Las negociaciones en diversos frentes siguen abiertas, pero ninguna termina de convencer a todas las partes. Mientras, llegan ofertas por varios jugadores béticos y la más jugosa, de 15 millones, es por el brasileño. Lopera no quiere venderlo, pero parte de su entorno se lo aconseja.

Ni sí, ni no, ni todo lo contrario. Chaparro ha pedido fichajes y todo el mundo da por hecho que van a llegar, pero estamos a día 25, o lo que es lo mismo, sólo a seis del cierre del plazo y no hay nada cerrado. El club sigue moviéndose, pero el entrenador no se decide por lo que se le ofrece. Y en esas anda la actualidad verdiblanca cuando aparece por medio un nombre: Rafael Sobis. El brasileño puede ser la clave en las operaciones de este mercado invernal. ¿Y cómo es eso? Muy sencillo. El atacante es uno de los hombres con más caché de la plantilla. El Spartak de Moscú mantiene su oferta del pasado verano por 15 millones de euros. Esa cantidad sería reinvertida en dos jugadores de calidad, que formarían parte de la famosa lista de Chaparro. Además, Sobis ocupa plaza de extranjero, por lo que se ampliaría extraordinariamente el mercado en el que buscar.

A todo ello habría que unir que el futbolista ha bajado considerablemente su rendimiento y ha sido relegado al banquillo. El jugador siempre muestra su deseo por seguir en el Betis, pero poco a poco ha ido perdiendo importancia en el equipo y ya no es el jugador imprescindible que llegó desde el Internacional de Porto Alegre. De hecho, en estos momentos, su gran valedor es Manuel Ruiz de Lopera. Gente del entorno del máximo accionista le aconseja que estudie esas posibles ofertas, aunque el consejero delegado no quiere ni oír eso de vender a una de sus grandes apuestas. Quedan días por delante, pero si Lopera cambia de opinión...

Mientras, la secretaría técnica sigue moviéndose y dando a conocer numerosos futbolistas al técnico. Parece que el mercado mejor colocado es el francés. Allí ha estado Joaquín Parra en los últimos días y se ha fijado en varios jugadores. Uno de ellos es Tamas, que jugó la pasada campaña en el Celta y ahora lo hace en el Auxerre. Pero este rumano no es del agrado de Chaparro. Sin embargo, sí gusta más el colombiano Mario Yepes. El central juega en el PSG, donde es el auténtico líder. Acaba de cumplir 32 años y conoce a la perfección el fútbol europeo. Cumple todos los requisitos necesarios. No olviden este nombre.


Fuente: as.com