DOSSIER 1: TEMPORADA 1992-93

1992-93: Empieza Jorge D´Alessandro. Bajo la secretaría técnica de Pedro Buenaventura, llegan Gordillo -Ya de vuelta del Real Madrid -, Diezma, Kasumov, Monreal y Merino II (ambos del desaparecido CD Málaga) y Ríos.
El entrenador argentino, es destituido en la jornada 26, tras perder por 2 goles a 0 en la Arboleda de Palamós y dejar al Club en el 7º lugar de la clasificación a sólo 3 puntos de la Promoción y a 6 del ascenso, dentro de una liga aun de 2 puntos.

El sustituto, fue José Ramón Esnaola. Quien llegó a finalizar el Campeonato con los verdiblancos, dirigió 12 encuentros, habiendo perdido 4, empatado 1 y perdido 7. Dándose la circunstancia que se ganaron los últimos 5 partidos de manera consecutiva, pero la distancia era grande para el ascenso, que fue logrado por Lérida y Valladolid (52 y 57 puntos respectivos), mientras que para la promoción bastaron 50; quedándose finalmente los béticos con 43 puntos. Como puntos negros dentro de la égida del portero vasco, una derrota por 0-1 ante el Éibar, otra derrota en casa ante el Barcelona B por 0-2, y un empate a dos goles ante el CP Mérida, al que íbamos ganando por dos a cero.

Lopera, a modo de castigo y tras perder en el Sardinero, condenó a la plantilla a realizar sus desplazamientos en autobús; viajes éstos, para colmo, culminados por victoria cuando ya el ascenso era imposible.

Continuaremos con la siguiente Temporada, la 93-94.

Sí sí, hagamos una lista y refresquemos la memoria:

1992-1993: Jorge D´Alessandro, cesado a mitad de campaña y sustituido por Esnaola, no se logra el ascenso....Fracaso.

1993-1994: Sergio Kresic, cesado a mitad de campaña y sustituido por Lorenzo Serra Ferrer.

1997-1998: Luís Aragonés, se marcha del equipo en pleno verano tras clasificarlo de rebote para la UEFA (gracias a cierto gol de Mijatovic en la final de la Copa de Europa de 1998), octavo en la tabla con más goles encajados que convertidos, eliminado de la Copa en cuartos ante el Zaragoza y de la Recopa en la misma eliminatoria ante el Chelsea....Sin pena ni gloria.

1998-1999: Empieza el baile tras la marcha del actual seleccionador; Antonio Oliveira, entre sus defectos, no reconocer a la Vírgen de Fátima en el despacho de Lopera, sólo estuvo diez días en el cargo; Vicente Cantatore, dejó al equipo en descenso en los dos meses largos que estuvo al cargo de la plantilla, su mayor logro, vencer al Real Madrid en el Bernabéu; Javier Clemente, vino para salvar al equipo y lo logró con un mes de antelación, sus tiras y aflojas con Lopera y la afición han quedado para la historia de este club....Fracaso absoluto.

1999-2000: Carlos Timoteo Griguol, un verdadero desastre pleno de indolencia, incapacidad y poca gracia. Este señor jamás se enteró de para qué vino al Betis, aunque peor le fue al señor Hiddink, que se hizo cargo del equipo en la segunda vuelta para hacer el ridículo. Hadzibegic vino tarde y se enfrascó en peleas internas que le defenestraron totalmente de la entidad....De vergüenza total.

2000-2001: Fernando Vázquez, uno de los artífices del Betis campeón de Copa en 2005. En sus manos estuvieron Varela, Arzu, Capi, y descubrió a Joaquín, la incomprensión de la afición, la durísima campaña en segunda aquel año con tres campeones de Liga y la impaciencia de Lopera le sentenciaron; sustituido por Luis del Sol, una solución de urgencia que al menos sirvió para ascender, el veterano ídolo tampoco quiso seguir enfrascado en peleas internas con Hadzibegic, Gordillo y compañía.

2002-2004: Víctor Fernández Braulio, "todo un caballero y una bellísima persona" responsable del acomodamiento del personal, se enfrentó a sus jugadores día sí y día también, y jamás alzó la voz para exigir refuerzos a pesar de las mediocres campañas. Tras un comienzo fulgurante perdió fuelle y sólo su elevadísimo caché le impidió a Lopera despedirle....Fracaso.

2006-2007: Xabier Irureta, un verdadero desastre en lo táctico, no fue capaz de hacer una buena pretemporada en lo físico, y no levantó la voz cuando el club le mintió vendiendo a nuestros jugadores franquicia. Luís Fernández, un auténtico disparate lo que montó el tarifeño en el Betis, confundió llevarse bien con el dueño del club con disparar con bala contra todo lo que se moviera; afición, eterno rival, medios, etc....Paco Chaparro, le vimos poco, pero me temo que dentro de poquito le veremos más a menudo, espero equivocarme....Fracaso total.