, de la historia de nuestro club, sino porque será un signo de que el Betis vuelve a ser de quién nunca debió desprenderse, que la gente cuando vea Betis vuelva a ver el río, la Palmera, Sevilla y su gente.