Re: Seré sincero, estoy dudando... ganar o perder?
Para empezar el betis no le gana a nadie, y al Zaragoza menos. Este domingo y casi todos los que vengan con estos jugadores seguiremos perdiendo porque tenemos una plantilla de segunda división, eso dice la clasificación. No es cuestión de creer que ganaremos o perderemos. Vamos a perder casi en un 89 % de posiblidades un 10 % de empatar y un 1 % de ganar. más que nada porqeu els recuerdo que en el fútbol para ganar hay que meter goles y es poco habitual metérselo en propia meta, excepto para Melli. Es más para que el Zaragoza se metiera un gol en propia meta habría, al menos, que llegar a su área. Cosa harto improbable. Tengo esperanza pero creo que nos vamos a segunda escarbando. Lo que queda aclarar es al precio que nos hundiremos. Yo me llevaría por delante al asesino...y ese es el deber moral del buen bético. Que Lopera salga como un perro hijo de mala madre de nuestro glorioso Betis. Para que las próximas generaciones le recuerden, pero no como él querría sino como lo que de verdad fue. Un indeseable ladrón, mentiroso y julandrón.
Para empezar el betis no le gana a nadie, y al Zaragoza menos. Este domingo y casi todos los que vengan con estos jugadores seguiremos perdiendo porque tenemos una plantilla de segunda división, eso dice la clasificación. No es cuestión de creer que ganaremos o perderemos. Vamos a perder casi en un 89 % de posiblidades un 10 % de empatar y un 1 % de ganar. más que nada porqeu els recuerdo que en el fútbol para ganar hay que meter goles y es poco habitual metérselo en propia meta, excepto para Melli. Es más para que el Zaragoza se metiera un gol en propia meta habría, al menos, que llegar a su área. Cosa harto improbable. Tengo esperanza pero creo que nos vamos a segunda escarbando. Lo que queda aclarar es al precio que nos hundiremos. Yo me llevaría por delante al asesino...y ese es el deber moral del buen bético. Que Lopera salga como un perro hijo de mala madre de nuestro glorioso Betis. Para que las próximas generaciones le recuerden, pero no como él querría sino como lo que de verdad fue. Un indeseable ladrón, mentiroso y julandrón.
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