Los fichajes, sobre el tapete
Pedía Manuel Ruiz de Lopera la presencia de sus fichajes sobre el terreno de juego y Héctor Cúper, si bien es verdad que acuciado por las bajas, los colocó en un escenario inmejorable, el Camp Nou. Y la respuesta fue un paupérrimo rendimiento, con una actitud y aptitud que no mejoran lo visto en otras ocasiones.
Únicamente José Mari aguardaba en el banquillo, mientras siete de los ocho refuerzos, incluido un Ilic sobre el que ejerció la opción de compra tras aprobar sus cualidades durante seis meses, deambulaban sobre el césped. Como viene siendo habitual, y por eso es el único utilizado con regularidad por Cúper, sólo Ricardo justificó la inversión realizada el pasado verano. Paradas de mérito, sobre todo una a cabezazo de Henry, y continuas indicaciones sobre su defensa eran las acciones del meta luso, que ya incluso debe pensar que dónde se ha metido tras estar acostumbrado a pelear por los títulos.
En la defensa, Ilic, Lima y Babic acompañaban a Juanito y cada uno mostró las debilidades que han hecho que Cúper se haya olvidado de ellos durante tantas jornadas. El esloveno, ausente en ataque, evidenció las lagunas defensivas, ya exhibidas, que siempre ofrecen opciones al rival, como ocurrió en el tanto de Henry. El brasileño, bien en la anticipación, no cerró los huecos en su espalda y el delantero francés penetraba una y otra vez. Y Babic, más de lo mismo. El croata ni está ni se le espera, ni funciona de Robert Jarni, como Lopera adelantó, ni de Julen Guerrero, como afirmó su propio compatriota y ex jugador bético.
Somoza, por su parte, intentaba acompañar a Juande y Rivera en el novedoso trivote que Cúper colocó para frenar la línea de creación blaugrana. El argentino, que al menos sí ofreció trabajo, no mejoró al ausente Capi. Lo de Mark González es otra historia. El chileno, supuesto refuerzo estrella, no ayudó a Babic, que se las veía con Messi, ni encaró nunca a Zambrotta. ¿De verdad el Betis era un trampolín para marcharse a un grande? Ayer parecía un jugador camino de la retirada.
En la delantera, Pavone. Lopera afirmó que le gustaría verlo seis partidos seguidos. Cúper le ofreció la responsabilidad de la referencia atacante del equipo, pero el argentino no apareció. ¿Es Pavone el delantero que necesita un equipo dirigido por Cúper? ¿Sabía la secretaría técnica cómo jugaría el Betis al interesarse por el ariete de Estudiantes? Lo único claro es que Pavone no ve puerta. Su sustituto, José Mari… Sin comentarios.
Lopera lanzó el órdago a su entrenador y éste lo ha recibido a su manera. La situación se hace cada vez más insostenible, pero es que los fichajes, o supuestos refuerzos, se encargan de demostrar que ni están ni se les espera, algo que debe anotarse en Jabugo.
Diario de Sevilla, 5 de Noviembre 2007.
P.D, como vemos los refuerzos no aportan nada. Mi opinión, es que año tras año tenemos peor equipo. A la tercera será la vencida ... (nos vemos en segunda jugando el derby chico).
Pedía Manuel Ruiz de Lopera la presencia de sus fichajes sobre el terreno de juego y Héctor Cúper, si bien es verdad que acuciado por las bajas, los colocó en un escenario inmejorable, el Camp Nou. Y la respuesta fue un paupérrimo rendimiento, con una actitud y aptitud que no mejoran lo visto en otras ocasiones.
Únicamente José Mari aguardaba en el banquillo, mientras siete de los ocho refuerzos, incluido un Ilic sobre el que ejerció la opción de compra tras aprobar sus cualidades durante seis meses, deambulaban sobre el césped. Como viene siendo habitual, y por eso es el único utilizado con regularidad por Cúper, sólo Ricardo justificó la inversión realizada el pasado verano. Paradas de mérito, sobre todo una a cabezazo de Henry, y continuas indicaciones sobre su defensa eran las acciones del meta luso, que ya incluso debe pensar que dónde se ha metido tras estar acostumbrado a pelear por los títulos.
En la defensa, Ilic, Lima y Babic acompañaban a Juanito y cada uno mostró las debilidades que han hecho que Cúper se haya olvidado de ellos durante tantas jornadas. El esloveno, ausente en ataque, evidenció las lagunas defensivas, ya exhibidas, que siempre ofrecen opciones al rival, como ocurrió en el tanto de Henry. El brasileño, bien en la anticipación, no cerró los huecos en su espalda y el delantero francés penetraba una y otra vez. Y Babic, más de lo mismo. El croata ni está ni se le espera, ni funciona de Robert Jarni, como Lopera adelantó, ni de Julen Guerrero, como afirmó su propio compatriota y ex jugador bético.
Somoza, por su parte, intentaba acompañar a Juande y Rivera en el novedoso trivote que Cúper colocó para frenar la línea de creación blaugrana. El argentino, que al menos sí ofreció trabajo, no mejoró al ausente Capi. Lo de Mark González es otra historia. El chileno, supuesto refuerzo estrella, no ayudó a Babic, que se las veía con Messi, ni encaró nunca a Zambrotta. ¿De verdad el Betis era un trampolín para marcharse a un grande? Ayer parecía un jugador camino de la retirada.
En la delantera, Pavone. Lopera afirmó que le gustaría verlo seis partidos seguidos. Cúper le ofreció la responsabilidad de la referencia atacante del equipo, pero el argentino no apareció. ¿Es Pavone el delantero que necesita un equipo dirigido por Cúper? ¿Sabía la secretaría técnica cómo jugaría el Betis al interesarse por el ariete de Estudiantes? Lo único claro es que Pavone no ve puerta. Su sustituto, José Mari… Sin comentarios.
Lopera lanzó el órdago a su entrenador y éste lo ha recibido a su manera. La situación se hace cada vez más insostenible, pero es que los fichajes, o supuestos refuerzos, se encargan de demostrar que ni están ni se les espera, algo que debe anotarse en Jabugo.
Diario de Sevilla, 5 de Noviembre 2007.
P.D, como vemos los refuerzos no aportan nada. Mi opinión, es que año tras año tenemos peor equipo. A la tercera será la vencida ... (nos vemos en segunda jugando el derby chico).
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